Fue el emblema de una época de oro

Peralta: recuerdo de un grande

Tomás Rodríguez

Especial para El Litoral

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Orlando Amadeo “Pocho” Peralta, quien falleció el sábado pasado a los 80 años, fue una gloria del básquetbol santafesino, una figura estelar de los famosos equipos del Club Atlético Unión que llenaron de gloria y prestigio a la entidad de la avenida López y Planes.

Fue un deportista ejemplar y de una conducta intachable dentro y fuera de la cancha. Los entendidos consideran a Raúl Calvo, Ricardo Crespi, Orlando Peralta y Carlos Verga como los mejores basquetbolistas santafesinos del siglo pasado.

La trayectoria de Orlando “Pocho” Peralta como jugador comprendió 22 años; se inició en 1944 y concluyó en 1966. Nació en la zona centro-oeste el 8 de febrero de 1930 y fue padre de cuatro hijos, dos mujeres, las mayores, e igual número de varones.

El inicio

Peralta se formó en las categorías promocionales de República del Oeste junto a otro monstruo de esta actividad, Ignacio “Nacho” Poletti, actuando en infantiles, cadetes menores y juveniles; pasó luego a Rivadavia Juniors y se consagró en Unión, donde fue llevado en 1952 por un empleado ferroviario y presidente de la subcomisión de básquetbol, José “Pepe” Poi.

Cuando Peralta tenía edad de cadete mayor (juvenil) actuaba como pivote, medía 1,97 metro; luego, se fue abriendo en otras posiciones y terminó como ala-escolta.

En La Rioja 1949 se consagró campeón argentino con Santa Fe, venciendo en la final a Santiago del Estero 53 a 32, con un plantel que mostró las caras nuevas de Ignacio Poletti y los rosarinos Hugo Del Vecchio y Alberto Lozano. También jugaron Juan Battilana, Hugo Baudracco, Miguel Cello, Jaime Pérez, Santiago Gianni, Osvaldo Venturi y Ricardo Ottonei. El DT era el rosarino E. Caballero.

Unión fue el equipo que escoltó al Club de Gimnasia y Esgrima en la cantidad de títulos obtenidos en los certámenes de primera división de la Asociación Santafesina de Básquetbol y uno de los mayores aportes para ese logro lo consiguió el incomparable Orlando Peralta.

Estos datos fueron suministrados por José María Lagger, colaborador de la revista Rebote, que fundó y dirige José Antonio López, una fiel y honesta tribuna del baloncesto nacional.

En 1954, 1958 y 1961, en el más argentino de los campeonatos, Santa Fe con Peralta, Ricardo Crespi y otros jugadores de jerarquía fue subcampeón.

Momento clave

Tras su retiro, un día los directivos de Unión lo convocaron y le anunciaron que tenían la intención de suprimir la actividad del baloncesto. “¡Qué dicen! Ustedes están equivocados, lo único que les interesa es el fútbol. No tienen idea del significado del básquetbol para Peralta, es parte de mi vida; para el club que es conocido en todo el país por el básquetbol y para Santa Fe deportiva...”.

Hizo una revolución: llevó a Roberto Monti, Felipe Fernández, Ricardo Giunta, promovió a “Carlucho” Verga. En un clásico contra Rivadavia Juniors mandó marcar individual y presionando, dejando de lado la tradicional defensa de zona.

“Esta estrategia o forma de jugar era como remover la historia, porque durante toda su vida Santa Fe había jugado con zona”, reveló Peralta en rueda de amigos, agregando que “nos dio muchos resultados, pero el tiempo había pasado y había que renovarse. Ese equipo de Unión no paró hasta clasificarse campeón argentino de clubes y algunos dirigentes engañaban a la gente diciendo que esto era obra de ellos...”.

Santa Fe estaba sumido en problemas internos debido a los jugadores que se iban en busca de un futuro mejor, no podían representar nunca más a la provincia. En Corrientes 1971, Pocho Peralta armó un equipo juvenil que logró la resurrección, saliendo tercero, detrás de Provincia de Buenos Aires y Santiago del Estero.

Jugaban el “Cholo” Mendoza, “Carlucho” Verga, Roberto Monti, Ricardo Giunta, Roberto Van Lacke, Fidel Gutiérrez, Héctor “Lepe” Guitart, Felipe Fernández, Héctor “Alemán” Von der Thussen, Héctor Barovero, el “Gato” Bianchi y el rosarino Víctor Hugo Le Bhian, que reaparecía tras ocho años de inactividad.

Tras su retiro definitivo del básquetbol, se dedicó a jugar al golf, actividad deportiva que realizó en el Club de Campo El Paso.

Revelaciones

Ignacio Poletti le reveló hace un tiempo a Osvaldo Ricardo Orcasitas (ORO), otrora destacado periodista de El Gráfico, el principal investigador del básquetbol argentino, quien junto a León David Najnudel y el santafesino José María “Yoyo” Cavallero le dieron vida a la Liga Nacional de Básquetbol: “Peralta era inteligente y un magnífico goleador.

“Se mandaba por las puntas o tenía un tiro desde afuera con una mano que embocaba con facilidad, siendo letal. Su lanzamiento no era académicamente ortodoxo o puro, pero tenía lo principal: era efectivo. Siempre terminaba encestando”, afirmaba el maestro Orcasitas.