/// SEMANA SANTA

Liturgia y tradición

Desde el domingo pasado y hasta el próximo se conmemora la semana más solemne de la Iglesia Católica. Se realizan diversas celebraciones que recuerdan la pasión, muerte y resurrección de Jesús.

Liturgia y tradición

Miembros de la Hermandad del Santo Cristo del Perdón acompañan a la imagen de Jesús por las calles de Almería, durante su desfile procesional en la noche de Martes Santo. Foto: EFE

De la redacción de El Litoral

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Descanso, diversión y disfrute. La sucesión de días no laborables en el calendario traducen a la Semana Santa en cuatro días de descanso que combinan tradición y liturgia. Para los fieles católicos, la Semana Santa pone fin al tiempo de Cuaresma y da inicio al tiempo más importante del calendario litúrgico con una semana de recogimiento, abstinencia, reflexión y gozo por la resurrección de Jesucristo.

En detalle, la Semana Santa comenzó con la bendición de los ramos que se realizó el domingo pasado y que cada año conmemora la entrada triunfal de Jesucristo en Jerusalén con una multitud que lo aclamaba como el Hijo de Dios. A diferencia de otros días, que cuentan con ceremonias singulares, el Lunes Santo continúa la celebración normal de la misa que refleja el pasaje, en casa de Lázaro, donde su hermana María ungió los pies a Jesús y se los enjugó con su cabellera. El Martes Santo se recuerda que Jesús anticipó a sus discípulos la traición de Judas y las Negaciones de San Pedro; mientras el Miércoles Santo se reúne el Sanedrín, el tribunal religioso judío, para condenar a Jesús.

La primera parte de la Semana Santa cristiana llega a su fin con la celebración del Miércoles Santo, día que marca el final de la Cuaresma y el comienzo de la Pascua. Este día se celebra la Misa Crismal, presidida por el obispo del lugar y concelebrada por todo el presbiterio, en que se consagra el Crisma y bendición de los óleos.

El Jueves Santo es el último día en que se celebra misa hasta el domingo. La comunidad cristiana conmemora la institución de la Eucaristía realizada por Cristo en la última cena, en vísperas de morir en la Cruz, sacramento que es el centro de la fe y de la vida cristiana.

La liturgia indica para el jueves la celebración de la misa de la Cena del Señor en todos los templos católicos del mundo, con la participación masiva del pueblo cristiano. En ella el sacerdote, repitiendo el gesto de Jesús, lava los pies a doce personas de la comunidad y conmemora el lavatorio de pies que Jesús realizó a sus discípulos en la última cena con el que promulgó el mandamiento de la caridad fraterna. También en este día se celebra la institución del sacerdocio cristiano que Cristo dejó establecido en la última cena.

Triduo Pascual

Durante el Viernes y Sábado Santo no se celebra la misa, únicos días de ausencia de eucaristía marcados en el calendario litúrgico.

El Viernes Santo se conmemora el drama inmenso de la muerte de Jesús en el Calvario. Es una de las principales celebraciones y manda a sus fieles a guardar ayuno o abstinencia de carne a fin de hacer propios el sufrimiento de Cristo, y de los pobres, los enfermos y aquellos con almas atribuladas. La liturgia indica que el Viernes Santo no se celebre la Eucaristía en todo el mundo. El altar luce sin mantel, sin cruz, sin velas ni adornos. Los actos de liturgia son vespertinas y comienzan con la liturgia de la palabra en la que se leen dos lecturas y la Pasión según san Juan, a la que sigue la homilía y la oración universal. Esta liturgia concluye con la adoración de la Cruz y la comunión con la Eucaristía consagrada en la Misa de la Cena del Señor. Se indica recogimiento absoluto y, como oficio, el rezo del Vía Crucis que sigue el recorrido de Jesús hacia la cruz por medio de catorce estaciones.

El Sábado Santo, conocido también como Sábado de Gloria, es el tercer día del Triduo Pascual, que concluye con las segundas Vísperas del Domingo de Resurrección. Más que un oficio o celebración, lo sobresaliente de este día es el recogimiento y la espera de la resurrección de Jesús. Para ello en los templos se exponen imágenes de la Virgen de la Soledad o la Virgen Dolorosa además de Jesús en el sepulcro. En ocasiones sólo se muestra postrado y tapado con una sábana y las iglesias no se iluminan. Los fieles acuden para la adoración de Cristo y la Virgen al igual que mostrar sus condolencias.

El Triduo Pascual culmina el domingo, con el día más importante de la fe católica. Conmemora la Resurrección de Jesús, quien venció a la muerte y perdonó los pecados, abriendo así las puertas del paraíso a todos los fieles. La celebración comienza en la madrugada del sábado hacia el domingo con la llamada Misa del Gallo, en donde se hace alusión a la luz como la resurrección de Cristo. Los fieles llevan consigo agua para bendecir sus hogares y velas blancas que serán prendidas con el Cirio Pascual que iluminará el templo hasta el día de la Ascensión de Jesús al cielo. Las velas portadas por los feligreses son guardadas para utilizarlas cuando se requiera orar por una situación difícil.

Los cincuenta días que van desde este domingo de Resurrección hasta el de Pentecostés han de ser celebrados con alegría y exultación como si se tratase de un solo y único día festivo.

En nuestra ciudad

Durante la Semana Santa se realizan diversas celebraciones recordando la pasión, muerte y resurrección de Jesús. En nuestra ciudad, el Arzobispo de Santa Fe Mons. José María Arancedo presidirá la Liturgia de Semana Santa en la Catedral Metropolitana (Gral. López esquina San Jéronimo). Allí hoy a las 19 celebrará la misa vespertina de la Cena del Señor con el tradicional lavatorio de los pies, traslado y reserva del Santísimo Sacramento y adoración eucarística hasta la medianoche.

En la misa y durante todo el día, se realiza la Colecta en especie para Cáritas, con ofrendas en alimentos y ropa en buen estado para Cáritas Parroquial.

La liturgia indica que durante el Viernes y Sábado Santo no se celebre misa. En este sentido mañana, a las 8 Arancedo presidirá el Oficio Divino (lecturas y laudes). La liturgia de la Pasión del Señor y liturgia de la Palabra serán a las 17, seguida de una gran oración universal y adoración de la Santa cruz con la Vera Cruz de Santa Fe y comunión eucarística. Por la noche, el Arzobispado invita a un Vía Crucis por el casco histórico santafesino: será a las 20 y pasará por el Santuario de Nuestra Señora de los Milagros (San Martín y General López), por el Convento de San Francisco (Amenábar 2557) y el de Santo Domingo (9 de Julio 1491).

El Sábado Santo, Día de Oración, Arancedo presidirá el Oficio Divino a las 8. La Solemne vigilia pascual comenzará a las 21 con iniciación cristiana de adultos. Se hará el rito del lucernario (se recomienda llevar velas, cirios) y vigilia de lecturas.

El Domingo de Pascua, la Resurrección del Señor se celebrará con misas en todas las Parroquias, en diferentes horarios. el Arzobispo presidirá la misa de las 20 en la Catedral.

Fechas

La Semana Santa cambia de fecha cada año porque el Viernes Santo es el viernes inmediatamente posterior a la primera Luna llena tras el equinoccio de primavera. Se debe calcular empleando el calendario lunar, por ello el Viernes Santo puede ser tan temprano como el 21 de marzo o tan tarde como el 23 de abril.

En Latinoamérica

Durante la Semana Santa se realizan muestras de religiosidad popular de todo el mundo. En América Latina sobresalen las procesiones y las celebraciones y donde abundan los alimentos tradicionales de cada región. Este año, por ejemplo, México organizó una ruta hacia lugares como Chiapas y Michoacán, donde estuvo el cura Miguel Hidalgo, quien además de sacerdote, fue militar con un papel muy importante en la primera etapa de la Guerra de la Independencia. Durante el jolgorio, los mexicanos toman ‘romeritos’, hecho de una planta regional y cocido con una salsa a base de chile y otras especias.

En Perú gigantescas alfombras de flores son elaboradas para dar paso a la procesión del Viernes Santo y del Domingo de Resurrección. Además es tradición comer el ceviche, un plato frío a base de pescado crudo sazonado.

Durante estos días feriados, los venezolanos muestran su alto fervor religioso.