Frente a Boca Unidos, Unión acumuló su tercera derrota consecutiva que acrecienta la preocupación...

Destruyó con dos errores lo que construyó en merecimientos

El equipo no jugó un gran partido pero había empatado con justicia y a dos minutos del final. Se distrajo y le ganaron en tiempo extra. Antes, un chiquito le cabeceó en el área y metió el primero.

Destruyó con dos errores lo que construyó en merecimientos

Genio y figura

El “Changuito” Cárdenas jugó un partido de gran jerarquía, aunque no alcanzó. Tuvo una jugada a su favor, con un remate impresionante desde afuera del área que sacó Nereo. En la foto, saca con simpleza ante la marca de Visconti.

Foto: gentileza El Litoral de Corrientes

 

Enrique Cruz (h)

(Enviado Especial a Corrientes)

Sigo pensando que este es un equipo en formación. Y el análisis realista de Kudelka, después del partido, describe claramente la situación: “Soy defensor de los trabajos a largo plazo, pero también soy consciente de que en el fútbol argentino, cualquier “largoplacismo’ depende de los resultados”. Todo esto, agravado por un cuadro de situación negativo en el hincha, que se ha cansado de transitar por este durísimo camino del ascenso, con muy pocas expectativas favorables y apenas con un solo campeonato en el que se llegó a pelear algo (el de la Promoción con Gimnasia de Jujuy).

El hincha piensa más con el corazón que con la cabeza. Y es algo que no puede hacer ni el dirigente ni el entrenador. Máxime en el marco de esta receta en la que Unión se ha “propuesto” en cambiar los planteles año tras año. Por allí, un equipo nuevo puede tener como resultado final el éxito. Pero hasta que ese conjunto de voluntades se amalgama, se necesita tiempo y paciencia. Porque si se traen 12 jugadores, no sólo el técnico tiene que conocerlos a plenitud en la competencia, sino también ellos conocer al entrenador. Lo dijo Kudelka en la semana y tiene razón. Y además, trayendo 12 jugadores, el margen de error se agigante. No tengo la menor duda de que algunos de esos 12 refuerzos no jugará o no rendirá.

Ojalá el paso del tiempo permita que ocurran hechos positivos para Unión. Pero si el resultado final no es bueno, pasará lo de todos los años: se irán los jugadores y habrá que salir a reemplazarlos con otra cantidad parecida de refuerzos. Así, no hay plantel ni economía que aguante. Por eso, Nicolás Frutos es el hombre más importante que tiene Unión por estos tiempos. Más allá de que no comparta —el actual coordinador— un concepto de este periodista (creo que es imposible que un trabajo en inferiores pueda dar resultados en seis meses), él cree que a mediados del año que viene se podrá armar una base de jugadores, en cantidad y calidad, para que la cantidad de refuerzos decrezca. Ojalá lo consiga.

Pero no quiero seguir hablando de este tema, pues sería desviar la atención de lo que el hincha quiere saber y es cómo está Unión y qué pasó ayer en Corrientes. El momento de Unión es preocupante por las tres derrotas consecutivas, pero pregunto: ¿no es natural que esto haya pasado?, en parte sí. Y ayer, la derrota se dio en un marco de injusticia y de fallas puntuales en los dos goles que, si se cometen, está bien que se pierda. No puede ser que un jugador de 1,70 metros de altura gane con tanta comodidad adentro del área y cabecee un córner (no una jugada normal, sino una de pelota parada); y no puede ser que habiendo empatado el partido después de tanto esfuerzo y a dos minutos del final, de un saque de costado se produzca una jugada de peligro, un desborde, un centro atrás y un gol que tiró por la borda todo lo que, con pocos aciertos, muchos defectos pero enorme voluntad, se había propuesto durante todo el segundo tiempo para empatar el partido.

Si el “1” rival es figura...

Parece que Nereo está empecinado en atajar muy bien al punto de ser figura de sus equipos, cada vez que le toca enfrentar a Unión. Obviamente, esto se dice en forma figurada, sin ninguna intención frente a la honestidad profesional de un hombre que le dio todo lo que pudo a Unión y que luego continuó su carrera en otros clubes. Pero ayer, Nereo Fernández fue la figura del partido, un escalón por encima del escurridizo Antonio Medina, un émulo de César Pereyra, quien enloqueció bastante a los marcadores laterales de Unión durante todo el tiempo que estuvo en la cancha.

Entonces, si el arquero rival fue figura, es porque Unión lo “peloteó”. En todo caso, no fue tanto en cantidad pero sí en calidad. El cabezazo a Correa en el primer tiempo, el bombazo del Changuito Cárdenas y la “peinada” de Zárate en el final, motivaron tres intervenciones brillantes del arquero de Boca Unidos. Y es lo que tiene Unión, como argumento, para sostener la injusticia del resultado.

¿Por qué perdió Unión?, un poco por Nereo, pero bastante por dos errores puntuales que terminaron en goles. En el trámite del partido, Unión fue levemente superior. Faltó presencia en el mediocampo en el primer tiempo, pero con un esquema totalmente ofensivo salió a vender cara la derrota en el segundo. Kudelka sacó primero a un Pablo Pérez que juega siempre condicionado por las amonestaciones y al límite de la roja, para poner a un movedizo Gaitán; luego metió a la “Chancha” por Zárate por un intrascendente Velázquez y, a los pocos minutos, le dio más compañía a un tibio Vidal, colocando a su lado a Montero. El equipo se paró, desde los 19 minutos del segundo tiempo y hasta el final, con un 3-4-3, con Mannara abierto por la izquierda (como en el segundo tiempo con Independiente Rivadavia), con Gaitán por derecha, con Rosales flotando delante de Vidal y Montero, y con Zárate y Quiroga metidos adentro del área para capitalizar algún centro.

Inentendible

Es cierto que el equipo se desordenó, que a veces se confundió en las formas, pero nadie podrá reprocharle a Unión la entrega que tuvo para batallar. Rosales hizo un golazo a dos minutos del final. Cuando parecía que el 1-0 era inamovible entre la imprecisión de Unión y las atajadas de Nereo, el “10” recibió la pelota adentro del área, por el callejón del “8”, amagó pegarle de derecha, enganchó hacia adentro y dejó un rival en el camino para pegarle luego de zurda y cruzado, al palo derecho de Nereo.

Faltaban 5 minutos (los 2 reglamentarios y los 3 de adición). Había que encerrarse atrás e impedir que Boca Unidos llegara. Sin embargo, una falla defensiva por el sector derecho de Unión, cumplido el primer minuto de tiempo extra, permitió que Boca Unidos se quedara inmerecidamente con todo el premio. Inentendible y doloroso.

“El tiempo de las derrotas se terminó”, dijeron los jugadores depués del partido. Ellos mismos se establecieron un plazo, a sabiendas de que una nueva derrota no los perjudicará directamente (los jugadores firman por un año y no se van si los resultados no se producen), pero sí tendría una repercusión inmediata en el técnico.

La idea de que Unión es un equipo en formación está plenamente en vigencia. Van cuatro fechas y ni Boca Unidos (puntero) tiene asegurado nada (ni siquiera la posibilidad de ser protagonista de verdad en este torneo), ni Unión se tiene que dar por vencido. Claro que, como el propio Kudelka lo dijo, “en el fútbol argentino, hasta el “largoplacismo’ depende de los resultados”. Y no se puede seguir perdiendo.

El primer tiempo de Independiente Rivadavia fue bueno y ayer se perdió mal. Esto es lo que debe servir de motivación. El técnico dijo algo que también fue interesante, luego del partido: “Todos debemos reformular cosas, inclusive yo”. Como conductor del grupo y armador del plantel, es el principal responsable. Y está bueno que también los jugadores se metan en la cabeza que debe ponerse punto final a la seguidilla de derrotas. Por el bien del proceso.

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Como ante Chacarita

En el partido con los “funebreros”, en Almagro, Kudelka dijo que el equipo tuvo más salida por el lado de Maidana y que debería hacerlo más por el de Pérez. Ayer, “Tarrito” se mandó poco al ataque y lo suyo fue sólo la marca.

Foto: gentileza diario El Litoral de Corrientes


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Destruyó con dos errores lo que construyó en merecimientos

Estuvo imparable

Antonio Medina provocó muchos momentos de zozobra para los defensores rojiblancos y también para Vidal. Por momentos, se tornó imparable. Se dice que estuvo en los planes de Kudelka, pero que Boca Unidos no lo quiso largar. Lo tienen a Medina y Visconti de titulares, a Tonelotto en el banco y a Nuñez (que volvió de Newell’s) poniéndose en buena forma.

Foto: gentileza diario Epoca de Corrientes

Ovación al “Changuito”

Los dirigentes de Boca Unidos de Corrientes resolvieron homenajear a Darío Kudelka y a Juan Pablo Cárdenas, obsequiándoles sendas plaquetas en reconocimiento a su paso por el club.

Kudelka llevó a Boca Unidos a ganar el Argentino A, clasificándolo para la Primera B Nacional y manteniendo al equipo sin problemas en la tabla de promedios.

El actual técnico de Unión fue aplaudido por todo el estadio, pero la mayor ovación se la llevó, a su momento, el “Changuito” Cárdenas, quien fue ovacionado por la hinchada de Boca Unidos. Se nota que el paso de ambos, pero fundamentalmente el del “Changuito”, ha dejado una huella imborrable en el público correntino.

Hubo muchos santafesinos

Si bien Corrientes no queda tan lejos, fue interesante observar una nutrida presencia de dirigentes y allegados rojiblancos en la cancha de Huracán.

Entre los directivos, se observó al presidente Luis Spahn, que estuvo acompañado por buena parte de la plana mayor, entre ellos Jorge Molina, su vice primero, Fabián Brasca, el “Pato” Más y Fernando García, entre otros, mientras que también se lo vio a Oscar Frutos, padre de Nicolás, actual coordinador de las inferiores rojiblancas, junto con su amigo Alberto Vergara. Ambos tuvieron destacada participación como dirigentes del fútbol amateur en otros tiempos (Frutos estuvo hace poco también), mientras que el querido “Pino” Yanotti y otros ex dirigentes, Gerardo Barisone y el doctor Ojeda, actualmente residente en Reconquista, fueron otros de los que anduvieron por las plateas de la cancha correntina, soportando la intensa lluvia caida antes del partido.

/// SÍNTESIS

Boca Unidos 2

Unión 1

Cancha: Huracán Corrientes (local Boca Unidos).

Arbitro: Diego Ceballos.

Boca Unidos: Nereo Fernández; C. González, Alarcón, Meloño y Baroni; Belforte, Amaya, M. Benítez y Galarza; Medina y Visconti. AS: Mazzón. Estuvieron en el banco: Ricardone, Lombardi y Tonelotto. DT: Juan Amador Sánchez.

Unión: Limia; Alejandro Pérez, Nicolás Correa, Cárdenas y Maidana; Pablo Pérez, Vidal, Velázquez y Rosales; Mannara y Quiroga. AS: Arce. Estuvieron en el banco: Barisone, Zurbriggen y Pirchio. DT: Darío Kudelka.

Goles: en el primer tiempo, a los 43 min, Medina (BU). En el segundo, a los 43 min, Rosales (U), y a los 46 min, Prieto (BU).

Cambios: en el segundo tiempo, al comenzar, Gaitán (U) por Pablo Pérez; a los 14 min, Zárate (U) por Velázquez y Alan Sánchez (BU) por Galarza; a los 15 min, Gabriel Correa (BU) por Benítez; a los 19 min, Montero (U) por Alejandro Pérez, y a los 21 min, Prieto (BU) por Medina.

Amonestados: en Unión, Pablo Pérez y Alejandro Pérez.

19

partidos

son los que lleva Unión sin ganar de visitante, con 6 empates y 13 derrotas.

22

goles

ha convertido Paulo Rosales con la camiseta de Unión, en 118 cotejos. Al último tanto lo había marcado en el 2008, ante Atlético Tucumán. Claro que después, Rosales tuvo un paso por el fútbol griego y también por Talleres de Córdoba.

4

años

pasaron desde que Unión no perdía tres partidos seguidos. Se dio en el Clausura 2006. En ese entonces, significó el alejamiento del técnico de turno, aunque se dio en otras circunstancias. Hoy, Kudelka recién comienza el camino.