llegan cartas
El pájaro
José María Chartier.
DNI. 6.191.112, ciudad.
El pájaro es un ave que con el solo hecho de saber volar lleva en su estructura la forma o habilidad de poseer la libertad merecida, con el fin de sobrellevar la condición de su propia especie. No hay peor herejía para una persona que tener un pájaro en cautiverio.
Tener un pájaro en cautiverio es robarle el ritmo de la libertad, que es el único anhelo para conquistar su propia existencia.
Voy a referir hacer una narración que me llamó mucho mi atención. En una esquina de mi barrio, sobre un paraíso añejo, dos pájaros horneros construyeron su morada. Daba gusto ver con qué sostén hacían su alcoba. Con qué libertad y valor trabajaban desde hora muy temprana.
Iban y venían con un poquito de barro que ellos mismos preparaban. Al terminar su nido yo veía con sorpresa que la puerta de entrada la hicieron mirando al sur. Mi sorpresa no tenía forma de encontrar una explicación. Después de unos días desaparecieron los dos pájaros horneros, porque al nido nadie lo habitó. Mi observación fue pensar para mis adentro, “algo está por cambiar”.
Cuando yo era chico me prestaron una gomera y salimos como de cacería. En un tirar maté un pajarito. Me dio tanto dolor que salí disparando y nadie me podía alcanzar. No sé si de pena o de culpa por haber cometido esa locura de matar a un indefenso. Hoy, a mis 85 años, no puedo olvidarme de aquel acto vandálico. Nunca más maté un pajarito. Yo nací en el campo y los pájaros con su trinar nos anunciaban que el sol venía asomando y que era hora de dejar la cama.
Había tantos pájaros “morajúes”, que cuando volaban en bandada tapaban el sol de la tarde.
Hoy todo aquel espectáculo maravilloso dejó de existir. Yo creo que es a causa de la fumigación. O bien emigraron a otros lugares.




