Mañana a las 19.10 en Santa Fe se juega “el partido”

Unión y su coraje frente

al Boca campeón e invicto

Finalmente, Alexis Fernández ingresaría por Barrales —además de Velázquez por Montero— y Kudelka volvería al 4-4-1-1. Riquelme será titular en el once de Falcioni.

 

De la Redacción de El Litoral

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Se terminó el tiempo de la polémica en Boca. Se terminó el tiempo de la especulación en cuanto a los cambios de Kudelka en Unión. Llega la hora de la verdad, la única que vale en el fútbol. Mañana, desde las 19.10 con un marco espectacular, se jugará “el partido” de la segunda fecha del fútbol argentino. Siempre es noticia que llegue Boca a cualquier lado, máxime si es campeón y “chapea” con un invicto de 32 partidos sin conocer la derrota. Si a eso se le agrega todo lo que pasó después del 0-0 en Venezuela por la Copa Libertadores donde “tembló el vestuario” entre los jugadores y el DT, la expectativa se redobla. Por eso ayer había 22 cámaras de TV cuando llegó el momento de Julio César Falcioni en la conferencia de prensa.

Desde el vamos se sabía que el zurdo nacido en Vera, Jorge Velázquez, aparecería en la zona de medios para reemplazar al “Memo” Montero, expulsado en La Paternal, con lo cual Matías Donnet se mudaría a la banda derecha en el otro carril.

Pero el técnico siguió probando y —si bien no lo confirmó— todo parece indicar que meterá otro cambio de nombre más, lo cual modificará el dibujo táctico para volver al 4-4-1-1. La idea sería insertar a Alexis Fernández al lado del uruguayo Pablo Míguez, con lo cual dejaría su lugar Jerónimo Barrales, atacando con Rosales de mediapunta y Diego Jara como único delantero neto.

En la semana, Kudelka repitió sin cansarse la idea de “tenencia de pelota” y “posesión de balón”. Muchas de esas virtudes se las garantizaba Marcelo Sarmiento el año pasado pero ahora debe cocinar con lo que tiene. Y lo que tiene por el callejón central es un batallador Míguez al que se sumaría un equilibrado Alexis Fernández, que demostró estar a la altura de las circunstancias cada vez que el técnico lo necesitó.

Del otro lado, quizás condicionado por todo lo que pasó, Falcioni no da lugar a ninguna rotación ni descanso y viene al 15 de Abril con lo mejor que tiene para poner en campo. No hace falta agregar nada más cuando se trata del último campeón del fútbol argentino y con una seguidilla que fue creciendo hasta 32 partidos sin conocer la derrota.

En la cancha no entrará ni un alfiler, porque Unión debió interrumpir la campaña de socios y porque Boca vendió en un ratito las 2.500 populares visitantes en Buenos Aires.

Según trascendió, además de las disculpas personales y grupales, tal como contó el entrenador de Boca, los referentes del plantel esperaban un gesto público. Pero esto no ocurrió y el clima continúa enrarecido.

Si bien las cámaras televisivas mostraron algunas tomas del entrenador haciendo bromas con Darío Cvitanich, la relación de Julio César Falcioni con los referentes de Boca sigue tirante. La relación está cortada y es muy complicado que pueda haber una vuelta atrás. Todos se enfilan detrás de los logros, claro está, pero el diálogo y el trato entre entrenador y jugadores ya no es el mismo.

Algo se rompió. Está claro. Hubo un pedido de disculpas grupal y personal, tal como atestiguó Falcioni ayer en una conferencia de prensa llena de frases hechas y repetitivas, más allá que el propio entrenador se encargó de pedir disculpas por esa “repetición de palabras”.

Desde el plantel, los más grandes, no se bancan que el entrenador muestre un diálogo adentro y otro afuera. Falcioni fue claro: “las cosas grupales quedan dentro del vestuario”, tan cierto como que el escándalo que explotó en Venezuela, tomó dimensión justamente porque alguien, dentro del camarín, mostró las esquirlas de la bomba.

De todos modos, en la cancha, Boca llega con todo al 15 de Abril. Unión quiere revancha del duro cruce en La Bombonera cuando fue goleado en el torneo pasado. Llega la hora de la verdad: las 19.10 de mañana domingo cuando pite Pompei.

/ foto de apertura

El once que pondrá Frank Darío Kudelka buscará regalarle una alegría a la multitud tatengue en el 15 de Abril. Enfrente estará el Boca campeón con 32 partidos invicto. El grupo, lejos, lo mejor de Unión. Foto: Pablo Aguirre

250 pesos

El costo de plateas para socios

En el sector de la Redonda, quedó un remanente de plateas para socios de Unión, los que ingresan a la zona de tribunas sin pagar entrada. Esas ubicaciones, exclusivas para socios tatengues, se pondrán a la venta hoy hasta las 19 y mañana desde las 10 en las boleterías sobre Pellegrini. El juego de fondo comenzará a las 19.10, mientras que a las 16.45 se jugará Unión-Boca en reserva. El 15 de Abril abrirá las puertas a las 16.15. El horario de atención en la Oficina de Socios será mañana de 9 a 15 para pagar cuotas atrasadas y reempadronarse.

32 partidos

El invicto del Boca de Falcioni

Más allá de toda la polémica que se generó en la semana, después del temblor en el vestuario en Venezuela, nadie puede negar la efectividad del que mañana será rival de Unión. Hace 32 partidos que no conoce la derrota y llegará con el objetivo de mantener la racha en Santa Fe. Además de los once titulares, los demás convocados por Falcioni para concentrar son: Sebastián Sosa, Matías Caruzzo, Juan Manuel Sánchez Miño, Pablo Ledesma, Cristian Erbes, Nicolás Colazo, Cristian Chávez, Nicolás Blandi y Sergio Araujo.

Mañana dirige Juan Pablo Pompei

El gran choque de mañana en Santa Fe, que comenzará a las 19.10 entre el local Unión y el campeón Boca, será controlado por el experimentado Juan Pablo Pompei. Seguramente, el juego en el 15 de Abril entre xeneizes y tatengues será uno de los últimos en la carrera arbitral de Pompei. Cerca de los 45 años, el límite de la edad para los jueces internacionales, este árbitro es uno de los referentes de la camada vieja, entre los que se destacaron Castrilli, Elizondo y Baldassi. Si le da el físico para ir y venir con las diagonales, le sobra oficio para manejar Unión-Boca.

Riquelme tampoco habla

El enganche de Boca se refirió al escándalo que se originó esta semana en el club de la Ribera. “Cada vez que hay un conflicto hasta con el portero, lo quieren meter a Riquelme. Por suerte esta vez se dieron cuenta rápido”, indicó el capitán y referente.

Tras el conflicto generado en Boca, que casi termina con el alejamiento de Julio Falcioni de la dirección técnica, el “10” volvió a referirse al tema, dijo que está tranquilo y se quejó por verse involucrado cada vez que hay un problema en el club.

“Para mí no hubo ningún malentendido, el presidente (Daniel Angelici) dijo que Riquelme no tenía nada que ver y eso aclara todo”, afirmó el capitán xeneize, al tiempo que aclaró que no tuvo “ningún problema con nadie”.

El talentoso jugador boquense se quejó de verse involucrado “cada vez que hay un problema en el club”, pero destacó que “el tiempo siempre pone las cosas en su lugar. El presidente y el vice Crespi dijeron que yo no tenía nada que ver, yo no me meto en nada, sólo quiero jugar al fútbol. Pero cuando hay cualquier problema, hasta con el portero, lo quieren meter a Riquelme”, indicó.

Consultado sobre los motivos que desencadenaron el enfrentamiento entre Falcioni y algunos jugadores del plantel, Riquelme se negó a dar precisiones al argumentar que “las cosas que pasan en el vestuario quedan ahí. Toda la vida me manejé así. Además es normal que el entrenador quiera hablar con nosotros y nosotros con el entrenador, pero jamás voy a contar lo que se vive dentro del vestuario”, afirmó Román en una entrevista a la señal Fox Sports.