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Una novela sobre la infancia
Silvia Hopenhayn presentará su novela “Elecciones primarias” en la Feria del libro santafesina, el sábado 17, a las 19. Foto: Laura Muchnik
Elecciones primarias es un relato sobre la infancia cuyo eje es la escuela primaria, palabra que la Silvia Hopenhayn eligió para el título de su novela no sólo porque remite al período inicial de aprendizaje, sino también a las primeras experiencias en las que se originarán las también primeras elecciones de vida.
La palabra experiencia es adecuada para describir el instrumento del relato, el lenguaje que lo delinea y le da cuerpo. Porque lo que la narradora quiere es que la palabra transporte, como por un conducto aséptico lo más aséptico posible, sin que toque a la mujer adulta que narra apelando a la memoria, las experiencias vividas desde segundo a séptimo grado, desde los 7 a los 12 años.
La protagonista es una nena, que al inicio tiene siete años está en segundo grado, y, sucesivamente irá ascendiendo los grados y las gradas, como dice Luisa Valenzuela en cita de solapa . Una chica de clase media, de origen judío, que tiene dos hermanos mayores, tan mayores como inalcanzables: ellos militan en política y hacen trabajos sociales en las villas. Después están: Alejandro, el único compañero varón, objeto de su mirada escrutadora y, también, de sus expectativas amorosas; sus compañeras;su propio padre que la lleva a pasear al Jardín Botánico mientras él lee; y su madre, ausente, o no todo lo presente que la nena hubiera deseado, sobre todo en cercanía física, en muestras de afecto, en caricias.
En suma, la narradora relata su paso por una escuela estatal de clase media, en el barrio Norte de la ciudad de Buenos Aires, que, en algunas ocasiones, la obliga a tomar el colectivo 39 para movilizarse, pero no sin riesgo: un día un hombre ha puesto su mano sobre ella para que ella, a su vez, ponga la mano sobre su sexo. La nena sabe y no sabe lo que le ha pasado, pero lo dice sin atenuantes: la violaron.
Ellas la narradora y sus amigas vigilan su cuerpo, lo observan, y, si bien la información con la que cuentan es escasa también por esa razón, la intriga por la sexualidad no cesa. Dos cuestiones vitales las acosan: la menstruación y cómo se hacen los bebés.
Un hecho vertebra el tiempo del relato y proporciona todas las explicaciones que el lector pudiera necesitar para saber por qué la nena cuenta lo que cuenta: un día de 1974, 1º de julio se muere Perón. Y aunque esa muerte y su repercusión llegan al relato como un eco, esa muerte y su repercusión están ahí: el texto deja oír y oler el sonido y el humo de las bombas, el clima de revuelo político, el miedo por las muertes y las primeras desapariciones.
Además, aunque veladamente, sabemos desde el comienzo que hay un exilio familiar posterior que sólo se anuncia: el país ya no era seguro para nadie.
La experiencia en las antípodas del conocimiento probado, las certezas, el saber como fuente del relato es importante para entender por qué la narradora ha elegido escribir así, propósito que enuncia en la primera frase:
“Voy a escribir sin comas para saber por dónde salgo si no hay pausas y seguir de largo sin que la explicación me embauque el sentido [à].”
Silvia Hopenhayn nació en 1966; pasó parte de su adolescencia en Ginebra, Suiza; actualmente vive en Buenos Aires.
Es escritora y periodista cultural. Dirigió el suplemento El Cronista Cultural; fue columnista en Radio Municipal, en la FM Rock & Pop y en Radio Nacional. Ha conducido numerosos programas de televisión dedicados a la literatura. Ha publicado dos libros: Cuentos reales (en coautoría, 2004) y la novela La espina infinitesimal (2006). Elecciones primarias, publicado por Alfaguara, será presentado por su autora en la Feria del Libro santafesina que se lleva a cabo en La Redonda, el sábado 17, a las 19.
