Grecia

El FMI libera fondos pero pide más ajuste

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La flamante titular del FMI dijo que crisis de la deuda de la zona euro será la prioridad de su gestión. Foto: EFE

La titular del FMI, Christine Lagarde, pidió más ahorro y privatizaciones. De paso, calificó de ineficiente al sistema judicial griego y reclamó que los partidos políticos dejen diferencias de lado y aprueben las medidas.

 

De la Redacción de El Litoral

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EFE

El Fondo Monetario Internacional aprobó el desembolso de 3.200 millones de euros para Grecia como parte del paquete de rescate conjunto con la Unión Europea y pidió al país una rápida y enérgica implementación del programa de ajuste.

“La viabilidad de la deuda griega depende de forma crítica de la implementación vigorosa y puntual del programa de ajuste, sin margen para patinazos, y el apoyo continuo de los socios europeos y la participación del sector privado”, dijo en un comunicado la nueva directora gerente del FMI, la francesa Christine Lagarde.

La ex ministra de Finanzas francesa aseguró el miércoles en su primera rueda de prensa como responsable del FMI que la crisis de deuda soberana de la zona euro es su principal prioridad al frente del organismo.

El organismo indicó que la situación mejora “gradualmente” y pronosticó que Grecia regresará a la senda del crecimiento en el primer semestre de 2012.

Lagarde dijo que el programa de ajuste está obteniendo “resultados importantes” y mencionó, en ese sentido, la reducción del déficit y la mejora gradual de la competitividad del país.

Añadió, de todos modos, que hay desafíos “significativos” ya que es necesario implementar todavía “importantes reformas estructurales”.

Privatizaciones

La ex titular de Finanzas francesa, que asumió el martes las riendas del FMI, afirmó que es necesario un ajuste fiscal “duradero”, así como el acelerar las reformas que impulsen la productividad.

Insistió en que las autoridades han logrado “avances” en el área fiscal, con la aprobación de una estrategia a mediano plazo que define las medidas para reducir el déficit general del Gobierno por debajo del 3 % del PBI para el 2014.

Aun así, advirtió que esa estrategia afronta “difíciles“ desafíos. Citó, entre ellos, los que calificó como “términos generosos” del empleo público, el cierre de entidades públicas ineficientes y la evasión fiscal.

Subrayó que en el actual escenario resulta “crucial” la rápida implementación de las medidas aprobadas, así como la puesta en marcha de reformas complementarias para mejorar la recaudación pública.

Alabó, por lo demás, la estrategia de privatización del Gobierno, que calificó de un “paso crítico” para impulsar la inversión y el crecimiento y reducir la elevada deuda del país.

Afirmó que, aunque el objetivo de vender activos estatales por valor de 50.000 millones de euros para 2014 es “ambicioso”, es necesario establecer una agencia de privatización independiente que ayude a una “implementación transparente”.

Solicitó, al mismo tiempo, ampliar la agenda de reformas para hacer frente a problemas como el “ineficiente sistema judicial”.

Se espera que el FMI y los países europeos den luz verde en las próximas semanas a un nuevo paquete de ayuda a Grecia, que podría rondar nuevamente los 110.000 millones de euros.

Lagarde pidió el miércoles a los partidos políticos griegos que dejen a un lado sus diferencias en estos momentos críticos.

“Espero que todos los partidos políticos se sientan inspirados por los ejemplos de los partidos políticos en Irlanda y Portugal”, afirmó la responsable del FMI.

“Las rivalidades políticas deberían dejarse de lado cuando es en el interés del país”, subrayó Lagarde.

Debe abandonar el euro

Grecia debe abandonar el euro para poder salir de la crisis, demandó hoy nuevamente uno de los principales economistas de Alemania.

Grecia debe abaratarse entre un 20 y un 30 por ciento para poder recuperar la competitividad, algo prácticamente imposible de conseguir con el euro como moneda, sostuvo el presidente del Instituto Ifo, Hans-Werner Sinn.

El presidente del Ifo, uno de los principales institutos de investigación económica de Alemania, comparó los esfuerzos de ahorro de Atenas con la situación en la llamada República de Weimar, la época en la que Alemania quedó sumida en la hiperinflación y fue caldo de cultivo para la llegada de la dictadura nazi.

“Es parecido a Alemania bajo (el canciller Heinrich) Brüning”, sostuvo Sinn. “Los precios cayeron en Alemania un 23 por ciento entre 1929 y 1933 y los salarios cerca de un 30 por ciento. El país quedó al borde de la guerra civil”.

Según el economista, si Grecia dejase la eurozona podría depreciar su moneda, recobrar la competitividad y sumarse más adelante al espacio único con una cotización diferente.

Sinn no descartó que muchos clientes saquen el dinero de los bancos, lo que llevaría a algunas instituciones a la bancarrota, pero advirtió que de seguir Grecia en la eurozona, las consecuencias podrían ser similares.


The Economist ve a España vulnerable

España es vulnerable a verse infectada por la crisis de deuda soberana que ya ha afectado a otros países de la zona euro si no toma más medidas para impulsar la parte de su economía que es menos competitiva, según opina hoy el semanario The Economist.

En un artículo titulado “Doble personalidad”, se señala que, si bien la economía española es más grande y fuerte que la de Estados como Portugal, Grecia e Irlanda, tiene ciertas características que la exponen al peligro, como baja competitividad y un alto déficit de cuenta corriente.

Los expertos de la revista detectan varias áreas en las que el Gobierno debería intervenir, como por ejemplo en materia fiscal. En este sentido, apuntan que las autonomías, deberían aplicar recortes presupuestarios como lo hace el Ejecutivo central, para cumplir así el objetivo de reducir este año el déficit al 6 % del PBI. La economía española creció sólo un 0,3 por ciento en el primer trimestre del año, frente a un 0,8 por ciento de media en la zona euro, mientras que el FMI augura que el PBI sólo crecerá un 0,8 por ciento en 2011, apunta la revista. Y lo más preocupante, añade, es el aumento de la desocupación paro -en el 20,9 por ciento el pasado mayo-, el más alto de la Unión Europea (UE), con una tasa de desempleo juvenil del 44,4 por ciento. Según “The Economist”, la principal razón del elevado paro es la poca flexibilidad del mercado laboral español, donde resulta difícil despedir a trabajadores antiguos, que acumulan incrementos, lo que se contrarresta con la proliferación de contratos temporales para nuevos empleados. Ante este panorama, muchas de las grandes empresas, como Telefónica, optan por trasladar y expandir sus operaciones en el extranjero, agrega la publicación.