Jornadas agropecuarias para contadores

Por la excelencia en el asesoramiento

En la novena edición del evento, más de 300 contadores apostaron a la capacitación y el intercambio para mejorar la planificación fiscal en el agro. Desafíos y temas pendientes.

Federico Aguer

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¿Cómo interpretar la foto de un esquema impositivo en una empresa condicionada desde su génesis por dos factores tan cambiantes como el precio y el clima?. Esta disyuntiva, en la que se debate todo productor agropecuario, es donde el aporte de los contadores para respaldar la gestión en el mediano y largo plazo es fundamental.

Para eso, el Consejo Profesional de Ciencias Económicas de la Provincia de Santa Fe organizó, (por novena edición consecutiva) sus Jornadas Agropecuarias 2011 bajo el lema: “Por la excelencia en el asesoramiento en la actividad agropecuaria”.

La CPN Beatriz del Carmen Cobelli, integrante del consejo, remarcó que se trata de las novenas jornadas, las que se realizan cada dos años, y que -como siempre- las mismas han cerrado con mucho éxito. “Este evento que comienza hoy tiene inscriptos casi 300 profesionales de todo el país, de toda la zona de influencia de Santa Fe, Córdoba, La Pampa, Entre Ríos, Salta y Tucumán. Más que nada se realizan con la idea que el contador es el asesor en todos los aspectos impositivos, contables, de gestión, y -sobre todo- de apoyo para el sector agropecuario nacional, uno de los más importantes de la economía del país”, destacó.

Para la contadora, hoy la informática ocupa una parte muy importante en todo lo referido a la preparación del trabajo para el contador, sobre todo en temas como la gestión, estados contables, AFIP, la ex ONCCA, planificación fiscal, y la información que debe brindar el contador. Por todo esto, el contador se ve muy involucrado en todo el trabajo del hombre de campo en esta materia, “ya que todo lo que el productor necesita se lo pregunta a su contador”. afirma contundente.

¿Evasión del campo?

Para Cobelli el asesoramiento a la producción se da en temas como el IVA, ganancias, ganancia mínima presunta, bienes personales, etc., ya que todas las empresas tienen la misma cantidad de impuestos, con la diferencia que para el campo se especifican un poco más las actividades (cada vez que hay venta de cereales, de ganado, etc). “Cada producción tiene su impuesto específico”, destacó.

Para revertir la idea del campo evasor, Cobelli enfatizó que se trata del sector que más produce, y por lo tanto, “es el que más tributa y aporta, nosotros estamos convencidos que esto es así y lo ayudamos para que así sea”, afirmó.

Finalmente, destacó estar buscando con estas charlas que se produzca una unificación del conocimiento, “porque muchas veces se dice un cosa en una sucursal de AFIP y en otra se dice lo contrario; hay baches de información, y muchas veces el productor no sabe a quién acudir. Además, en estos encuentros se producen debates que facilitan el trabajo de los contadores. La parte social también es importante, ya que los que vienen de distintos lugares dinamizan la capacitación. “Esta es una necesidad que no podemos desconocer respecto a la velocidad de los cambios, por lo que los contadores, para poder estar al día, debemos acudir a estos eventos”, dijo.

Contador y productor

En su doble carácter de productor y CPN, Eduardo Martínez Ferrario destacó en su disertación que la actividad agropecuaria en el país evolucionó de tal manera que hoy vienen de otros lugares del mundo a preguntarnos cómo lo hicimos. “El gran problema que existe es que esta empresa agropecuaria moderna de hoy con tecnología de información sigue produciendo el mismo producto que la vieja empresa agropecuaria del 1900, donde la única preocupación era el clima”, rememoró.

Más que pensar en agregar valor, debemos pensar en que el campo es una actividad generadora de valor. En Argentina el 43 % de la Población Económicamente Activa está relacionada con la agroindustria”, remarcó.

Para este cabañero, el desarrollo de un país se hace con la suma de sectores y no discriminando a los más dinámicos y competitivos con el falso argumento de que agregan más valor u ocupan a más personas.

“Deberíamos cambiar nuestra visión de la actividad agropecuaria. La nueva visión está asociada a la capacitación, tecnología y gerenciamiento. Detrás de la producción de un kilo de carne o grano de soja está la universidad, las proveedores de genética, agroquímicos, maquinarias, insumos, servicios colaterales, transportes; es decir, los pueblos, y los oficios de los pueblos que trabajan para el campo son grandes generadores de actividad económica y empleo”, destacó. Sostuvo que con flexibilidad y adaptación a los nuevos requerimientos de los consumidores el sector agropecuario argentino tiene un gran futuro. Pero que no necesita que lo fomenten, ya que es uno de los más dinámicos y competitivos del mundo en el agregado de valor”, finalizó.

En estos encuentros se producen debates que facilitan el trabajo de los contadores. La parte social también es importante, ya que los que vienen de distintos lugares dinamizan la capacitación.