Siguen sin ratificación los acuerdos para evitar juicios al Estado.
El PJ exige ahora 30 % cash en
deudas con bancarios y policías
Sobre tablas el peronismo aprobó un proyecto de ley que modifica los convenios extrajudiciales que -tras un año de negociaciones- habían alcanzado el la Fiscalía de Estado y los abogados de bancarios y policías.
Luis Rodrigo
En veloz sobre tablas, sin discusión en comisiones -ni cifras a la vista sobre cómo afrontar con recursos genuinos una erogación imprevista- el Justicialismo dio ayer un golpe de timón (de efectos aún impredecibles) a las negociaciones que llevó a cabo el Poder Ejecutivo con los bancarios transferidos y los policías, con los que el Estado provincial está en deuda.
El PJ cambió la letra del mensaje con que el Ejecutivo planea firmar lo acordado con los dos sectores, históricamente perjudicados por decisiones sobre el pago de sus salarios tomadas desde mediados de los ‘90 hasta ahora, y que vulneran derechos adquiridos de los trabajadores.
Se trata de la deuda -recién ahora reconocida- del Estado con los empleados del ex Banco Provincial cuyos derechos laborales de convenio salarial fueron conculcados por las administraciones de Jorge Obeid y Carlos Reutemann, cuando esos bancarios prefirieron quedar en el Estado, tras la privatización de la entidad. Y de suplementos de la policía que fueron suprimidos y terminan por convertirse en demandas contra el erario público. La mayoría justicialista redactó un nuevo modelo de convenio extra judicial: obliga al Estado provincial a afrontar en efectivo (cash) un 30% de lo adeudado y el resto en bonos a emitir por el sector público.
Qué gestión paga
Por toda explicación económica respecto de cómo afrontar su pago, la oposición señaló que al día de hoy existe un superávit de unos 334 millones de pesos (y que el Ejecutivo no le responde los pedidos de informes sobre la recaudación real, muy alejada de los 1.300 millones de déficit que se había pronosticado).
La diferencia entre oficialismo y oposición no es menor: el proyecto que envió en gobernador Hermes Binner, que aprobó la Cámara de Diputados y que ahora ha modificado el Senado, tenía previsto pagar toda la deuda con esos títulos, con lo que se iba a diferir para las cuentas públicas (y la actual gestión) los efectos de librar esas órdenes de pago a futuro
Antecedente muy reciente
Actualmente, en la Legislatura hay dos medias sanciones: la versión del Ejecutivo que ha aprobado la Cámara de Diputados (100% en títulos) y otra del Senado (30% cash y 70% en bonos), y con una limitación de hasta 85 millones de pesos.
Para entender qué puede ocurrir con las aspiraciones de policías y bancarios hay que revisar con qué números cuenta cada posición en cada recinto: el oficialismo tiene en la Cámara Baja la mayoría automática que le reserva la Constitución, pero no el número más importante, los dos tercios de que por el contrario- sí goza la oposición en el Senado.
Ya le ha ocurrido al gobierno de los socialistas, los radicales y los demoprogresistas que el peronismo provincial unido (reutemanistas, obeidistas y kirchneristas no muestran diferencias a la hora de votar) le corrija el Presupuesto 2010, mediante el mecanismo de las 5 revisiones y los dos tercios que garantizan una representatividad territorial mayor en el mapa provincial: son 13 senadores sobre 19 departamentos.
Es por ese antecedente, más la presión social que involucra la situación de los bancarios y el cobro de deudas de la policía, que el senador por Rosario, Juan Carlos Zabalza, ayer se apuró a decir: “PJ no quiere que haya una solución ni un acuerdo con los bancarios y los policías”.
Nada diplomático (y aún menos conocedor de los celos de los cronistas) el legislador socialista sugirió que para él ese “debería ser el título” de una sesión que fue seguida con atención por propios y extraños. Se vuelve a poner en muy fuerte tensión la relación del oficialismo y la oposición.
De caras y discursos
“Yo me pregunto con qué cara se puede venir con un proyecto así, de esta naturaleza, después de tantos años sin solucionar este problema”, fue la dura respuesta de Zabalza tras la exposición del representante por La Capital, Juan Carlos Mercier.
El jefe del (minoritario) bloque de senadores del oficialismo no se ahorró adjetivos para con el ex ministro de Hacienda, quien le contestó que “el que pone la cara aquí es el gobernador (Hermes Binner) que firmó los acuerdos que eran en su totalidad en efectivo, no el 30%, sino todo, y luego envió un mensaje para pagar con bonos”, interpretó Mercier. El ex funcionario dijo que el oficialismo, mediante correos electrónicos anónimos, “en los que nunca dan la cara está buscando en el Archivo General de la Provincia” información en su contra.
Antes Mercier subrayó: “a las cosas las hago de frente, dando la cara y cuando me equivoco pido disculpas”.
Zabalza señaló la posición incoherente del justicialismo que generó desde sus gobiernos la deuda que ahora se pretende saldar, “debido a la privatización del Banco de Santa Fe” y entonces Mercier le retrucó: “no es verdad que la deuda venga de privatizar el banco, proviene de supuestas malas liquidaciones salariales”. No se percató a tiempo de las responsabilidades que, precisamente, en esa acción posterior a la venta de la entidad- como ministro de Hacienda le caben.
“Cambiar lo que ha sido discutido y acordado, luego de un trabajoso diálogo entre partes significa buscar que esto no se concrete”, advirtió Zabalza.