La presión en la red se normalizará gradualmente

 

Exitosa conexión de cañerías para el acueducto Hernández

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1 / Remoción. El operativo incluyó el retiro de un tramo de 20 metros de la vieja cañería de hierro fundido por un nuevo segmento de hierro dúctil de unos 12 metros de longitud y la colocación de un “ramal T” y otras dos grandes válvulas.

Foto: Gentileza Aguas Santafesinas

En un operativo que comenzó a la madrugada y que exigió la disminución en toda la ciudad de la presión de agua, se logró el segundo empalme del nuevo acueducto de la Toma Hernández.

 

De la Redacción de El Litoral

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El segundo empalme del nuevo acueducto de la Toma Hernández, en el sector oeste -Dorrego y Gobernador Candioti-, fue un éxito. El operativo comenzó a la madrugada y concluyó alrededor de las 9.30. De todas maneras, el suministro de agua potable se normalizará en forma gradual durante la tarde.

En diálogo con El Litoral, el vocero de la empresa Aguas Santafesinas, Germán Nessier, señaló que durante la ejecución de los trabajos no hubo contratiempos. Explicó que, además del empalme de cañerías, se colocaron válvulas nuevas que permitirán una “mayor maniobrabilidad en el sistema de abastecimiento de la planta”.

Para poder concretar esos trabajos, que también se hicieron hace un mes cuando se realizó el primer empalme pero en el sector este, fue necesario sacar de servicio la Toma Hernández, ubicada sobre el riacho Santa Fe, y continuar con la prestación del servicio a través de la toma del río Colastiné. Ésta fue la causa de la baja presión de agua que hubo en toda la ciudad a partir de las 6 de la mañana.

“En condiciones normales, la planta potabilizadora se abastece de las dos tomas de agua que hay en la ciudad: la del riacho Santa Fe y la del río Colastiné. Cuando funciona solamente una, como ocurrió ahora -porque para hacer el empalme hubo que sacar de funcionamiento la Toma Hernández-, trabaja de manera restringida”, manifestó Germán Nessier.

Consultado sobre cuándo empezará a funcionar el nuevo acueducto que conducirá el agua cruda del riacho Santa Fe hasta la planta potabilizadora, el vocero de la empresa dijo que todavía se deben efectuar algunos ajustes técnicos. Aclaró que con el segundo empalme concluye la obra civil pero no la obra hidráulica. “Concluidos los dos empalmes, ahora hay que hacer pruebas hidráulicas de la nueva cañería, tareas de limpieza, lavado y desinfección y luego sí se procederá a habilitar el nuevo acueducto”, dijo.

Cabe señalar que durante la jornada de hoy, debido a la baja presión en el servicio, Aguas Santafesinas asistió a los hospitales y sanatorios de la ciudad con camiones cisterna.

Resta decir que los trabajos de empalme del acueducto Hernández iban a realizarse en la madrugada del domingo. Pero debieron adelantarse para esta madrugada. El motivo: se detectó una falla estructural en el antiguo conducto de PRFV (poliester reforzado con fibra de vidrio) y ello representaba riesgo para el desarrollo de los trabajos que se concretaron hoy.

Por qué se construyó un nuevo acueducto

A mediados de 2010, el acueducto de la Toma Hernández, ubicada sobre el riacho Santa Fe, comenzó a evidenciar problemas estructurales. En varias oportunidades, la ciudad se quedó sorpresivamente sin agua. Como solución, las autoridades decidieron reemplazarlo en forma total construyendo uno nuevo en paralelo.

Cabe señalar que el conducto original del acueducto de la toma Hernández fue construido en la década de 1980, utilizándose cañerías de PRFV (plástico reforzado con fibra de vidrio). Para construir el nuevo, se optó por el empleo de cañerías de hierro dúctil que, además de ser las más adecuadas para esta función de acueducto de impulsión de agua cruda, tienen mayor diámetro que las del conducto original.

El hierro dúctil es un material muy utilizado para sistemas de agua potable con alta presión, dado que reúne varias ventajas. Entre ellas, que las cañerías tienen mayor resistencia estructural, son más livianas que las de hierro fundido, resisten la corrosión y poseen mayor capacidad de absorción de vibraciones, tracciones y choques.

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2 / Manos a la obra. Más de 35 personas, entre personal operativo y técnicos de Assa y operarios de la empresa contratista, participaron del empalme del nuevo acueducto. El costo de la obra asciende a 5 millones de pesos.

Foto: Guillermo Di Salvatore

/// ANTECEDENTES

Mayo, 2011. Comenzó la obra de renovación total del acueducto correspondiente a la Toma Hernández.

Octubre, 2011. Finalizó la construcción de un túnel metálico de casi 60 metros de longitud y 2 metros de diámetro por debajo de avenida Alem. En su interior se instalaron caños de hierro dúctil, por donde se conducirá el agua cruda del riacho Santa Fe hasta la planta potabilizadora ubicada en barrio Candioti.

Noviembre, 2011. Se realizó el primer empalme de la nueva cañería en el extremo este.