Fueron 12 asaltos intensos y emotivos
Maidana recuperó el título en una pelea “Terrible”
El pugilista santafesino le ganó a Erik Morales en fallo mayoritario y volvió a adueñarse del cinturón superligero interino de la AMB. Dos jueces vieron empate y el restante le otorgó cuatro puntos de ventaja.
Golpe “Chino”. La derecha del oriundo de Margarita llega plena al rostro de Morales, quien como se esperaba, fue un adversario durísimo.
Foto: Télam
Alberto Sánchez
El santafesino Marcos René Maidana, en una pelea durísima, derrotó a través de las tarjetas en decisión dividida al mexicano Erik Morales; con lo cual pudo recuperar el título vacante interino de peso Superligero de la Asociación Mundial de Boxeo.
El enfrentamiento, pactado a 12 rounds en el MGM Grand Garden Arena de Las Vegas (Nevada), fue el estelar de la velada denominada “Héroes en Acción”. Uno de los jueces vio empate en 114, mientras que los dos restantes le otorgaron la victoria al “Chino” 116-114, siendo quizás cifras demasiado holgadas de acuerdo a lo sucedido sobre el cuadrilátero. Este resultado, además de afianzar lo que decían las apuestas (estaban 7-1 a favor del oriundo de Margarita), dejó al “Terrible” Morales sin chances de alcanzar su cuarta corona en distintas categorías.
El desarrollo
De entrada, Maidana salió al ruedo con la misión de terminar con su oponente lo más rápido posible. Todo hacía indicar que lo lograría, máxime teniendo en cuenta que mediante un zurdazo al rostro, provocó el total cerramiento del ojo derecho del púgil azteca. El segundo y tercer capítulo se asemejaron bastante, con nuestro compatriota yendo al frente, buscando el nocaut, conectando varias manos duras de derecha, además de buscar hacer daño en los flancos de Morales.
Pero en la quinta vuelta, el mexicano comenzó a descifrar la estrategia del “Chino”; de a poco fue dando vuelta las acciones, basándose en no dejar que los puños del santafesino le lleguen, más que nada al maltrecho ojo, y empezando a conectar algunos golpes, que si bien no eran tan duros, hacían mella en el santafesino.
“El Terrible” comenzó a establecer su estrategia, dejaba que el gasto lo hiciera Maidana en la primera mitad del round, y en la parte final hacía prevalecer su velocidad y justeza para llegar al físico de su rival, no obstante, la potencia de sus puños no dañaban. Lo mejor del boxeador nacido en México se observó promediando el combate, cuando pudo demostrar, aunque en un porcentaje disminuido, las razones por las cuales obtuvo tres títulos mundiales. Con boxeo expeditivo y con mucha valentía, se le plantó a Maidana y, aún recibiendo algunos golpes en fuertes cruces, se lo notó dominante y en buen estado físico.
Cada vez más duro
A esa altura el combate tomó ribetes emocionantes, con dominio cambiante por parte de los dos contendientes, quienes se prodigaron en pos de brindar un espectáculo digno de lo que estaba en juego. El séptimo y octavo rounds se desarrollaron de manera similar, pero eso conspiró con los restos físicos de ambos, haciendo que el poder de sus respectivos puños se viera sensiblemente reducido.
El noveno capítulo “asustó” a todos los argentinos. Es que a Morales se lo notaba más entero que a Maidana, y la mayoría del público presente en el MGM Grand Garden Arena se alineó con el mexicano. Pero los últimos seis minutos fueron muy bien aprovechados por “El Bombardero de Margarita”. Sin tomar demasiados riesgos, acaparó el centro del ring y decidió boxear con inteligencia, tratando de que su adversario no le llegara, y pudiendo lanzar algunos golpes peligrosos. La última vuelta lo encontró dominando a voluntad, y si hubiese durado un par de minutos más, inevitablemente hubiera llegado el nocaut.
Luego de conocerse el fallo, el palmarés de Marcos Maidana (27 años) muestra 30 peleas ganadas (27 antes del límite) y dos reveses; en tanto el récord de Erik Morales (34 años) es de 51 triunfos (35 por nocaut) y siete reveses). “El Chino” recuperó el título que perdió ante el británico Amir Kahn; mientras que “El Terrible” se quedó con las ganas de alcanzar su cuarto cinturón (antes había sido dueño de las coronas supergallo del Consejo Mundial de Boxeo y Organización Mundial; la pluma del CMB y la Federación Internacional y la superpluma del CMB).
El combate realizado en el MGM de Las Vegas
cerró una velada de grandes emociones y deparó otra gran satisfacción para Maidana.
Foto: Télam
“Gané yo”.
Erik Morales habló después de la pelea y lo hizo de un modo enérgico y seguro, tal como se había desempeñado durante el pleito. El mexicano manifestó con un énfasis muy especial: “Sólo digo que soy un boxeador limpio y peleo para la gente. Quizás me haya ganado, pero de una manera muy sucia. Yo no pensaba en ganarle: yo gané, soy mejor boxeador que Maidana. Creo que todavía tengo mucha velocidad, y tengo algo que se llama dignidad y corazón. Espero tener la oportunidad de seguir demostrándolo ”.
Guerrero, nuevo campeón ligero
En el enfrentamiento de semifondo de la velada desarrollada en el MGM Grand Hotel & Casino de Las Vegas, el púgil mexicano Robert Guerrero se proclamó doble campeón categoría ligero de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB), que estaba vacante, y del interino de la Organización Mundial (OMB), al vencer por decisión unánime al australiano, de origen griego, Michael Katsidis. El ganador, que ya había sido campeón peso pluma y superpluma, versión Federación Internacional de Boxeo (FIB), vio reflejado su dominio en las tarjetas de los tres jueces que lo vieron ganador indiscutible con puntuaciones de 117-108, 118-106 y 118-107 durante los 12 asaltos que duró la pelea. Guerrero, de 28 años (29-1, 18 KOs), consolidó su posición de ser uno de los mejores pesos ligeros del momento, después de darle una lección de boxeo y castigo a Katsidis (27-4, 22 KOs), que acabó la pelea con la cara completamente inflamada.
Aunque durante todos los rounds el dominio del nuevo monarca fue manifiesto, el más difícil para Katsidis iba a ser el quinto, cuando recibió varias combinaciones de golpes potentes al cuerpo y la cabeza, que lo pusieron al borde del nocaut, pero al final pudo aguantar de pie hasta que sonó la campana.
Además tampoco estuvo afortunado Katsidis en los lanzamientos que intentaba conectarle a Guerrero, y uno de ellos fue demasiado bajo, por lo que el árbitro le quitó un punto al comienzo de la octava vuelta, y otro antes que finalizase por el mismo motivo.
En el noveno asalto, Guerrero también perdió un punto por golpear a su rival cuando el árbitro había dado un “break”, por lo que ambos púgiles no se guardaron nada hasta que sonó la campaña final del duodécimo asalto. En otra pelea destacada de la velada, que fue promovida como “Héroes en Acción”, el estadounidense Paulie Malignaggi, ex campeón del mundo del peso welter junior de la FIB, ganó también por decisión unánime al puertorriqueño José Miguel Cotto.
“Fue una pelea muy dura”
Una vez terminada la lucha, todavía sobre el ring, Maidana expresó: “La verdad es que fue una pelea muy dura y pareja. Esperábamos un rival fuerte y con mucha técnica, por eso me entrené muy bien, pero hay que reconocer que Morales estuvo muy rápido y me complicó bastante. Creo que si quiere, puede llegar a ser campeón por cuarta vez”.
“No sentí demasiado sus golpes, lo que pasa es que estuvo preciso y eso me hizo retroceder en algunos pasajes, pero nunca me mareó. Siempre estuve bien, lo único que reconozco es que me cansé un poco al final porque tiré mucho durante toda la pelea”, señaló el santafesino.
Sobre la estrategia a utilizar, “El Chino” manifestó: “Quise terminar la pelea lo antes posible pero me encontré con un rival fuerte, que aguantó muy bien los golpes; eso me sorprendió, porque no creí que podría aguantar tanto. Aparte tenía el ojo derecho cerrado. Siempre pensé en que venía a pelear contra Morales para ganarle, por eso Rudy (Pérez, su entrenador) me lo repitió varias veces en el rincón; me ayudó pero igual yo sabía que no tenía que aflojar, que tenía que ir para adelante durante toda la pelea”. Por último, el ahora campeón desafió al mexicano: “Si hay que darle la revancha no hay problema, se la doy mañana mismo, estoy dispuesto a pelear contra cualquiera”.
OTRA MIRADA
Un buen aprendizaje
Sergio Ferrer
En nuestro comentario previo, sosteníamos que por fortaleza y empuje Marcos Maidana podía ganarle a Erik Morales, pero que no obstante ello, iba a tener que extremar sus recursos para hacerlo.
No nos equivocamos, ya que en definitiva el “Chino” prevaleció en los dos rounds finales en base a su fuerza y juventud, frente a un rival tan digno como bravío, que durante un prolongado segmento del match logró superarlo -del quinto al décimo capítulo- y que parecía que iba a terminar llevándose la victoria para México (en nuestra tarjeta teníamos 96-96 hasta allí y quedamos con 116-114 finales a favor de Maidana).
También decíamos que “El Terrible” podía ser un peleador “gastado”, pero que es un veterano que sabe mucho y que buscaría hacer prevalecer su experiencia. Y ello fue lo que pasó.
Los estadounidenses suelen recurrir a una expresión que parece ser la más justa para situaciones como éstas, donde el boxeador sapiente prevalece sobre el pegador inexperto y lo va dominando paulatinamente. Ellos dicen “lo escolarizó”, frase equivalente a una versión nuestra muy ilustrativa: “Lo llevó para la escuela”. Hubo pasajes en los que Morales le enseñó el camino al “Chino”.
Por suerte, y porque evidentemente estaba preparado para tirar durante doce vueltas, Maidana torció el rumbo de la contienda en el undécimo asalto, acicateado desde su esquina por un Rudy Pérez intransigente, que le pedía que siguiera dañando a Erik sobre el ojo derecho (lastimado por golpe lícito del santafesino en el primer episodio) y que recurriera a una última dosis de buena voluntad para doblegar los arrestos finales del héroe de Tijuana.
A Maidana le vendría bien un segundo duelo con Erik, para seguir aprendiendo y para terminar de modelar los avances evidenciados en las cuatro primeras vueltas, en las que trabajó bien con el jab de izquierda (toda una novedad dentro de su estilo), así como con combinaciones de gancho y cross de la misma mano al hígado y la cabeza. En ese espectacular inicio, cimentó este trascendente triunfo.
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