Las cuentas después de las elecciones
El superávit nacional es promesa y se suman los rojos provinciales
Binner y Schiaretti. Dos gobernadores salientes y de distintos partidos, con un mismo problema: la Nación les debe plata y no se las manda. Foto: Archivo El Litoral.
En Córdoba, el gobernador Schiaretti espera “que la presidenta cumpla con su palabra”, pero reclama porque la plata no llega. En Santa Fe, el déficit de las cuentas provinciales genera polémicas partidarias, pero está pendiente el reclamo a la Nación ante la Corte.
De la redacción de El Litoral
Amado Boudou dejó firmado en su proyecto de presupuesto nacional 2012, que este año las cuentas nacionales cerrarían con un déficit de unos $ 11.800 millones. Ese sinceramiento documentado, pasadas ya las celebraciones electorales, pone en evidencia que hay problemas fiscales a pesar de todos los récords de recaudación, y que las provincias no están exentas a ese escenario.
Ayer el gobernador de Córdoba, Juan Schiaretti, renovó sus críticas a la Casa Rosada por falta de cumplimiento de acuerdos firmados con la provincia, al tiempo que advirtió que la falta de cumplimiento por parte de la nación de sus compromisos, puede generar “problemas financieros” al Estado mediterráneo.
Por el lado de Santa Fe, el déficit viene con aristas políticas locales pero también con problemas de relación de larga data. Jorge Obeid se encargó de subrayar en las últimas horas que le dejó al gobierno de Hermes Binner una caja con $ 1.650 millones y un presupuesto con un superávit de $ 450 millones. Mientras que el propio Binner le deja a Bonfatti un rojo de $ 1.500 millones y un presupuesto con un déficit de $ 500 millones más.
En su reciente paso por Córdoba, Binner calculó en unos $ 4 mil millones la deuda de la Nación con Santa Fe, con lo que “desplaza” hacia la Nación -y por consiguiente al partido de gobierno- las responsabilidades. Y no olvida que todas las grandes fuerzas políticas de la provincia hicieron causa común en los reclamos santafesinos contra la Casa Rosada ante la Corte Suprema, en un expediente pendiente resolución.
Reclamo con peperina
Juan Schiaretti renovó en las últimas horas sus críticas. “Siempre digo que si la Nación no cumple los acuerdos firmados, más tarde o más temprano, la provincia tendrá problemas financieros”, sostuvo en Villa Dolores. De ese modo, el mandatario saliente se refirió al compromiso que asumió el 29 de agosto la presidenta Cristina Fernández cuando lo recibió en Buenos Aires y le propuso solucionar la deuda con Córdoba por más de 1.400 millones de pesos.
Schiaretti insistió ayer al inaugurar obras en el interior cordobés que espera “que la presidenta cumpla con la promesa que me hizo, en el sentido de que se iba a ocupar del tema. Envié una nota a la mandataria pidiendo otra reunión hace un mes y esperamos que nos la conceda porque los funcionarios que tenían que ocuparse del problema no lo han hecho”, advirtió.
Y, reiteró: “Espero que la presidenta cumpla su palabra y no corresponde que yo haga otro comentario al respecto”. El gobierno nacional mantiene la deuda con la provincia, entre otras cuestiones, por el acuerdo para solventar el déficit de la Caja de Jubilaciones.
/// EL DATO
Mediterráneo
Según el cálculo cordobés, la Nación le deberá en diciembre $ 1.700 millones en los términos del convenio entre la provincia y la Anses. Schiaretti señaló al respecto que “solventar el déficit de la Caja de Jubilaciones no es un favor que nos hace la Nación; hay una ley sancionada por la cual las provincias cedimos el 15 por ciento de la Coparticipación para sostener el déficit del sistema previsional nacional”. Apuntó que “este año, la Nación ya se quedó con 2.100 millones de pesos, que es el porcentaje que Córdoba cedió, pero no envió nada de los 1.040 millones de pesos comprometidos”.
Deudas provinciales y poder central
La consultora Economía y Regiones calculó que en 2012 las provincias necesitarán unos $ 27.000 millones para cubrir sus obligaciones. El proyecto de presupuesto nacional prevé unos 12 mil millones para “asistir” esas necesidades, pero persiste la incógnita sobre quién deberá hacer el ajuste si la crisis internacional finalmente afecta los ingresos que hasta aquí han permitido “tirar la pelota hacia adelante”. En mayo del año pasado, la presidenta Cristina Fernández firmó el decreto 660 que creó el Programa Federal de Desendeudamiento de las Provincias Argentinas. Juntó todos los recursos que no habían transferido las provincias en concepto de ATN y los usó para pagar las deudas que las jurisdicciones provinciales habían acumulado con la Nación tras la salida de la crisis de 2001. Las provincias tienen que empezar a pagar esas deudas desde el 1º de enero de 2012. El senador nacional rionegrino Pablo Verani acaba de plantear un proyecto para que el período de gracia se extienda por un año más y las provincias comiencen a devolver la plata en 2013. El esquema de la Casa Rosada es manejar la deuda de las provincias para condicionar la voluntad de los gobernadores. Daniel Scioli es un caso claro de esa arquitectura de poder: terminará este año con un rojo de $ 8.500 millones y si tiene que pagar el año que viene el FDP, tendrá que pedir prestado unos $ 13.500 millones más. La deuda de la provincia de Buenos Aires es de más de $ 24 mil millones.
La caja nacional manejada a discreción permitió que estos problemas no incidieran en el clima electoral. Tampoco en Santa Fe, donde las administraciones peronistas le heredaron a Binner una provincia sin deudas, lo que le permitió al socialista manejarse con cierta comodidad frente a los condicionamientos nacionales, en un margen que Bonfatti no tendrá sin un ajuste, una financiación nacional, un crédito privado o bien un reconocimiento de la Corte al planteo pendiente de Santa Fe (ver recuadro).
/// la clave
Santafesino
La Fundación Apertura de Rosario calculó en 1.012 millones de pesos la deuda que la Nación mantiene con Santa Fe por incumplimiento de los pactos fiscales vigentes en materia previsional. Hermes Binner llevó ante la Corte el reclamo de que al menos se le reduzca a la mitad la detracción del 15 % que sufre en sus recursos de coparticipación, por un acuerdo que se justificaba en el déficit de Anses -hoy superavitaria- y que fue prorrogado unilateralmente por el gobierno central. Según la fundación, la suma adeudada alcanzaría para financiar cuatro de los acueductos proyectados en la provincia.
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