Los chicos de Las Heras

Investigan si fue uno o fueron dos los autores del cuádruple crimen

Télam

Los investigadores del cuádruple crimen de Mendoza procuraban establecer si el niño de 10 años asesinado junto a su madre y sus abuelos adoptivos fue el autor de la masacre y luego fue acuchillado por otro chico de 14, quien aportó esta versión a la Justicia y dijo que actuó en defensa propia.

No obstante, los pesquisas no descartaban que el adolescente haya participado de los ataques y que, por tal motivo, inicialmente haya introducido una versión sobre un extraño que entró a la vivienda a robar y mató a todos, lo que ya quedó descartado.

Anoche, el fiscal de Menores subrogante Gustavo Farmache decidió que el chico quede a cargo de la Dirección de Niñez, Adolescencia y Familia hasta que se determine cuál fue su participación en el hecho.

Fuentes judiciales informaron que Farmache adoptó esta decisión tras interrogar al adolescente, que es inimputable por su edad, y que luego podría ser enviado a un instituto de menores o ser entregado a su familia.

“Entre esas cinco personas que estaban en la casa está el autor de los crímenes”, manifestó el ministro de Seguridad de Mendoza, Carlos Aranda, al descartar un autor ajeno a la casa.

El giro de la investigación se produjo cuando el adolescente de 14 años, que en principio había denunciado que un hombre encapuchado y vestido de negro había cometido la masacre y que él había llegado a ocultarse, confesó a la Policía que había asesinado al niño de 10 en defensa propia.

Según informó el director de la Policía mendocina, Carlos Caleri, el adolescente relató que el autor de la muerte de los dos abuelos y de la madre fue el propio menor fallecido, quien luego habría intentado atacarlo y por eso él se defendió y lo mató.

Tras esa declaración, que pone en escena la participación de dos menores en el suceso, la fiscal de Delitos Complejos que inicialmente había tomado el caso, Claudia Ríos, declinó su competencia en favor de Farmache.

Durante la jornada, los investigadores realizaron varias diligencias en busca de pruebas, entre ellas un allanamiento en la casa del adolescente, que vivía frente a la de la familia asesinada, donde se encontró ropa manchada con sangre.

El fiscal aguardaba con expectativa los resultados de peritajes y de las autopsias de las víctimas para establecer el orden de los ataques y comenzar a seleccionar y ordenar en la escena las huellas que indiquen las circunstancias de los sucesos.

Caleri informó que el niño de 10 años asesinado “tenía distintos problemas de orden psiquiátrico y recibía atención y medicamentos”, en tanto el ministro Aranda aseguró que, según testigos, había tenido algunos episodios de violencia previos.

Lo mismo contó el padrino del chico, quien detalló que padecía “esquizofrenia” y había atacado tanto a su madre como a compañeros de colegio, razón por la cual hacía 20 días que no iba a la escuela.

Personal especializado en homicidios investiga en el vecindario donde se produjo la tragedia. Foto: DyN