El apagón de anoche, en el corazón geográfico de la ciudad

Cables y fusibles quemados en el Centro de Distribución Mayoraz

La Empresa Provincial de la Energía destacó que ayer no hubo un nuevo récord de demanda sólo porque los cortes -programados o no- bajaron los registros.

Cables y fusibles quemados en el Centro de Distribución Mayoraz

Un aliado para el comercio. Los generadores eléctricos sustituyen el servicio de la EPE en una carnicería de Salvador del Carril y Alvear.

Foto: Guillermo Di Salvatore

 

 

De la redacción de El Litoral

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En el Centro de Distribución Mayoraz, pasadas las 2 de la mañana, se produjo el desperfecto eléctrico que afectó a la mayoría de los santafesinos que anoche sufrieron la falta de energía. Hubo cortes rotativos, de tipo preventivo y un apagón en el corazón geográfico de la ciudad, debido a la falla en los fusibles del centro ubicado en la avenida Aristóbulo del Valle y Angel Casanello.

Las instalaciones no soportaron la carga que había en ese momento: los fusibles no saltaron sino que se incendiaron, lo mismo que los cables y otras instalaciones de los tableros, cuyas protecciones fueron insuficientes, explicaron a El Litoral voceros de la Empresa Provincial de la Energía.

La misma fuente dijo que ayer la demanda de potencia era tan alta que no se registró un nuevo récord simplemente porque el servicio no pudo satisfacerla: hubo cortes rotativos, para prevenir el daño de los equipos y un apagón que afectó la zona delimitada por Pedro Díaz Colodrero, la avenida Galicia, la calle Sarmiento y la avenida Peñaloza.

A ese sector, se sumaron otros cortes con los que la EPE busca aliviar sus equipos para evitar que la demanda supere su capacidad de distribución.

El área afectada desde las 2 de la madrugada hasta las 9 de hoy es particularmente amplia. En la EPE no se proporcionó el número de clientes afectados, pero puede decirse que entre los apagones accidentales y los cortes preventivos, anoche media ciudad sufrió problemas con el servicio, de diferente consideración y secuelas.

Cabe destacar que no es usual que salga de servicio un Centro de Distribución. El último episodio de este tipo se registró a fines de 2009, con el incendio del CD Rosario, en el microcentro santafesino.

Último recurso

“Es una medida que se toma cuando no queda ningún otro remedio”, reconoció a El Litoral el vocero de la EPE que explicó que los cortes rotativos preventivos representan “el último paso”, la acción previa a un eventual colapso más grave, con más daños a las instalaciones eléctricas y demoras en la recuperación del servicio.

La fuente subrayó que es inusual la ola de calor, no por las temperaturas alcanzadas sino porque “durante una semana se han sostenido mínimas y máximas muy altas, sin ningún momento de alivio”. Explicó que esa situación de la demanda termina por afectar la infraestructura eléctrica.

Sobre el Centro de Distribución Mayoraz, que falló anoche, la EPE sostiene que la instalación estaba bien, en muy buenas condiciones, pero “preparada para un consumo normal, el de anoche fue mayor del que pudo soportar”, reconoció el vocero, que advirtió que por momentos la carga de potencia fue de más de 2.000 megavatios.

“Se bordeó el récord, lo que pasa es que no se lo superó por los cortes”, indicó.

En toda la

Provincia

También anoche hubo problemas en otras ciudades de la provincia. Rosario, Rafaela y Reconquista registraron inconvenientes en el servicio aunque menores a los que sufrió la capital.

En el interior, los cortes rotativos y preventivos se aplican desde que comenzó el calor. Mientras que en nuestra ciudad, ayer se debió recurrir a ese extremo por segunda vez desde que comenzó enero.

“No se puede adelantar si se recurrirá o no a los cortes preventivos, con la antelación suficiente para que el usuario tome sus precauciones. En realidad, los cortes preventivos de hacen en función de la demanda que tenemos se deciden cuando son necesarios”, indicó el vocero.

Los cortes rotativos se aplicaron ayer en los barrios Candioti norte, sur y en el macrocentro de la ciudad, para aliviar las cargas de los Centros de Distribución Calchines (ubicado en la vieja usina) y Rosario (en calle Lisandro de la Torre y Cruz Roja).

 

Reclamo

La Asociación Vecinal Altos del Sauce de la vecina localidad de Sauce Viejo invita a los vecinos del sector a participar mañana, a partir de las 10, de un acto de reclamo, debido a “los reiterados -casi diarios- cortes en el suministro eléctrico y el peligroso bajo voltaje resultantes del deficiente servicio que se ofrece de parte de la Empresa Provincial de la Energía”. El encuentro se llevará a cabo a la vera de la Ruta Nacional Nº 11, en su intersección con la calle Austria, en jurisdicción de la referida vecinal.

/// el dato

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/// análisis

La primavera del Plan Estratégico

Luis Rodrigo

Corrían los últimos meses de 2011, cuando el presidente del directorio de la Empresa Provincial de la Energía, Daniel Cantalejo, decía públicamente: “En la EPE estamos preparados para afrontar el verano”.

El funcionario repasaba los cuatro años de su gestión y las inversiones hechas en la empresa para sostener su ilusión. “El servicio eléctrico es mejor que en años anteriores”, aseguraba.

Los cronistas, seguramente en algún corte de cintas, le repitieron en aquellos días una pregunta que es un clásico del periodismo: “¿Cómo vamos a pasar el verano?”. Tiraron la consulta en rueda de prensa, como se hace rutinariamente en primavera con los que toman decisiones en la EPE. La respuesta fue distinta: el funcionario no abrió el paraguas.

Cantalejo en octubre del año pasado desplegaba hechos y verdades: mejoras en las estaciones transformadoras, en las subestaciones y en los centros de distribución. Fondos para cables de alta, media y de baja tensión: había inversiones hasta en las patitas de los enchufes. Modernización de los sistemas de gestión y capacitación de los trabajadores. Plan Estratégico y hasta poda del arbolado para despejar las líneas más vulnerables en la Ruta Provincial Nº1 (con un detalle de inventario de las especies más complicadas).

Todo indicaba que la EPE había hecho las cosas bien. Contaba “con estudios de puntos calientes que nosotros hacemos con máquinas especiales que los pueden detectar. De tal manera que estamos preparados para el verano. La expectativa es que los cortes vayan disminuyendo respecto al verano anterior”, proyectaba Cantalejo hace cinco meses.

“Cuando empezamos a trabajar hace cuatro años, comparando con la situación que tenemos hoy en día es mucha la mejora, en varios frentes. Es un proceso en el cual la demanda de energía y de potencia han crecido notablemente; donde la cantidad de energía que demandaron nuestras industrias y comercios y el desarrollo edilicio que tuvimos en todo el territorio de la provincia fue satisfecho con la cantidad de obras eléctricas que se hicieron. La oferta acompañó a la demanda”, resumía sobre el mercado y sus manos invisibles, el titular de la empresa de la que anoche -sin pensar en Adam Smith- se acordó media ciudad.

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