Señal de ajuste

Personas de interés

Personas de interés “Person of interest”. Es el título que Warner estrenó. Está protagonizada por Jim Caviezel y Michael Emerson. Foto: Gentileza CBS

 

Roberto Maurer

En tanto las viudas y los huérfanos de “Lost’’ vagan sin rumbo mientras esperan una serie que la suceda, su artífice J.J.Abrams despierta falsas expectativas, como “Person of interest’’, que Warner acaba de estrenar (martes a las 21), y que también incluye al sofisticado actor Michael Emerson, uno de los habitantes de la isla perdida. Deberán seguir esperando, ya que la nueva producción de Abrams se aproxima más bien a la temática de los thrillers de Hollywood que siguieron al ataque a las Torres Gemelas, y ni siquiera disimula los parecidos con los films “Minority report’’ y “Enemigo público’’. El guión pertenece a Jonathan Nolan, que fue guionista de su hermano Christopher en “Memento’’, vale consignar.

GRAN HERMANO

Desde el atentado que afectó a la “seguridad nacional’’, todos los ciudadanos están bajo sospecha y deben ser vigilados. Se encarnan en “la persona de interés’’ del título, una expresión que proviene de la jerga de las fuerzas de seguridad.

Un ingeniero informático, millonario, ha diseñado La Máquina, un programa para prevenir actos terroristas. “Yo había dedicado mi vida a convertirme en rico hasta ese día en que el gobierno se tomó el derecho de leer los correos y escuchar cada teléfono móvil. La gente quería ser protegida, pero no saber cómo la protegían. Se trataba de separar a los terroristas de la población, antes de que puedan actuar’’, le explica a quien será su brazo ejecutor: ha reclutado a un ex agente de la CIA altamente capacitado, quien, luego de perder a la mujer amada, se transformó en un indigente que vagabundea alcoholizado por las calles de Nueva York. Lo interpreta Jim Caviezel, cuya expresión de hombre atormentado ya utilizó cuando hizo el Jesucristo de la película de Mel Gibson.

Pero La Máquina que monitorea como Gran Hermano a cada uno de los ocho millones de neoyorquinos, se anticipa a todo tipo de crímenes y no solamente al terrorismo, lo que ha obligado a dividir la información de la megacomputadora en dos listas: los relevantes -el terrorismo- y los irrelevantes. La lista de “irrelevantes’’ no interesa y se borra a medianoche: son los múltiples delitos que se producen en una gran ciudad. “Pero la lista de irrelevantes me carcomía’’, dice el ingeniero millonario, quien, luego de entregar su invención al Estado, se reservó una puerta trasera o acceso para entrar diariamente a La Máquina y obtener la información de los crímenes irrelevantes, para evitarlos. La única información que obtiene son los nueve dígitos de la seguridad social de una persona, pero sin saber por qué motivo ha sido seleccionada por La Máquina: potencialmente, ese ciudadano puede ser un criminal o su víctima. Cuando La Máquina selecciona una “persona de interés’’, no se sabe cuándo, ni cómo, ni por qué estará envuelta en un delito.

JUSTICIEROS

Ése es el planteo, y se trata de investigar quién es esa persona y evitar el futuro delito. En el episodio piloto, fue una chica bonita, ayudante del fiscal, cuyos posibles victimarios son un cortejante despechado y un grupo delictivo que busca venganza. Ni una cosa, ni la otra, al final la chica bonita resulta ser la cabecilla de la banda criminal. No era la víctima, era la victimaria.

Se ha formado una pareja de justicieros. Son socios en una cruzada contra el crimen, al margen de la ley. También podrían ser llamados parapoliciales.