La política estuvo presente

Pocos referentes de la política nacional, sobre todo de los distintos sectores del arco opositor, quieren perderse la oportunidad que les brinda Expoagro para establecer contacto directo con los electores.

El vicepresidente de la Nación, Julio César Cobos, Eduardo Duhalde, Ernesto Sanz, Fernando “Pino” Solanas, Francisco De Narváez, Juan Carlos Morán y Ernesto “Nito” Artaza fueron las principales figuras que acompañaron la intensa jornada. Todos acompañados de sus huestes integradas por intendentes, diputados y concejales de diferentes distritos del país.

Julio Cobos arribó en horas de la siesta, con el tiempo suficiente para recorrer exhaustivamente la muestra. El mendocino confirmó que su visita era de carácter “institucional”, destacando “el efecto multiplicador del sector”. Y reveló que cada edición le permite interiorizarse “de los avances tecnológicos, y de las necesidades del sector en su búsqueda de mayor valor agregado”.

El titular del Senado nacional no dejó pasar la oportunidad para dar su apoyo a este sector productivo “tan importante para el crecimiento del país” y que tiene “muchísimo potencial para seguir avanzando, desarrollándose, de modo tal de distribuir, de la mejor manera posible, la riqueza que genera”.

Cobos aseguró que Argentina “cuenta con una inmejorable oportunidad” generada por las “condiciones que ofrece el escenario internacional”, a las que consideró como “únicas a lo largo de nuestra historia”. Y deslizó que se puede estar mejor aún, “si no nos equivocamos, desarrollamos políticas a largo plazo y analizamos a fondo los problemas estructurales de la Argentina”. Enfatizó que “sería imperdonable que en un momento como éste no nos pongamos de acuerdo para mejorar lo que hoy está bien”.

El ex presidente Eduardo Duhalde propuso “fijar prioridades y abandonar este ataque absurdo al campo” con comparaciones “que son una burla para los productores, empresarios y trabajadores del sector”. El precandidato presidencial por el Peronismo Federal se mostró “orgulloso” de la exposición de un sector “que no tiene precio” y que apuesta por el futuro.

También precisó que el campo precisa “certidumbre” y, cuando se habla de producir 150 millones de toneladas, les imploró a los especialistas que “piensen en grande”, porque se puede “cosechar mucho más”. En ese sentido, evaluó que el país “no ha desarrollado aún el 40 por ciento de su potencialidad y diversidad productiva” y que cuando consiga desplegar el 60 por ciento “tendremos que importar mano de obra”.

El senador radical Ernesto Sanz apostó al concepto de “poner al servicio de la producción el financiamiento del sector público y privado” y reclamó la puesta en marcha de “reglas de juego claras que nos alejen de la arbitrariedad y la discrecionalidad”, además de un sinceramiento del discurso que permita aprovechar “la oportunidad única que le da el mundo al país”.

Agregó: “Traemos el aliento de la política para los productores, expositores e industriales. La UCR defendió y defiende al sector agropecuario porque creemos que es un motor muy importante de la economía argentina y uno de los principales impulsores de la recuperación del país después de la crisis 2001-2002”.