Exportadores piden su suspensión

Nuevos rechazos a las trabas importadoras

Consideran que la medida no está de acuerdo con compromisos internacionales del país.

De la Redacción de El Litoral

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DyN

El nuevo control a las importaciones dispuesto en la resolución 3.252 de la Administración Federal de Ingresos Públicos (Afip) sumó en las últimas horas nuevas quejas tanto de los importadores como de los exportadores.

La Cámara de Exportadores de la República Argentina (Cera) pidió a la Afip que “suspenda” la resolución que establece la Declaración Jurada Anticipada de Importación (Djai), por entender que la medida es “no conforme” con “compromisos regionales e internacionales con los cuales Argentina está comprometida”.

El presidente de la Cera, Enrique Mantilla, sostuvo en un comunicado que en la entidad “no hemos encontrado en la OMA (Organización Mundial de Aduanas) ninguna recomendación por la cual antes de realizar una compra en el exterior se deba realizar una Djai”.

Por tal razón, Mantilla pidió que “se suspenda la medida para abrir un período de consultas”, ya que “en principio, la norma es no conforme a los compromisos regionales (Mercosur, Aladi) e internacionales con los cuales Argentina está comprometida”.

Afectados

Por su parte, el economista Bernardo Kosacoff indicó que “lo que hoy tenemos es en los sectores con más valor agregado una muy alta participación e insumos importados para el propio proceso productivo, esto genera una necesidad de importaciones para la producción”.

Por ese motivo, Kosacoff señaló que “se requieren medidas que tengan cuidado de tratar de no alterar la situación de aquellos sectores que requieren de estas materias primas para poder seguir generando productos manufactureros”.

Al respecto, sostuvo que se afecta a todo el espectro industrial, pero en especial a sectores clave como el automotor, que tienen “una fuerte dependencia de autopartes importadas para terminar un coche”.

Gobierno defiende nuevo régimen

Argentina insistió hoy en que su “prioridad” es mantener este año un superávit comercial del orden de los 10.000 millones de dólares mediante políticas de seguimiento de las importaciones e incentivos a la producción nacional.

“Si tenemos un mundo en crisis, tenemos que cuidarnos de que esa crisis no nos llegue”, subrayó la secretaria de Comercio Exterior, Beatriz Paglieri, en una entrevista con el diario Tiempo Argentino.

Luego de reiterar que la premisa “fundamental” de Argentina es mantener su saldo positivo en el comercio exterior, aseguró que es “absolutamente falso” que se haya “generalizado” el mecanismo de licencias no automáticas de importación, por el cual hay que pedir autorización para concretar la compra en el exterior.

En este sentido, Paglieri señaló que en 2011 las importaciones con autorización alcanzaron a unos 8.400 millones de dólares, el equivalente al 14 % del total del “universo” de productos comprados a terceros países.

La responsable del Comercio Exterior argentino sostuvo que el régimen para importaciones de bienes de consumo que entrará en vigor en febrero próximo “va a dar más transparencia” comercial y servirá para apuntalar la política de incentivos a la producción nacional.

Destacó que el gobierno ha fomentado acuerdos de inversión para la sustitución de importaciones en sectores clave de la industria y con la participación de los sindicatos con el fin de preservar las fuentes de trabajo.

“Hay mucha responsabilidad empresarial por evitar que la crisis nos afecte”, apuntó Paglieri.