Al margen de la crónica

Antigua leyenda, nueva versión

 

Hace casi treinta años (concretamente en 1981) el interesante aunque irregular director John Boorman (conocido por obras trascendentes como “Defensa” (1972) y “La selva esmeralda” (1985) y otras más recientes y flojas como “El sastre de Panamá”) dirigió un filme que, para los cánones imperantes en aquella época, donde todavía los efectos generados por ordenador eran muy precoces, fue espectacular.

Bajo el título “Excalibur”, Boorman adaptó la popular leyenda medieval del rey Arturo y se rodeó de grandes actores como Liam Neesom, Gabriel Byrne y Helen Mirren para cubrir los roles protagónicos.

Y tuvo un notable recibimiento de público y crítica, ya que pese a cierta morosidad narrativa se convirtió en la mejor adaptación de esta historia en la pantalla grande, sólo tal vez superada por la entretenida y encantadora versión animada creada por Disney como “La espada en la piedra”, con un risueño mago Merlín y otros divertidos personajes muy al estilo familiar del famoso creador de dibujos animados.

Para 2012 se espera una remake de la película de 1981. Todavía no trascendió cual será el plantel actoral que le dará vida, pero sí se sabe que el director elegido para el trabajo es Bryan Singer, lo que abre interesantísimas expectativas. Para justificar esta afirmación basta recordar que este realizador generó en los últimos quince años algunas obras notables de la cinematografía moderna como “Los sospechosos de siempre” (brillante guión al servicio de un grupo de intérpretes en estado de gracia, en especial un oscarizado Kevin Spacey) la olvidada pero notable “El aprendiz” y las dos primeras partes de la saga “X-Men”. Sin omitir la más reciente “Valkiria”, ambientada en la Segunda Guerra Mundial.

Todo permite suponer que una aventura medieval con magos, hechizos, caballeros andantes, enfrentamientos con espadas y bellas princesas representa una materia prima de gran potencial para un director de las características de Singer.