El dilema de Maradona para el sábado

¿Cómo se puede equilibrar el equipo sin sacar un delantero?

Se habla de que debe jugar Verón, pero nadie se aventura a decir por quién. ¿Se le puede sacar un defensor a una retaguardia que no es segura?, ¿se le puede sacar un delantero a un ataque que es lo mejor del equipo?

 
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Carlos Tevez fue la gran figura frente a México, con dos goles incluidos, con lo cual se ganó con creces un lugar en el equipo. La gran cuestión es cómo encontrar estabilidad en la parte defensiva.

Foto: Agencia EFE

Enrique Cruz (h)

(Enviado Especial a Johannesburgo, Sudáfrica)

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Mientras Pelé se dedica a criticar a Dunga porque entiende que la selección brasileña es defensiva y en tanto muchos dicen que Argentina y Brasil todavía no jugaron contra “nadie”, minimizando las victorias claras que los dos consiguieron ante México y Chile (más Brasil, con un contundente 3-0), Maradona debe tener en su interior las mismas incógnitas que tantos miles de argentinos que ven a una selección con enorme poderío ofensivo pero sin equilibrio ni marca del medio hacia atrás.

Está claro que las individualidades son las que conforman un equipo, que no se puede armar un gran equipo a partir de flojas individualidades y que es mucho más fácil a la inversa, es decir, valerse de las individualidades para llegar al buen equipo.

Maradona ha encontrado una respuesta ofensiva que lo tranquiliza. Es cierto que Messi no debe haber estado nunca tantos partidos sin marcar goles. Cuatro encuentros sin que se le abra el arco parecen un abismo para él, pero en este Mundial está mostrando rendimientos que jamás había tenido antes con la selección mayor.

Es cierto también que Higuaín es el goleador del equipo y que Tevez es uno de los mejores jugadores de Argentina y, quizás, del propio Mundial. A partir de este concepto, no se puede pensar en un equipo sin la presencia de alguno de los tres delanteros. Ni tampoco se puede pensar en que Maradona le puede tener preparada una función diferente a la que ellos son capaces de desarrollar. Messi puede jugar de enganche o arrancando por derecha y Tevez puede hacerlo por todo el frente de ataque. Pero ni Messi, ni Tevez, ni Higuaín pueden jugar como alguna vez se lo hizo con Balbo o con Dezzotti arrancando de carrileros, replegados y con obligaciones de marca que ellos no sienten ni pueden desarrollar en forma medianamente útil para el equipo.

¿Por qué Verón?

Argentina adolece de dos cuestiones en el mediocampo que Verón puede solucionar: 1) la soledad de Mascherano para contener; 2) la falta de volumen de juego para manejar la pelota. Verón, parado de doble cinco al lado de Mascherano, le puede aportar al equipo ese equilibrio que hoy no tiene. Argentina está partida entre los que atacan y los que defienden, con un sector central que, por momentos, es tierra de nadie.

Por Verón, el circuito futbolístico puede mejorar sustancialmente. Y con Verón, Argentina podría tener el acompañamiento defensivo justo para Mascherano. Pero como Verón tiene que jugar al lado del capitán, la pregunta es: ¿quién sale?, ¿alguno de los volantes laterales?, ¿un defensor?, ¿un delantero?

No considero que Verón pueda jugar por los costados, ya no siente esa función y no creo tampoco que la represente con eficacia. Sería bueno tenerlo a Verón-Mascherano para contener y a Maxi Rodríguez por un lado y Di María por el otro para largarlos como flechas por los costados. Pero a partir de este razonamiento se debería pensar en sacar un delantero o un defensor. Y ahí Maradona cae en el propio laberinto que le tejió el equipo. De los de arriba no puede tocar a ninguno porque andan bien. De los de atrás, tampoco, porque el equipo necesita encontrar una firmeza defensiva que hoy no muestra y que difícilmente consiga con uno menos.

Una decisión difícil

Maradona va a tener que optar por lo mejor para el equipo. ¿Y si juega Clemente Rodríguez por derecha para hacer la doble función de marcador-volante y se resigna a Maxi Rodríguez?, es válida la opción. Pero Diego ha destacado el trabajo de Otamendi, tiene a Samuel listo para jugar y no creo que saque a Demichelis, sobre todo por el conocimiento que el defensor tiene del fútbol alemán. Además, Demichelis es uno de los tres jugadores que ha disputado la totalidad de los partidos (Romero, él y Messi).

La decisión es difícil y, a priori, representa un riesgo a asumir por Maradona. Él es quien debe descifrar de qué manera se le puede y se le debe jugar a Alemania. En los cambios que hizo durante los partidos, Diego tuvo la virtud de hacer buenas lecturas de los partidos. Ahora le ha llegado, quizás por primera vez, el momento de tomar decisiones en el arranque para fortalecer un equipo que está partido en dos. Complica seriamente a las defensas cuando ataca, pero se complica sólo cuando defiende.

Es cierto que esta instancia de cuartos de final pone al equipo a tres victorias de la gloria. Pero también es verdad que a pesar de que el resultado es, más que nunca, lo que importa, tampoco hay que pensar que sea lo único. Un resultado no sale de la nada, se construye con una expresión colectiva superior a la del rival. En este aspecto, más allá de lo que diga Pelé, el mejor equipo es Brasil. Tiene jerarquía ofensiva y equilibrio. Pelé dice que Brasil juega con un solo delantero, pero no es así: Kaká es un atacante más, Robinho también, Elano llega y pisa el área reiteradamente, los marcadores de punta se suman con insistencia. Jamás Brasil va a atacar con un solo delantero. Y si a esa fortaleza ofensiva se le suma el orden táctico y la solvencia para defenderse, no le falta nada.

Brasil, España, Argentina, Alemania, Holanda y hasta el propio Uruguay, por la calidad de sus delanteros, son equipos con una fuerte impronta ofensiva. Por eso, uno avizora un desenlace de torneo que posiblemente haga olvidar cierto amarretismo con el que se jugó hasta este momento.

Ser mezquinos como Italia, lleva al fracaso y a la decepción. El Mundial lo terminará ganando el equipo que más arriesgue, más allá de los cuidados que se tomen. Es que de esto también hay que valerse para conseguir una victoria.

¿Servirá la victoria del 3 de marzo?

Argentina le ganó en Stuttgart el último enfrentamiento a Alemania. Fue el 3 de marzo pasado, con gol de Gonzalo Higuaín, luego de un partido en el que la selección de Diego produjo una buena actuación, sobre todo manteniendo el orden colectivo en todas sus líneas.

Maradona tiene bien fresco el recuerdo de ese partido y posiblemente aplique algo de lo que le dio tan buen resultado. Las circunstancias son otras; las urgencias, también. De todos modos, así como tanto se habla del poderío alemán, ellos estarán exprimiéndose el cerebro pensando en Messi, Higuaín, Tevez y compañía.