Buscan romper la polarización nacional

Un nuevo partido dentro del Frente

Participación, Ética y Solidaridad. Con esos principios, dirigentes que se apartaron de Elisa Carrió apuntan a construir una fuerza alternativa a los bloques antagónicos que hoy dominan la escena política.

De la redacción de El Litoral

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Recoger la experiencia de la militancia en el campo popular y la evolución del concepto del “estado de bienestar”, después de la pulverización menemista. Proponer el debate y la búsqueda de consensos como alternativa para romper la lógica del antagonismo instalada entre el kirchnerismo y la oposición más cerrada, instalando una agenda que recupere las banderas de la justicia social, los derechos humanos, la soberanía territorial y la distribución de la riqueza. Abrir el juego para que los sectores sociales y comunitarios sin identificación partidaria puedan encontrar un espacio donde expresar y confrontar ideas, y participar activamente de un proyecto de país.

Tales son los postulados con los cuales sale al ruedo un nuevo partido político santafesino. Participación, Ética y Solidaridad es el tríptico de valores que sustenta la propuesta y que, a la vez, se traduce en una sigla que -forzando un poco el acrónimo- los explica y los contiene: Pares.

El partido es impulsado por dirigentes políticos de reconocida trayectoria, ligados en su momento a Elisa Carrió, y parte de la diáspora que se produjo entre los seguidores de la carismática líder, en desacuerdo con algunas de sus posturas y alianzas. En la provisoria mesa promotora, figuran la diputada nacional Verónica Benas y el diputado provincial Antonio Riestra, que explicaron a El Litoral las bases de la propuesta.

Un escenario complejo

Riestra explica el acercamiento a Carrió, junto a Alberto Piccinini, como la continuidad de una larga militancia en el sector social y gremial (Amsafe y CTA) y a la credibilidad que la fundadora del ARI proyectaba en la sociedad argentina después de la crisis del 2001 y el clamor de “que se vayan todos”.

“Hoy, todo esto está mucho más complejizado. Ahora, el kirchnerismo de alguna manera antagonizó las posiciones, estamos en un grave problema en la política, los blancos y los negros, los buenos y los malos. No es una buena perspectiva para quienes entendemos que la política es el arte de la mediación, de la negociación, del acuerdo, de hacer posible aquello que individualmente o sectorialmente no se puede”, razonó.

En ese plano, Riestra admitió que “encontrar algún punto de síntesis es difícil, porque los partidos siempre han representado intereses sectoriales. Pero en los últimos años, estos intereses han tenido más que ver con la sociometría, las encuestas y los estudios de opinión, que con los programas. Creo que hay límites que la política se tiene que poner, por ejemplo de con quién se acuerda”.

Acuerdos y principios

Y en ese punto, cifran el alejamiento de las filas de Elisa Carrió que, en el caso de Benas, le valió duras críticas por haberse producido a poco de haber sido electa como parte del espacio de la chaqueña. “Con quien acuerda uno define la identidad política de un espacio. No se trata de negarse a hablar con todos los sectores, sino a quien elige uno para asociarse por alguna conveniencia particular y dejando de lado el interés de la gente, que es lo que uno pretende representar. Sobre todo de los sectores más desprotegidos y necesitados, cuya voz tampoco se escucha”, sostuvo la legisladora.

Y coincidió con su colega en que “el gobierno nacional fomenta una situación de contradicción absoluta e imposibilidad de diálogo, llegando al punto de promover agresiones, descalificaciones, todo eso dificulta enormemente las cosas. Y ni hablar de la oposición desestabilizadora, de aquellos que tienen en su práctica política actitudes destituyentes. Nosotros nos venimos a parar en un espacio en donde el diálogo, la posibilidad de consenso y la defensa clara de intereses públicos, nos diferencian”.

Estrategias

Esa articulación se está dando a nivel nacional dentro del bloque Solidaridad e Igualdad -liderado por Eduardo Macaluse-, junto a referentes como Víctor de Gennaro y como parte del interbloque Proyecto Sur, de Pino Solanas. Que, a la vez, busca articular acciones con el socialismo, el GEN de Margarita Stolbizer y el sector de Luis Juez. “Estamos generando una fuerza no menor, de al menos 25 diputados, para instalar un diálogo forzoso por parte de los otros dos grupos, porque sin nuestra opinión ninguna ley tiene posibilidad de obtener el acompañamiento necesario. Esta forma de presión política legítima, nos permite tener una presencia fuerte y, con autonomía, acompañar lo que nos parece bien y cuestionar lo que nos parece mal”, resumió Benas.

En tanto, en la provincia está clara la filiación del Frente Progresista Cívico y Social, “una experiencia inédita en el país, que pudo reunir espacios políticos diversos desde el punto de vista ideológico, sobre la base de acuerdo que pudimos llevar adelante. Fortalecer el Frente Progresista es nuestra prioridad, y pensamos que hay que promover una experiencia similar a nivel nacional”.

Diputado provincial Antonio Riestra y diputada nacional Verónica Benas: la apuesta es fortalecer la coalición en la provincia y recrear ese esquema a nivel nacional. Foto: Néstor Gallegos