El mayor rescate en profundidad de la historia

Una tercera sonda se aproximó a

los mineros atrapados en Chile

Alimentación, comunicación y ventilación son las tres funciones vitales que cumplirán cada uno de los ductos construidos.

Una tercera sonda se aproximó a los mineros atrapados en Chile

Tres son los ductos que utilizarán los socorristas para mantener en buenas condiciones, durante los más de tres meses que dure la operación de rescate, a los mineros atrapados 700 metros bajo la tierra. La perforadora que hará el hoyo principal, por donde saldrán los mineros, es una Raisebore Strata 950, de origen sudafricano, de la estatal cuprífera chilena Codelco, que perforará a razón de 15 metros diarios. Foto: AGENCIA DPA

 

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EFE-Télam-DPA

Una tercera sonda se aproximaba hoy a la galería en que 33 obreros permanecen atrapados desde el pasado 5 de agosto, a casi 700 metros de profundidad, en una mina del norte de Chile, informaron los responsables de las tareas de rescate.

La sonda alcanzó ya los 530 metros de profundidad, dijo a los periodistas Andrés Sougarret, un ingeniero de la estatal Corporación del Cobre (Codelco) que ha encabezado las perforaciones efectuadas en la mina para encontrar a los mineros.

La primera sonda, que permitió verificar que los trabajadores atrapados estaban vivos, llegó a la galería el pasado domingo y la segunda, según confirmó Sougarret, lo hizo a las 22.20 GMT de este lunes, a una profundidad de 678 metros.

Estas sondas permitieron la instalación de un teléfono para comunicarse con los atrapados, como vía para que respondieran un cuestionario sobre su estado de salud y para enviarles alimentos líquidos.

“Estamos bien y con hambre”, fue lo primero que dijeron a través del teléfono, para después celebrar que unos compañeros de quienes desconocían su suerte tras el derrumbe del 5 de agosto habían también sobrevivido. En la comunicación, algunos bromearon pidiendo cervezas y a coro entonaron el himno nacional de Chile.

Sobre las tres sondas utilizadas, el experto Sougarret precisó que “ahora vamos a poder dividir las funciones. La primera sonda será para la entrega de alimentos de forma expedita. La segunda para comunicarnos permanentemente y buscamos que la tercera nos permita mejorar la ventilación”.

En buenas condiciones

Sougarret se manifestó sorprendido de las buenas condiciones físicas de los mineros, que hoy cumplen diecinueve días atrapados, desde que el pasado 5 de agosto un derrumbe gigantesco bloqueó la salida de la mina San José, situada en las cercanías de la ciudad de Copiapó, en la región de Atacama.

Los mineros atrapados “tenían mucho conocimiento, noción del tiempo, el día y la hora que era. La verdad es que la condición de ellos es óptima”, comentó el experto, al revelar detalles de las conversaciones mantenidas con los obreros tras la habilitación de un teléfono ayer.

En tanto, Sougarret hizo recomendaciones a los atrapados con respecto a los sectores de la galería en que deben mantenerse, ante la eventualidad de nuevos derrumbes.

El ministro de Minería, Laurence Golborne, dijo que los mineros buscaron en los primeros días una salida por sus propios medios a través de la chimenea de ventilación, pero se encontraron con que carecía de una escalera.

La instalación de esa escalera era una de las exigencias que los propietarios de la mina debieron cumplir en 2008, cuando se autorizó la reapertura del yacimiento, tras haber sido clausurado el día anterior.

Los trabajadores, que tras establecerse la comunicación han comenzado a recibir alimentos líquidos y atención de Salud, se mantuvieron con la ingesta cada 48 horas dos cucharadas de atún en conserva, medio vaso de leche y media galleta.

La supervivencia de los mineros ha sido considerada un milagro en Chile y la tarea que sigue no le va en zaga, según señaló el senador de la zona Baldo Prokurica.

Una sonda llamada “Raisebore”, facilitada por la estatal Corporación del Cobre (Codelco), de 30 toneladas de peso, fue elegida para excavar en la mina San José un conducto de unos 38 centímetros de diámetro, que posteriormente será ampliado a unos 66 centímetros, para rescatar por ahí a las víctimas.

La máquina que, según los expertos podría tardar hasta 120 días en la tarea, pertenece a la División “Andina”, de Codelco y sus partes comenzaron a ser instaladas ayer en la mina San José, a unos 830 kilómetros al norte de Santiago, donde se ha desarrollado el drama.

Pedido a la Nasa

Por otra parte, Chile pedirá ayuda a la agencia espacial estadounidense Nasa para mantener vivos a los 33 mineros atrapados, dijo hoy el Ministerio de Salud.

Las autoridades chilenas, que tardarán meses en rescatar a los mineros, pedirán acceso a tecnologías que permitan mantener sanas a personas atrapadas en espacios pequeños, con acceso limitado a comida.

País desigual

La tragedia laboral, la peor en 65 años en Chile, puso en primer plano el debate por las condiciones laborales en Chile, uno de los países más desiguales del mundo, según Naciones Unidas.

El presidente Sebastián Piñera, uno de los hombres más ricos del país, anunció la creación de una comisión que propondrá reformas laborales, para poner al país a la altura de las naciones de la Ocde, entidad de países industrializados que Chile integra.

/// la clave

Una tercera sonda se aproximó a los mineros atrapados en Chile

Las familias de los mineros atrapados esperan ahora de buen ánimo que las tareas de rescate no se compliquen y sus seres queridos puedan ser sacados de la mina lo antes posible. Foto: AGENCIA DPA

El país debate por la seguridad

Al menos 240 trabajadores de las minas de la región de Antofagasta, al norte de Chile, murieron a lo largo de 20 años -un promedio de uno por mes-, según un estudio de la Federación Minera de Chile (FMC), mientras el país entero debate sobre la seguridad de los operarios.

“La estadística realizada por nuestra entidad revela una verdad que nos avergüenza: las leyes que regulan la actividad permiten que las empresas trabajen al menor costo y esto se hace abaratando las medidas que protegen a las personas”, dijo en diálogo telefónico Agustín Latorre, representante de FMC, que nuclea a 12 mil mineros de todo el país.

Latorre señaló que “alguien va a tener que hacerse cargo de los daños que sufran las familias de los 33 mineros de San José”, y “los empresarios tendrán que responsabilizarse”.

El domingo, el dueño de la mina, Alejandro Bohn, había dicho a un canal de televisión chileno: “No es el momento de asumir ni culpas ni perdones, hay procesos de investigación. En estos momentos hay que estar”, mientras que hoy anunció que no tenía certeza de poder seguir pagando los salarios.

Latorre denunció que “favorecidos por el precio alto del cobre últimamente muchas empresas medianas y chicas, como la de San José, se embarcan en explotaciones como éstas”.

Repatriación

El cónsul boliviano en Chile, Walker San Miguel, ofrecerá repatriar a la familia del minero Carlos Mamani, quien permanece atrapado unos 700 metros bajo tierra en el desierto chileno, informó la agencia estatal de noticias ABI.

“Voy a estar en Copiapó, en la mina San José para entrevistarme personalmente con Johnny Quispe (suegro de Carlos Mamani), con Velky Quispe, que es la esposa de Carlos, y con autoridades mineras que están encargadas del rescate de los 33 mineros”, dijo San Miguel. Mamani, de 24 años, cumplía su quinto día de trabajo cuando se produjo el derrumbe que lo ha dejado sepultado con vida junto a 32 mineros chilenos.

/// el dato

1 millón

de dólares Para los mineros

El músico, filántropo y millonario minero chileno Leonardo Farkas prometió conseguir un millón de dólares para las familias de los trabajadores atrapados en el yacimiento.

El empresario, que en el año 2009 pensó en ser presidente de Chile, llegó a las afueras de la derrumbada mina San José para dar los primeros 10.000 dólares a cada una de las familias.

Desde allí, este magnate del hierro anunció que iniciará una campaña solidaria con los demás empresarios mineros para reunir el millón de dólares prometido. La donación, recibida con alegría por los familiares de los mineros, llegó el mismo día en que los dueños de la mina informaron que no sabían si seguirían pagando los sueldos de los mineros.