Advertencia de la UTA
Habrá más paros de colectivos si no “garantizan la seguridad”
Sin control. Algunos grupos identificados con Colón y Unión producen desmanes dentro de los colectivos durante el viaje hacia la cancha, además de correr muchos riesgos al viajar casi “afuera” de la unidad. Fotos: Archivo El Litoral
Esta tarde se reúnen los representantes gremiales con la Policía de Santa Fe para evaluar posibles medidas durante el traslado de los hinchas de Colón y Unión. Juan Pavón, un chofer que vio “asaltos y desmanes de todo tipo”, le reconoció a El Litoral que la situación ya es “inmanejable”.
De la Redacción de El Litoral
La Unión Tranviarios Automotor (UTA) Seccional Santa Fe amenaza con retomar la medida de fuerza que implementó el sábado pasado de 12 a 19, la cual afectó a casi todo el servicio de transporte urbano e interurbano de pasajeros, si esta semana no queda “garantizada la seguridad de los choferes”. Puntualmente, el paro obedece a los episodios de violencia que padecen conductores y usuarios durante el traslado de algunos grupos de hinchas a las canchas de Colón y Unión.
Para comenzar el diseño de una propuesta que satisfaga a los representantes y afiliados a esa organización gremial, esta tarde estaba previsto un encuentro formal desde las 16 entre la UTA Santa Fe, la Policía de la provincia (se esperaba la presencia del jefe policial, Hugo Tognoli), autoridades municipales y los empresarios del sector.
“Nosotros ya anunciamos que vamos a volver a parar el servicio si no tenemos garantizada la seguridad de los trabajadores. La propuesta que nos hagan la Policía y las autoridades, la vamos a trasladar al plenario. Pero si no obtenemos una respuesta favorable, vamos a parar cuando juegue Unión acá”, anticipó hoy Miguel Arce, secretario de prensa de UTA Santa Fe, en diálogo con El Litoral.
El representante gremial comentó que hay “choferes que fueron agredidos con armas blanca y de fuego, también hubo baleados y asaltos adentro del micro. Lo mismo le sucede a los usuarios que viajan justo durante el traslado de los hinchas. Por eso, los conductores tienen miedo, ya que si le pasa algo a alguien que va en el micro el culpable es el chofer. Y detrás de cada trabajador hay una familia; es todo muy arriesgado, al margen de que en algunos casos se disponen unidades para los partidos, porque igualmente el que lo maneja es un trabajador”.
Arce detalló qué tipo de padecimientos tienen los choferes y los pasajeros los días que hay partidos: “Estas personas entran sin pagar, viajan con medio cuerpo afuera, sobre el techo; hacen desmanes entre los mismos hinchas de un club, con pedradas, destrozos de unidades, tiroteos y hasta tiran bengalas. No es un capricho nuestro hacer un paro justo cuando juega un equipo de la ciudad, sino que la situación no daba para más”.
En carne propia
Juan Pavón es chofer de la empresa Continental TPA. Esta mañana, se animó a contarle su historia a El Litoral. Aclaró que todos los conductores sufren lo mismo día tras día, pero que la situación se torna imposible de manejar cuando juegan Colón o Unión.
“Me tocó un montón de veces tener que lidiar con esta gente. Hacen de todo: tiran asientos por la ventanilla, asaltan a los pasajeros, entran fumando, tomando alcohol y, lógicamente, sin pagar el boleto. El reclamo ahora es por la cancha, pero a la salida de los boliches muchas veces pasa lo mismo”, relató Pavón.
El conductor aseguró que vio “cosas muy feas en los coches, como asaltos a los pasajeros y todo tipo de desmanes”. “El usuario entiende que no somos nosotros los responsables, incluso pide lo mismo que nosotros: seguridad para trasladarse”, dijo.
Por último, Pavón adelantó que “en la medida que no se garantice la seguridad, habrá paro cada vez que jueguen Colón o Unión”. Las empresas que el sábado paralizaron el servicio son Ersa (líneas 1, 3, 9, 9 C y 15), Autobuses Santa Fe (4, 8 y 14), Continental TPA (Santo Tomé y ramal línea 2) y Recreo (5, 10, 11, 13, 16 y 18).
Seis años atrás, la misma situación
El sábado no fue la primera vez que la Unión Tranviarios Automotor (UTA) decidió interrumpir el servicio del transporte público de pasajeros en la ciudad en demanda de más seguridad para los choferes, especialmente cuando deben trasladar a hinchas de Unión y Colón a las canchas de la ciudad. En 2006 hubo una medida similar que, al igual que ahora, derivó en una reunión entre dirigentes de la UTA, autoridades policiales y municipales.
Por entonces, frente a la problemática planteada, los tres sectores involucrados llegaron a un acuerdo: disponer colectivos urbanos para el traslado exclusivo de los hinchas en los partidos de Colón y Unión. Pero la medida duró pocas semanas; lo mismo que el tema estuvo en las agendas periodísticas.
Concretamente, el plan para brindarle mayor seguridad a hinchas, choferes y pasajeros en general consistió en individualizar las unidades. Se distinguieron los coches “exclusivos para simpatizantes” de los habituales, es decir de aquellos a ser utilizados por personas ajenas al fútbol. Además, se dispusieron distintos puntos de la ciudad como lugares de concentración de fanáticos, desde donde trasladaban a los hinchas a los estadios. La policía, por su parte, se encargó de reforzar los patrullajes acompañando los recorridos habituales de los colectivos desde una o dos horas antes del inicio de los partidos.
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