Una autovía estratégica, demorada y con dificultades
una ruta de alto impacto regional
La inauguración de la traza “rural” de la 19 pone de relieve parte de la impronta vial del gobierno: visión para encarar obras estratégicas -más allá de que ésta viene de la gestión Obeid- y dificultad para ejecutarlas.
Néstor Fenoglio
Con la inauguración formal que el gobernador Binner abrochó hoy, aun cuando la obra no está ni estará terminada dentro de su mandato como hubiera querido (se muestra la torta, aunque le falte la cereza), se pone en valor una traza estratégica por donde se la mire, y que a la provincia le ha costado -además de unos 700 millones entre lo ejecutado y el faltante- muchos contratiempos y dolores de cabeza. El final de obra, se dijo, entre varios corrimientos de fechas, no operará antes de enero de 2012.
La obra es estratégica, porque la 19 es parte del corredor bioceánico que conecta el Pacífico con Brasil y que atraviesa una de las zonas más ricas del país. Su importancia, apenas minimizada por la alternativa de la 9 -Rosario-Córdoba- y el puente a Victoria, la determina el propio tránsito: el Mercosur “viaja” por esta ruta, que hace rato reclama ser autovía hasta Córdoba, además de integrarse a una red -la 34, la autopista Rosario-Santa Fe, la 11, la 168, entre otras- de indudable fortaleza productiva.
Como se sabe, Santa Fe asumió en su momento la concreción de esta ruta. En rigor de verdad, y aun faltando quince kilómetros para el final de obra -con complicaciones del lado santotomesino, donde hubo que recalcular y agregar obras no previstas originalmente y que todavía hoy son el talón de Aquiles de todo el emprendimiento-, la provincia puede decir que cumplió su parte; y puede reclamarle a la Nación la contraparte, además de una serie de obras en San Francisco y en todo el lado cordobés.
La historia “fina” de la transformación de la 19 en autovía debe remontarse, en efecto al gobierno de Obeid, quien en su momento hizo virar, no sin esfuerzos, una financiación exterior que estaba al principio direccionada hacia una reforma del Estado. Finalmente, y con los fondos externos asegurados, hace 5 años, el 2 de noviembre de 2006, el Poder Legislativo de la provincia de Santa Fe convirtió en ley el proyecto de construcción de esta autovía.
El 25 de abril de 2007, 25 empresas se presentaron para precalificar para la licitación. Y luego, ya en el gobierno de Binner, el 19 de febrero de 2008, se adjudican a cuatro empresas los cinco tramos en los que se había dividido la traza para su construcción simultánea. Las obras finalmente comenzaron el 20 de mayo.
Conforme pasaban los días y los cuatro años de gestión de Binner, la obra se fue “corriendo”: primero, a pedido de las propias contratistas, que no iban a poder cumplir con el plazo. Luego, el final de la obra se ubicaba en el primer trimestre de este año. El ministro Storero debió salir a aclarar entonces, en marzo, que la inauguración sería en tres meses. Finalmente se inaugura en el último día de octubre.
Se adujo que las lluvias fueron aletargando el ritmo de trabajo y que la demora de seis, siete meses o un año según se mida, es razonable y lógica para una obra de esta magnitud. También lo son, desde la óptica oficial, los contratiempos y modificaciones que debieron ensayarse sobre la marcha.
Estos retrasos también ponen en suspenso la repavimentación de la traza vieja de la 19, que ahora es la mano oeste-este, es decir, la que viene de San Francisco. es decir que hay una mano nueva y otra, no.
Desde la provincia, se ha contestado que la transformación de la 9 o la 168, nacionales ambas, en autopistas demandó mucho más tiempo; en tanto se esgrimen reclamos por las también nacionales 11 y 34, colapsadas hace tiempo.
Pero todas estas cuestiones, en breve quedarán zanjadas: no es importante, concedamos, seis meses, siete o un año, no es importante que haya quedado para el ridículo un poste de luz en medio de la cinta asfáltica y al cabo tampoco será importante que una escuela esté a centímetros de una autopista.
Conforme pasen los días y los santafesinos comencemos a disfrutar de la ruta, las demoras y las dificultades le dejarán su lugar al carácter estratégico de la obra; lo coyuntural se olvidará en pos de lo trascendente. Y lo trascendente aquí es que se avance por fin con una ruta regional de indudable impacto, en una provincia que se banca buena parte del movimiento de camiones de todo el país -y del modelo agroexportador que es la base de nuestra riqueza- y que reclama rutas seguras en buen estado a gritos, construidas por la Nación o por la provincia: no importa quién las haga.
¿Invitado por protocolo?
Desde temprano, colaboradores de Jorge Obeid advertían a la prensa que el ex mandatario estaría presente en el acto. El dato tenía su lógica; fue durante su segunda gestión que se tomó la decisión política de reconducir el crédito del Banco Mundial para financiar la obra. El razonamiento invitaba a pensar que Binner había tenido el “gesto” de invitar por ese motivo a su antecesor, y hasta se elogiaba el hecho. Pero cuando los mismos dirigentes obeidistas -casi tantos como ministros actuales que concurrieron a la ceremonia- comenzaron a arribar al lugar del acto, le aclaraban a los periodistas que ellos se habían enterado de la inauguración por los diarios. Desde Protocolo de la provincia se advirtió, entonces, que todos los legisladores nacionales son invitados a todos los actos, y que en ese carácter -el de diputado nacional- se le había girado la invitación a Obeid.
Consultado por El Litoral, el ex gobernador intentó relativizar el hecho, pero admitió que no lo invitaron.
“No quiero hacer de esto una cuestión de Estado. A mí personalmente no me llegó ninguna invitación; puede haber llegado a la Cámara de Diputados y yo no haberla visto. Eso es una cuestión formal. Lo importante para mí es la continuidad de las obras y la realización”, planteó.
En última instancia, dijo que el hecho quedó superado con la decisión de Binner sobre la marcha de invitarlo para que compartiera el corte de cinta.
“Por supuesto que es así; esa es una cosa que reconozco y me parece un buen gesto”, expresó.
Postales de la 19: en la actualidad, en todo su esplendor; con un anecdótico poste de luz en medio de la ruta; y con el “daño colateral” de la ruta “peinando” una escuela en Paraje La Vigilancia.
Foto: Archivo El Litoral
Asistentes
Del acto participaron los ministros de Economía, Ángel Sciara; de la Producción, Juan José Bertero; de Desarrollo Social, Pablo Farías; de Salud, Miguel Ángel Cappiello; de Aguas y Servicios Públicos, Antonio Ciancio; de Obras Públicas, Hugo Storero, y de Seguridad, Alvaro Gaviola. También, los diputados provinciales Carlos Fascendini y Luis Mauri, y el senador por Las Colonias, Rubén Pirola.
Del obeidismo asistieron: Jorge Obeid, el diputado nacional Juan Carlos Forconi, el diputado provincial Mario Lacava; y ex colaboradores del mandatario como Humberto Giobergia, Rubén Michlig y Juan Manuel Pussineri.
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