El país sigue paralizado por las protestas

El Senado francés aprobó

la suba de la edad jubilatoria

De la Redacción de El Litoral

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DPA

El Senado francés aprobó la reforma del sistema de pensiones impulsada por el presidente Nicolas Sarkozy mientras continúan las protestas contra la medida.

Antes de convertirse en ley, la reforma debe ser aprobada por un comité parlamentario y votada nuevamente en sesión conjunta del Parlamento.

La oficina de prensa del Senado dijo que el comité comenzará con las reuniones el lunes. Esto significa que la medida podría ser votada para convertirse en ley el miércoles. La reforma contempla elevar la edad de jubilación de los 60 años actuales a los 62 para 2018.

La votación del Senado -177 a favor y 153 en contra- se produce después de 150 horas de debate, mientras la huelga de los trabajadores de las refinerías de petróleo y los extendidos bloqueos de los depósitos de combustible llevaron a faltantes en el suministro de combustible en varias partes del país.

Es poco probable que la aprobación de la reforma del sistema de pensiones detenga las manifestaciones que se registran en el país. Los sindicatos prometieron continuar con las huelgas y protestas callejeras incluso después de la aprobación de la medida y programaron dos días más de protestas nacionales para el 26 de octubre y el 6 de noviembre.

Asimismo, una encuesta difundida hoy por el instituto BVA revela que casi el 70 por ciento de la población francesa apoya las huelgas y las protestas en las calles.

En tanto, la popularidad de Sarkozy, que calificó la reforma como la ley más importante en sus cinco años de gobierno, se encuentra en su punto más bajo desde que asumió, a sólo 18 meses de las elecciones presidenciales de 2012.

En las últimas horas, la policía francesa disolvió por la fuerza el bloqueo de una refinería cerca de París y, según fuentes sindicales, tres personas resultaron heridas.

La policía se enfrentó con decenas de personas que habían formado una “cadena humana” para impedir el desbloqueo de la refinería de Grandpuits y el regreso forzoso de los trabajadores, ordenado por el gobierno “en interés de la defensa nacional”.

El Ministerio del Interior anunció que se iba a reanudar la labor en todas las refinerías que habían sido bloqueadas o que sus empleados estuviesen en huelga.

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El presidente francés, Nicolas Sarkozy, recibió la noticia en la Cumbre de la Francofonía en Suiza. Foto:EFE