Análisis de Ecolatina

El crecimiento no baja la pobreza por los efectos de la inflación

La consultora que fundara el ex ministro Roberto Lavagna y dirige su hijo Marco, asegura que tres de cada diez argentinos es pobre. Y que sus ingresos no podrán superar el aumento de los precios.

De la redacción de El Litoral

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DyN

Tres de cada diez argentinos son pobres, estimó un informe de la consultora Ecolatina, que advirtió que “en la medida que los precios sigan trepando fuerte, será difícil que los ingresos de estos sectores vuelvan a superar la inflación”.

““Es preocupante que tras un año de fuerte recuperación y mejoras significativas en la mayoría de las variables económicas, la reducción de la pobreza e indigencia haya sido magra por culpa de la aceleración de la inflación, especialmente intensa en el rubro alimentos”, planteó.

De acuerdo a las proyecciones de la consultora, la inflación en el 2010 fue de 26,6 por ciento, la cifra “más elevada desde la devaluación”. Al respecto, apuntó que si bien este proceso es generalizado a la mayoría de los bienes y servicios, cerca del 60 por ciento de la suba se explica por el alza en el precio de los alimentos.

Según sus cálculos, la Canasta Básica Alimenticia (CBA), que mide la línea de la indigencia, se encareció el año pasado 31,8 por ciento. Así, el valor de la canasta para una una familia tipo -matrimonio con dos hijos- alcanzó en diciembre ultimo 1.182 pesos.

El informe señaló que la mayor parte de la suba se dio en los primeros meses de 2010, impulsada por el encarecimiento de la carne. Asimismo, calculó que la Canasta Básica Total (CBT) -que mide la línea de pobreza- trepó en 2010 un 29,2 por ciento, con lo cual una familia tipo necesitó ingresos por 2.369 pesos mensuales para no ser considerada pobre, unos 536 pesos más que a fines de 2009.

Serio

Según las estimaciones, la pobreza afectó el año pasado a 30,9 por ciento de la población, y la indigencia al 10,6 por ciento. “Si bien en ambos casos se observó una reducción respecto a la media de 2009 (31,1 y 11,1 por ciento respectivamente), la mejora sólo fue significativa en el caso de la pobreza extrema”, añadió el informe.

En este sentido, explicó que “el mayor descenso observado en la indigencia responde, en última instancia, a la Asignación Universal por Hijo, pues el impacto de un monto fijo sobre los hogares es menor a medida que aumenta el nivel de ingreso de las familias”.

“Si extrapolamos la incidencia de la pobreza al total de la población (cercana a 40,1 millones), este flagelo afectó a 12.390.000 personas, de las cuales 4.270.000 son considerados indigentes”, detalló.

La consultora alertó: “En la medida que los precios sigan trepando fuerte, será difícil que los ingresos de estos sectores vuelvan a superar la inflación. El shock de la AUH jugó un papel preponderante en 2010, pero difícilmente se repita este año, pues lo más probable es que el monto siga el alza de la CBA/CBT, manteniendo su poder adquisitivo pero no incrementándolo”, evaluó.

Con viento de cola y tres problemas

El ex presidente del Banco Central, Mario Blejer, auguró que la economía argentina crecerá este año entre un 5 y un 6 por ciento, estimó que el valor del peso “se va a mantener prácticamente sin cambio” y advirtió sobre tres problemas impostergables tras las elecciones.

El economista consideró que el contexto internacional, con suba en el precio de los commodities y guerra de divisas, es “positivo” y “beneficioso” para la economía argentina. Y dijo que “en un año de elecciones no se puede esperar que haya una desaceleración de la demanda, con lo cual creo que la economía va a crecer bien”.

Sin embargo también advirtió que luego de las elecciones -sea quien fuera que las gane- habrá que atender “tres problemas de la economía”, en alusión a “la inflación, la calidad de la inversión y la cuestión energética”.

En cuanto al valor de peso, sostuvo que la gran apreciación que tuvo el real brasileño, al igual que las monedas de otros países competidores de la Argentina, “ayudó a mantener nuestra competitividad”.

“El tema que el precio de las commodities está también a un nivel extremadamente alto hace que la moneda argentina en términos reales también este en una situación un poco mejor”.

En este sentido evaluó: “hay una paradoja, porque si no hubiera intervención en el mercado de cambio, probablemente la moneda argentina se apreciaría, se iría a 3,60 o 3,70 pesos. Yo creo que así como están las cosas, el peso va a mantenerse en su valor, prácticamente sin cambio este año”, pronosticó.

Desafíos

Ecolatina sostuvo que para reducir pobreza e indigencia “se necesita simultáneamente crear empleo y contener los precios (especialmente de los productos básicos). En la medida que continúe acelerándose la inflación en bienes de primera necesidad, cualquier mejora conseguida a través de medidas de previsión social, aumento del salario mínimo o incrementos en los haberes jubilatorios, acabarán por licuarse si no vuelven a ajustarse nominalmente”, concluyó.