Defensora de la esperanza

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Stella Maris Maruso

La terapeuta biopsicosocial y tanatóloga, directora de la Fundación Salud, ofrecerá una charla en nuestra ciudad y Rafaela para enseñar que el cuerpo genera “drogas endógenas” con las que podemos repararlo y regularlo, sanar nuestras vidas. En base a esta premisa desarrolló un programa que permite -a algunas personas- la remisión de su enfermedad (hecho que está estudiando el Conicet) y a otras simplemente aprender a vivir mejor.

TEXTOS. REVISTA NOSOTROS. FOTO. GENTILEZA FUNDACIÓN SALUD.

EL PACIENTE CREA SALUD. “Vamos a Santa Fe a contarles el objetivo de nuestro trabajo, que es acompañar a quien está atravesando una crisis severa en su vida, entre las cuales puede estar una enfermedad, logrando que el paciente se torne resiliente, o sea, que tenga una capacidad de resistencia mayor y pueda resignificar lo que le está pasando para su propio beneficio. Pretendemos que el paciente pueda crear salud a pesar de lo que le está pasando. Cuando esto ocurre, las personas tienen mejorías sorprendentes: participan activamente en su proceso de recuperación. La idea de la charla es mostrar de qué manera esa persona puede participar, que no es solamente con la voluntad de estar mejor sino viviendo de una manera diferente. Siempre vamos a necesitar herramientas para enfrentar la adversidad, la propia o la de un ser querido. Podemos hacer mucho más de lo que imaginamos”.

CIENCIA CON NOMBRE RARO. “La Psiconeuroendocrinoinmunología es una ciencia que estudia la relación que existe entre cuatro sistemas: psíquico, neurológico, endócrino e inmunológico. Lo que ya está hartamente demostrado es la incidencia que tiene el psiquismo en el sistema inmunológico. La gente necesita comprender que hay mecanismos bioquímicos que regulan el proceso fisiológico, que se asocian al avance de una enfermedad, y que están originados en estados emocionales y actitudes psicológicas. Si sabemos que hay emociones que ponen en movimiento sustancias químicas que desencadenan en el cuerpo determinadas reacciones, lo que tenemos que aprender es que aquellas reacciones sean saludables y no contrarias al equilibrio de la salud. La idea es optimizar la capacidad de respuesta inmunológica a través de cambios, psicológicos o neuroquímicos, para poder crear nuestra propia medicina. Todos tenemos recursos propios para movilizar el curso de nuestra propia biología y existen técnicas para ponerlos en movimiento y mejorar la calidad de vida de las personas. Si podemos reprogramar nuestro cerebro lograremos cambiar el comportamiento y utilizar todas estas capacidades. El paciente informado, entrenado, pone en funcionamiento esta farmacia endógena sobre la que la fundación viene pregonando desde hace más de 20 años”.

NO SUSTITUYE TRATAMIENTOS. “Esto que podemos compartir es para que las personas puedan vivir con mayor integridad para que se sanen. No hablamos de la curación de una enfermedad, ya que ésta puede ser una consecuencia del proceso de sanación. Trabajamos con la experiencia de la enfermedad y no con la enfermedad en sí misma. Además, todo lo que hacemos no es para reemplazar a la Medicina. No queremos confundir a las personas. Soy una defensora de la esperanza. Hay dos muertes que hay que evitar: la biológica y la de la esperanza, porque una persona con esperanza puede hacer mucho. La esperanza está sustentada en esa participación del paciente y no dejar todo librado al azar, como algo que va a pasar, y nunca para sustituir a los tratamientos. Lo mejor que pueda dar la medicina y el paciente van a marcar una diferencia en el tratamiento y en la calidad de vida de éste. Si el paciente participa con su vida suma (cuando puede resignificar su historia y tornarse resiliente) o resta (cuando siente que la enfermedad vino a arruinarle la vida). Un médico informado no puede descalificar esto; incluso debería incorporarlo, como ocurre en muchos lugares, como medicina integrativa. Cada vez estamos logrando un pasito más adelante de este proceso integrador”.

EL PACIENTE EXCEPCIONAL. “Es aquel que recurre a su laboratorio interior y pone en funcionamiento ese potencial frente a lo que piensa, lo que siente, sus vínculos, lo que imagina, el aspecto nutricional, energético e inconsciente. Genera una estrategia que atienda a todos los estímulos que él produce pero de una manera saludable. Hoy sabemos que un pensamiento negativo impacta en el sistema inmunológico; está muy claro lo que es la biología de la emoción, del pensamiento. Sabemos lo importante que es que la familia forme parte de la medicina y no de la enfermedad, y que no necesariamente el amor alcanza para lograr esto. El paciente excepcional es también aquel que puede expresar todo lo que siente sin miedo a ser juzgado, criticado, contrariado; aquel que tiene un propósito en la vida y que está conectado con ella. Es aquel que no hace nada para morirse y todo para vivir. Piensa que si se tiene que ir de este mundo acepta lo peor y entiende que empieza lo mejor de su vida en ese momento. Es muy interesante esa metamorfosis que produce cuando se afirma a la vida, independientemente del pronóstico adverso que pueda llegar a tener. Es aquel que acepta el diagnóstico pero no el pronóstico; el que vive. Está demostrado que aquel que vive y adhiere con pasión a la vida, al momento, que puede aprovechar el aquí y el ahora, que sana sus vínculos, no entra en una estadística. Podemos hablar de ellos porque es lo que vemos todos los días en la fundación. El fracaso para nosotros es si la persona no vivió hasta morir, no si se murió”.

+datos

Fundación Salud

www.fundacionsalud.org.ar; teléfono (011) 4272-8000; e-mail: [email protected].

Asociación Argentina e Internacional de Tanalogía (Asait)

Rosa Pietrani (Santa Fe), teléfonos 455-5236 y 155-017333; e-mail: [email protected].

Lalcec Filial Rafaela

Mirta Castelli, teléfono (03492) 432-083; e-mail: [email protected]

DOS CONFERENCIAS

Stella Maris Maruso -directora de la Fundación Salud y autora de los libros “El laboratorio del alma” y “El laboratorio interior”, de Ediciones B- ofrecerá dos conferencias: el sábado 4 de agosto, a las 15, en La Moreno Centro Cultural, Marcial Candioti 3341, de nuestra ciudad, organizada por la Asociación Argentina e Internacional de Tanatología (Asait); y el domingo 5, a las 17, en el Centro Cultural Municipal (Asociación Italiana) de Rafaela, organizada por Lalcec filial Rafaela. El tema: “El laboratorio interior: cómo utilizar la mente para sanar el cuerpo, y el cuerpo para sanar la mente”. La entrada es libre y gratuita.

LAS JORNADAS

El 24 y 25 de agosto se realizarán en La Moreno Centro Cultural, de nuestra ciudad, las Sextas Jornadas de la Asait. Se trata de un seminario intensivo teórico-vivencial, que brinda herramientas de autogestión, que estará a cargo de las Lic. María Elena Sardone y Mariel Iwachow, integrantes del equipo interdisciplinario de profesionales de la Fundación Salud , discípulos de Stella Maris Maruso, especializados en medicina cuerpo-mente desde el abordaje de la PNEI , con orientación bio-psico-social. Está dirigido a personas que están atravesando una crisis severa en sus vidas; quienes buscan tener una vida más plena y significativa; y profesionales del área de la salud interesados en incorporar nuevas herramientas. Se cobra arancel.

INVESTIGACIÓN DEL CONICET

“Conicet está interesado en el PARA ((Programa Avanzado de Recuperación y Apoyo) que lleva adelante la fundación. Empezó una investigación en enero de este año y calculamos que a fin del año próximo estará terminado. Van a estudiar el comportamiento del genoma con relación al tema de la inmunidad, verán qué pasa con aquellos pacientes que ponen en funcionamiento el plan de salud que surge del trabajo que hacemos en el PARA. Analizará qué cambios se producen en los genes para revertir los procesos destructivos del cáncer mediante estas terapias cuerpo-mente, que están basadas en la Psiconeuroendocrinoinmunología, que deberían ser utilizadas como complemento de la medicina convencional. Estamos más que felices, esperando que la ciencia pueda decir cómo ocurre este proceso, que sabemos que se logra al ver el cambio en el paciente”.