Soria-Freydoz: entre celos enfermizos e infidelidades presuntas

Declaran los amigos del matrimonio

Télam

Tres amigas de Susana Freydoz y un amigo del asesinado gobernador de Río Negro, Carlos Soria, declararán hoy en el juicio que se le sigue a la mujer por el crimen ante la Cámara Primera en lo Criminal de General Roca.

Fuentes judiciales informaron que los testigos convocados para esta jornada son Elena Cristina Pereyra, Stella Maris Bonet y Elsa Romagnoli, amigas cercanas de Freydoz, quienes en la etapa de instrucción describieron los celos y las sospechas de la imputada por presuntas infidelidades de su marido.

Las testigos aseguraron en su momento que la preocupación de Freydoz era “obsesiva” y contaron cómo la ahora viuda de Soria llegó a seguir a su marido por esas sospechas y cómo investigaba su celular para conocer mensajes electrónicos y establecer llamados realizados y recibidos.

Además, fue citado a declarar Edgardo Peacock, amigo de Soria, quien en la instrucción de la causa describió igualmente la obsesión de Freydoz por presuntas infidelidades de su esposo, que el testigo negó conocer.

Finalmente, los jueces tienen previsto escuchar a Lidia Fuentes, también allegada a la familia.

El tribunal que lleva adelante el debate está compuesto por Carlos Gauna Kroeger (presidente) y los jueces subrogantes María García Balduini y Fernando Sánchez Freytes, mientras que la acusación está a cargo de la fiscal Laura Pérez y la defensa particular de Freydoz del abogado Alberto Riccheri.

La semana pasada declararon ante los jueces los hijos de la acusada y del asesinado gobernador y las nueras, quienes aportaron detalles de la relación de pareja que tenían.

Varios de los familiares, entre ellos la esposa de Carlos Soria hijo, Victoria Argañaraz, aseguraron que la noche previa al crimen, el 31 de diciembre último, la cena de fin de año fue “muy tensa”, ya que Freydoz “había tomado de más y estaba alcoholizada”.

El hecho ocurrió el 1º de enero alrededor de las 4 de la madrugada, después de la cena de fin de año en la chacra y residencia que posee la familia Soria en las afueras de General Roca, a donde habían concurrido 14 parientes, entre ellos tres de los cuatro hijos del gobernador con sus parejas e hijos.

Los pesquisas creen que Freydoz le disparó en la cabeza a Soria con un revólver calibre 38 “en el marco de una discusión por celos” que había surgido luego de la celebración familiar.