señalan serios problemas para emprendimientos del sector

Comedores y pubs: piden flexibilidad en la aplicación de nuevas ordenanzas

Son alrededor de 10 locales ubicados en la zona de la Recoleta y el centro que deberían ajustarse a las nuevas disposiciones antes del 31 de agosto. Los empresarios advirtieron sobre la posibilidad de despidos y perjuicio económico. Desde la Secretaría de Control reafirmaron la decisión de continuar con el cumplimiento de las ordenanzas.

Comedores y pubs: piden flexibilidad  en la aplicación de nuevas ordenanzas

En declaraciones a la prensa, los empresarios protestaron por la actitud de las autoridades de control.

Foto: Flavio Raina

 

 

De la redacción de El Litoral

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Para manifestar su preocupación por la obligación de ajustarse a la norma que ordena terminar con la actividad bailable en comedores y pubs el 31 de este mes, los propietarios de los comercios realizaron una conferencia de prensa.

El ejecutivo resolvió en diciembre del año pasado, en el marco de la emergencia nocturna decretada en la ciudad, que las confiterías bailables se reubiquen a la vera de la Ruta Nº 168 y los comedores y pubs, finalicen la actividad bailable y se ajusten a la nueva regulación el próximo 31, entre otras disposiciones.

Carlos López, titular del restó Winona, puntualizó que las ordenanzas no son justas y carecen de sentido común. “Para nosotros permitir que la gente baile es un complemento, es una modalidad que está funcionando en Palermo Soho, Las Cañitas”, señaló y agregó: “Queremos un lugar y una prórroga, como se lo dieron a los bolicheros”. El plazo de relocalización determinado para los boliches es de tres años aproximadamente.

López explicó que “la cocina no deja grandes ganancias, y darle la posibilidad a la gente que baile es una oportunidad para hacer frente a los gastos, que son muy altos”.

A su vez, el empresario afirmó que podrían cumplir con las normativas, si les ofrecen una salida. “Existe una cámara de bolicheros que arreglaron por su lado. Lo que nosotros hacemos es una previa que está de moda y que es lo que la gente de entre 25 y 50 años quiere. Nos exigen como a una disco, pero no nos dan las mismas posibilidades”, protestó López.

Por su parte, Emilio Trucco, representante sindical del rubro, se ocupó de aclarar que habría personal que perdería su empleo.

“No creo que ninguno de los empresarios pueda soportar la misma cantidad de personal. Con la modificación del horario de ingreso, quedaron 140 compañeros sin trabajo, con esta nueva orden van a ser 300”, fustigó Trucco y sumó: “si el intendente se hace cargo de esos compañeros, nosotros nos ponemos de su lado”.

Finalmente, Félix Cortopassi de Dublin dijo estar en una encrucijada como comerciante. “Nos vemos obligados a cesar con nuestra actividad o a modificarla esencialmente, lo que nos afecta por completo”, mencionó y adelantó que la pretensión de los empresarios agrupados es hacer una presentación ante el Ejecutivo solicitando una audiencia para realizar los planteos del caso.

“Queremos un diálogo maduro, no queremos que queden trabajadores en la calle. Hasta ahora no se ha buscado el consenso, sino que vemos que se legisla sin conocer sobre la actividad”, detalló Cortopassi.

Inflexible

Consultado sobre los dichos de los titulares de comedores y pubs, el secretario de Control municipal, Cornelio Collins fue concluyente: “Estamos aplicando las nuevas disposiciones en la materia que son la ordenanza Nº 11.653 y la Nº 11.622 de emergencia nocturna. El que no se ajuste a esas directivas legales, no respete los vencimientos y realice más de la actividad permitida deberá cesar sus funciones”.

El funcionario además agregó que la reglamentación mencionada, “circunscribe la actividad de los pubs a lo que caracteriza el rubro que es un bar donde se puede dar un espectáculo pero no bailar que es una deformación de ese rubro”.

En el caso de los comedores con espectáculos -que puede ser bailable de manera accesoria- deberán también respetar el mínimo de espacio permitido de tres metros cuadrados por persona, dejar el 70% para comedor y el resto para pista y no cobrar entradas.