Ni chauchas ni palitos
Ni chauchas ni palitos
La verdura es cosa seria
Rosario fue la sede de la 33º edición del Congreso Argentino de Horticultura. El evento sumó al Primer Simposio Internacional de la Frutilla, el Simposio de Agroecología y el Simposio de Aromáticas, Medicinales y Condimenticias.
Campolitoral
La reunión científica fue organizada por la Asociación Argentina de Horticultura (ASAHO) a través de su Comisión organizadora, integrada por profesionales de La Universidad Nacional de Rosario; el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) y otras Instituciones del medio.
Con el lema “La investigación para el desarrollo”, al igual que en ediciones anteriores el Congreso convocó a unos 500 profesionales latinoamericanos para debatir y difundir los avances tecnológicos, económicos, sociales y ambientales en relación a las ciencias de la horticultura, fruticultura, florales, aromáticas y medicinales. Para ello, el congreso contó con un programa de actividades científicas muy amplio, a través de conferencias magistrales a cargo de renombrados conferencistas internacionales, así como mesas redondas, talleres, cursos de posgrado y presentación de más de 500 trabajos científicos.
Como novedad, se contó además con actividades vinculadas con el medio a través de dos exposiciones comerciales paralelas, una de ellas en Coronda y la otra en Rosario, así como conferencias en los Mercados Concentradores.
Acerca de la ASAHO
En el año 2010, la Asociación Argentina de Horticultura cumple 35 años de vida haciendo historia como ámbito para el conocimiento a través de reuniones científicas, en pos de la discusión de los avances en la horticultura y del conocimiento de las problemáticas de cada región del territorio argentino.
En numerosas ocasiones, estos Congresos han sido también la oportunidad para la realización de otras reuniones científicas, como Simposios, o técnicas como Jornadas, siendo muchas veces estas reuniones de carácter internacional, abarcando Latinoamérica, así como también a la península Ibérica. Esto se ha plasmado en las 32 ediciones de sus Congresos Nacionales, en las 12 ediciones de sus Reuniones Internacionales, y en los 28 volúmenes anuales publicados de su revista científica Horticultura Argentina.
Contexto local
En diálogo con Campolitoral, el Ing. Agr. Juan Carlos Favaro, disertante en el evento, remarcó el trabajo realizado en tres mesas de análisis, referidas el tema agroquímicos, buenas prácticas agrícolas (BPA) y nuevos frutales para la zona. Con respecto a lo primero, destacó que hay normas que son de muy difícil aplicación, como por ejemplo, la higiene del personal. “Si un trabajador está cosechando papas, es imposible que se mantenga inmaculado. Son normas diseñadas desde un escritorio en Buenos Aires”, criticó.
Con respecto a las buenas prácticas agrícolas, para Favaro el principal obstáculo sigue siendo la no registración de productos para aplicar en frutas y hortalizas. A manera de ejemplo, el profesional destacó que para soja hay 237 productos inscriptos, mientras que para la achicoria no hay ninguno. “Ante el enorme costo del trámite, las fábricas no lo registran y nosotros no lo podemos aplicar, además el Senasa no nos acompaña, porque le ofrecimos inscribir de hecho productos aprobados en países de punta, como EEUU, Israel, Japón y la Comunidad Europea, pero no nos lo permiten”, se lamentó.
Con respecto al tema frutales, Favaro hizo hincapié en las buenas perspectivas que plantean en la zona cultivos poco tradicionales como el nogal y la almendra (en Esperanza ya se están trabajando) o el higo y la manzana en Santa Fe, donde ya hay establecimientos con fines comerciales.
En el evento se presentaron en total más de 500 trabajos de investigación de parte de institutos privado, el INTA y las universidades, además de la participación de especialistas de Paraguay, Uruguay y Brasil. Se remarcó el tema del control biológico de plagas y de la agricultura periurbana, un tema que viene creciendo con fuerza.
Por último, Favaro destacó que la verdura de hoja viene sufriendo una caída en el precio, la que perjudica al productor y al consumidor, ya que la misma muchas veces no se traduce en la góndola. “Son las caídas de precio estacionales de la primavera y el otoño, cuando el cultivo tiene buena provisión de agua y se produce una oferta más grande”. Sin embargo, auguró buenas perspectivas para cultivos como el tomate en el mediano plazo.
Contracara. Pese a la merma en le precio e la verdura de hoja, se vislumbran buenas perspectivas para cultivos puntuales como el tomate o los frutales en la región.
Foto: federico aguer
Se presentaron más de 500 trabajos de investigación de parte de institutos privados, INTA y universidades, además de la participación de especialistas de Paraguay, Uruguay y Brasil.
“el principal obstáculo sigue siendo la no registración de productos para aplicar en frutas y hortalizas. A manera de ejemplo, para soja hay 237 productos inscriptos, mientras que para la achicoria no hay ninguno”
Ing.Agr. Juan Carlos Favaro
Productor frutihortícola y docente UNL