DESDE ROSARIO

El Padre Ignacio estará en Paraná

El Padre Ignacio estará en Paraná

El sacerdote convoca multitudes de fieles que se acercan a él en busca de alivio físico y espiritual.

Foto: ARCHIVO EL LITORAL

De la Redacción de El Litoral

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Al igual que ocurrió el miércoles pasado en San Miguel, provincia de Buenos Aires, el martes próximo el padre Ignacio Periés oficiará una misa frente a lo que, según se espera, será una verdadera multitud. Los organizadores confirmaron que se harán sanaciones al finalizar la ceremonia.

“Las puertas de la catedral se abrirán al mediodía. Esperamos gente de toda la provincia de Entre Ríos y también de Santa Fe. Al finalizar la misa, el padre atenderá a los enfermos; todavía no sabemos si dentro o fuera de la iglesia”, informó el padre Silvio Fariña, de la catedral entrerriana.

El edificio está ubicado en Monte Caseros 77, frente a la plaza 1º de Mayo; y se prevé un importante operativo de tránsito en las calles aledañas, así como la disposición de baños químicos en la plaza. Se trata de la primera vez que el sacerdote, reconocido internacionalmente por sus poderes de sanación, preside una ceremonia de este tipo en la vecina ciudad. Llegará acompañado del equipo que organiza la logística de sus ceremonias, que habitualmente reúne a miles de fieles que esperan durante más de diez horas para recibir su bendición, o que lo acompañan en Vía Crucis a razón de 150 mil personas por año.

“El padre Ignacio está vinculado de una manera especial a la diócesis porque la asociación de sacerdotes que él preside, la Cruzada del Espíritu Santo, está bajo la protección del obispo de Paraná, Juan Alberto Puiggari”, explicó el padre Fariña. Además, el ex arzobispo de Paraná Mario Maulión, que actualmente vive con el padre Ignacio en Rosario, fue en su momento obispo benévolo de su orden.

Vivencia de fe

El miércoles pasado, el padre Ignacio salió por primera vez en 32 años a dar una misa fuera de Rosario, donde vive. Fue en San Miguel, provincia de Buenos Aires, donde se acercaron unas 20 mil personas, según estimaron los organizadores.

El padre Ignacio Periés nació en Sri Lanka, ex Ceylan, un país minúsculo del sur de Asia, de 20 millones de habitantes. Fue el 11 de octubre de 1950 y lo bautizaron como Ignacio Peries Kurukulasuriya.

Con ocho hermanos e hijo de un país mayoritariamente budista, Ignacio se ordenó sacerdote católico muy lejos de casa, el 29 de julio de 1979. Lo ordenó un obispo irlandés, Thomas Walsh, en Gales, aunque se formó como cura católico en Londres.

Allí fue adoptado por un matrimonio polaco, que lo acompañó durante sus años de formación sacerdotal. Pero no duró mucho en el Reino Unido: con hambre de salir a misionar por el mundo, fue enviado a Tancacha, Córdoba, por la orden a la que se había unido, la Cruzada del Espíritu Santo, de la que ahora es superior en todo el mundo. Pero en ese pueblo cordobés no echó raíces: en diciembre de 1979, el mismo año que llegó a la Argentina, fue enviado a Rosario, de donde no se iría.

Se instaló en el barrio Rucci, en la parroquia Natividad del Señor. De algún modo, el aura de sanador fue creciendo con el tiempo. Por su templo pasa cada año un millón de personas de distintos puntos del país, en busca de sanación.

“Esto no puede explicarse. Es que no tiene sustento científico, ni humano. Uno sólo se siente instrumento de Dios. Él es el que obra. Es un don, una gracia o como se quiera decir. Lo único que sé es que doy la paz y la tranquilidad de Dios a la gente. Además, al intentar explicarlo, se puede caer en una exageración o en perder el concepto. Sólo hay que comprender que es una vivencia de fe”, afirma el sacerdote.

El famoso cura sanador dará una misa en la Catedral, el martes 24 a las 16. Se espera una movilización multitudinaria.