El “gerente” de Hebe
Piden investigar a Shoklender por manejo de fondos públicos
Sergio se habría peleado con su hermano Pablo y se alejó de la Fundación de Madres de Plaza de Mayo. Sospecha por el manejo de subsidios para casas sociales y por la compra de una mansión.
De la redacción de El Litoral
DyN
Sergio Shoklender se alejó de la Fundación Madres de Plaza de Mayo, en medio de versiones no esclarecidas sobre el manejo de fondos públicos que se asignan a la entidad que dirige Hebe de Bonafini. Diputados nacionales de la Coalición Cívica pidieron investigar si existe “malversación” de esos recursos.
El ambiente de los derechos humanos se conmovió esta semana con la noticia del alejamiento, aunque se desconoce si fue una renuncia o si Hebe de Bonafini echó a quien hasta allí gerenciaba millonarios recursos, en especial de un programa de viviendas.
Según trascendió, Sergio Schoklender habría discutido e incluso peleado a golpes de puño hace dos semanas con su hermano Pablo, en un incidente ocurrido supuestamente en las puertas de la sede de Hipólito Yrigoyen al 1500, en Capital Federal.
La diputada nacional de la Coalición Cívica, Elsa Quiroz, pidió el año pasado Unidad de Información Financiera investigue a Shoklender por presunto lavado de dinero. Según publica hoy el diario Clarín, la diputada tiene documentos que prueban que Sergio compró en 2008 una casa de 19 dormitorios en un terreno de 12 lotes de José C. Paz, por una suma de 95 mil dólares, y otros 4 lotes por 65 mil dólares.
La subvaluación de la casa y la incongruencia entre los costos y los $ 5 mil que mensualmente cobra Sergio en la Fundación que dirige Hebe de Bonafini, fueron los argumentos presentados por la legisladora para solicitar la investigación.
Una empresa fantasma
Según los datos recopilados por Quiroz, la casa de 19 habitaciones y 14 baños, cancha de tenis, cancha de fútbol, vestuarios, juegos para niños, quincho y piscina, fue adquirida por una sociedad denominada Antártica Argentina que no acreditó personería jurídica pero detrás de la cual aparecía Sergio Shoklender.
El vendedor, Jorge Grisolía, inició un juicio de ejecución a Shoklender por falta de pago de esa operación. Según la legisladora, la UIF no obtuvo en un año información sobre lo sucedido realmente.
Otro diputado nacional, el radical Ricardo Gil Lavedra, reclamó por su parte que el gobierno nacional “brinde a la sociedad toda la información de que disponga en torno a los hechos”, en particular sobre el destino de los fondos públicos que remitió a la entidad que maneja Hebe de Bonafini.
“Las fundaciones son entidades privadas, pero cuando, como en este caso, manejan cuantiosos recursos públicos, resulta imperioso conocer detalladamente el destino que les dan. Existe una vehemente sospecha acerca de que en este terreno, la asignación de los recursos públicos es de una opacidad incompatible con los estándares más elementales de una república”, expuso.
Y aclaró que “no se trata de una cuestión afectiva entre Shocklender y Hebe de Bonafini, como la presentan los voceros del oficialismo, sino de un asunto grave que interesa a todos los argentinos”.