Raíces en la historia

TEXTOS. marina zavala. FOTO. LUIS CETRARO.

UNA VIDA FELIZ “El 24 de marzo voy a cumplir 104 años. Nací en Rawson, capital de Chubut; porque mi padre estuvo diez años allá como político. Mis tres hermanos nacieron en Santa Fe. Vine a los 5 años. Estuve mucho tiempo en Entre Ríos también, ahí estaba mi abuela materna y yo pasaba todas las vacaciones con ella. Trabajé en Diamante y en La Paz. Viví una vida feliz, siempre estuve rodeado de cariño, de gente amiga buena, de parientes. En vez de preguntarme de qué trabajé, debería preguntarme de qué no trabajé. Fui alambrador, agrimensor, midiendo islas, entracé de líneas ferroviarias. Vivía en carpa, nos trasladábamos de un lado al otro. He comprado y he vendido hacienda, campos, casas, mercaderías, acopié cereales”.

LA FAMILIA “Me casé en el año ‘46, a los 36 años. Tuve que dejar lo que para mi fue una pasión, el caballo. Cuando me casé, hacía diez años que era capitán del Club de Polo de Santa Fe. Tuve que renunciar y vender los caballos para poder casarme. Mi esposa se llamaba Hilda Calderón, era una persona muy conocida porque tuvo mucha actuación en la vida social. Fue educada en las Adoratrices, era maestra normal; fue elegida tres veces como presidenta de la Congregación de los Milagros. Murió a los 86 años, repentinamente. Tuvimos tres hijos, el mayor es ingeniero agrónomo y técnico ambiental; después tengo una hija que es abogada. El menor es médico veterinario, vive en Alejandra; el mes que viene me mudo con el. Yo quería ir a un geriátrico, para pasar una vida más tranquila, sin preocupaciones. Pero mi nuera me ofreció vivir con ellos y acepté. Quiero dedicarme un poco a escribir, tengo mucho que contar. He tenido una vida muy activa y tengo algunos libros iniciados sobre las cuestiones del caballo, que quiero terminar”.

RAÍCES “Soy el último bisnieto del brigadier Estanislao López. Después, hay tataranietos; pero bisnietos no. De lo que se de él, la mayor parte me la ha contado mi abuela. La madre de mi padre era sobrina del brigadier, ella era hija del general Juan Pablo López. Es una personalidad que es una vergüenza que los santafesinos no conozcan. Fue tres veces gobernador de la provincia, participó en más de treinta batallas, fue al Paraguay con Manuel Belgrano. Él era un ferviente federal y los unitarios trataron de opacarlo, porque era un enemigo implacable. Cuando el Brigadier López era gobernador, mandó a su hermano Juan Pablo a la Villa El Rosario para frenar los malones de los indios y los ‘malones’ de los porteños que nos invadían. La historia cuenta que el general Lavalle invadió Santa Fe y fue vencido; en su escapada incendió Rosario. Juan Pablo López tuvo un papel muy importante, con actuaciones destacadísimas. Fue guerrero de la independencia, colaboró con la elaboración de la Constitución, participó de la primera fundación de hierro fundido, fundó escuelas; hizo muchas cosas. Por eso yo quería escribir algo de lo que sé de el, porque no se lo conoce. Rafael López Rosas escribió su historia, él era bisnieto de Juan Pablo.

LEGADO “Yo soy bisnieto tanto de Juan Pablo López como de Estanislao López. Resulta que el hijo menor del brigadier se casó con la hija de su hermano. Mi padre era entonces López López. Mi abuela vivía a una cuadra de mi casa, yo iba casi todos los días a visitarla y me contaba de él. Ella estuvo hasta los 14 años en la casa del brigadier, porque su padre vivía guerreando afuera. Entonces lo conocía mucho. El brigadier nunca se sacó una fotografía. El único cuadro de él es un retrato que se hizo a instancias de Rosas. Resulta que una vez vino de Italia un pintor para retratar a varias personalidades del país, Rosas lo mandó expresamente a Santa Fe para pintar al Brigadier. Si no fuera por esta situación, no sabríamos ni cómo era. Juancito Arancio hizo una imagen de él a partir de ese cuadro y con la creación de su imaginación. Mi abuela me contaba una frase del brigadier que decía y que tenía como lema: “Mejor un buen nombre que la mayor de las riquezas”. Eso me lo inculcó siempre. Yo la he querido perpetuar para que sirva a los demás”.