A partir del 1º de noviembre
La Costa podría quedarse sin el ramal de la Línea 9
La empresa que tiene a su cargo el transporte urbano en la costa advierte que el servicio es deficitario. Entre las causas, señala estar compartiendo la traza con una firma interurbana que no es controlada por la provincia y se comporta de manera desleal.
Ocho fueron los colectivos dispuestos por Ersa Urbano en marzo de este año para garantizarle a los vecinos de la Costa el servicio del transporte urbano de pasajeros. Foto: Luis Cetraro
De la Redacción de El Litoral
El Ramal C-Colastiné de la Línea 9 podría levantarse en menos de dos meses de no haber cambios frente a una situación que, según el gerente de la empresa Ersa Urbano, “hace insostenible la continuidad del servicio”. En virtud del déficit que la firma viene sufriendo desde que comenzó a circular por la Costa, advierte que esperará hasta el 30 de octubre para decidir la continuidad o no del servicio.
“Ersa Urbano empezó a cubrir la Costa el 1º de marzo debido a la ausencia de un servicio urbano de pasajeros en esa zona. La empresa Continental lo hacía, pero como un servicio interurbano donde la Municipalidad de Santa Fe no tiene injerencia. Cuando el municipio decide incorporar el transporte urbano en la Costa lo primero que hace es ofrecérselo a esa empresa y como no le interesó le trasladó la propuesta a todas las líneas de Santa Fe. Ersa Urbano la vio como algo positivo y aceptó hacerse cargo”, manifestó Rubén Mansilla.
Pero las expectativas de la empresa se truncaron. La firma Continental esperó la puesta en circulación de las nuevas unidades para incrementar el número de coches y de paradas sobre la Ruta Provincial Nº 1 y hasta para igualar el precio del boleto al de las líneas urbanas.
“Cuando no estaba nuestro servicio, quien asistía a la gente de la Costa era esta línea interurbana. Los usuarios se quejaban por su frecuencia y decían que no estaban bien atendidos, que merecían un buen servicio. Nosotros asumimos el compromiso de brindárselo, sin esperar que la empresa Continental empezara a tener una frecuencia incluso mejor que la nuestra, a hacer uso de todas las paradas de la Ruta 1, cuando un servicio interurbano no debe parar cada 200 metros sino cada 600 y si lo hace es sólo para el descenso de pasajeros. Tampoco esperábamos que no cobrara el servicio conforme al cuadro tarifario de su servicio y lo equiparara al urbano”, señaló el gerente de Ersa Urbano para explicar por qué a la empresa le es imposible sostener el ramal de continuar “la competencia desleal”. Y agregó: “Esta línea es deficitaria desde que comenzó, pero la situación ya es insostenible porque los costos aumentaron. Por dar un ejemplo, en agosto los choferes recibieron un 27 % de aumento”.
Por último, Mansilla comentó que la medida que podría llevar adelante Ersa Urbano a partir del 1º de noviembre fue notificada desde la empresa al secretario de Transporte de la Municipalidad, quien manifestó su preocupación por la situación pero al mismo tiempo aclaró que el municipio no puede hacer demasiado porque el servicio interurbano no es de su injerencia sino de la provincia.
