/// EL INVITADO

Maíz: ¿otro año perdido?

Néstor Roulet

Presidente de Cartez

(Conf. de Asoc. Rurales Tercera Zona)

A los alentadores datos productivos de la actual campaña de maíz en la que a una mayor área sembrada (4.8 millones de hectáreas) se le puede sumar por las buenas condiciones climáticas - un buen rendimiento unitario (70qq proyectados en promedio), se le contrapone la posibilidad de que el productor no reciba por el cereal el precio que le corresponde (FAS teórico). Con el pretexto de asegurar alimentos a los argentinos que están sobradamente asegurados al producirse continuamente saldos exportables el Gobierno Nacional utiliza herramientas como los ROE (Registro de Operaciones de Exportación) y sus cuotificaciones (entre febrero y diciembre se autorizaron poco menso de 14 millones de toneladas) quitándole transparencia a los mercados e incentivando la transferencia monetaria de la producción primaria a otros eslabones de la cadena.

Durante el corriente año el productor de maíz recibió por tonelada u$s50 menos de lo que podría haber cobrado si los mercados hubiesen sido transparentes, lo que ocasionó una pérdida aproximada de 1.100 millones de dólares. Si esta acción se sigue llevando a cabo, teniendo en cuenta la producción de la actual campaña, las pérdidas ocasionadas a la producción primaria de maíz pueden incrementarse.

El planteo es: Si el Gobierno puede calcular con muy reducido margen de error el saldo exportable, ¿Por qué no actúa en consecuencia? Hoy estamos ante la posibilidad de un saldo exportable récord. Si al stock final de la campaña anterior le sumamos la producción de la campaña 2011/12 y le restamos el consumo interno ( 5,7 millones de toneladas de consumo animal, 2,4 millones de toneladas de molienda y 0,075 de usos y residuales) concluimos que para el año que viene tendremos un saldo exportable que superará las 22 millones de toneladas. Los exportadores ya compraron 3,6 millones de toneladas por lo que quedan aproximadamente 19 millones sin comercializar.

Si el Gobierno no adopta las medidas correctas de apertura de las exportaciones para promover la libre competencia, sin dudas nos encontraremos con una situación similar a la de este año, cuando el productor recibió 50 dólares menos por tonelada, con el agravante que por la mayor producción, dejará de percibir -por transferencias monetarias hacia otros eslabones de la cadena - más de 1.400 millones de dólares.