Alto Verde
Apresado por un homicidio confesó asalto a periodistas
El detenido es un sujeto, de 20 años, comprometido en el crimen de Domingo Beheler. Antes, participó del asalto a los trabajadores de prensa Emilia González y Juan Meyer.
En los allanamientos, se encontró al matador de Beheler, quien además terminó confesando su participación en el robo a los trabajadores de prensa.
Foto:Archivo/El Litoral
Danilo Chiapello
El 28 de octubre, en inmediaciones de la Manzana 7 del Distrito de Alto Verde, fue acribillado a balazos un hombre de 38 años.
Eran aproximadamente la 1 cuando Domingo Beheler fue atacado. Su cuerpo, muy malherido, llegó con vida al Hospital Cullen, pero desde ese centro de salud informaron poco después que había fallecido.
En las primeras horas del viernes, la sección Homicidios de la URI realizó una serie de procedimientos en esa zona, detuvo a siete sujetos y secuestró gran cantidad de armas de fuego.
El dato más relevante es que uno de esos detenidos (un sujeto de 20 años), registraba pedido de captura por encontrarse vinculado al crimen de Beheler.
La situación de este individuo es más que comprometida ya que no son pocos los indicios que lo señalan como el autor material del homicidio.
Pero las sorpresas no terminaron allí. Ya en sede policial, y en plena indagatoria, el imputado terminó confesando su participación en otro resonante hecho que sacudió a la opinión pública.
Se trata del asalto a mano armada que sufrieron los trabajadores de prensa Emilia González y Juan Meyer, hecho ocurrido el 29 de septiembre.
El malviviente reveló a los pesquisas que aquel día concretó el robo contra los periodistas, aunque aclaró que no estuvo solo durante la acción. El robo lo perpetró junto a otro compinche, el que hasta el momento se mantiene en condición de prófugo.
Aquella tarde, Emilia González y Juan Meyer se encontraban en la manzana Nº 7 cumpliendo tareas periodísticas con motivo de la construcción de una vivienda la que forma parte del programa Uno por Uno; Uno más Uno, iniciativa que lleva adelante el sacerdote Javier Albizu. En momentos en que Meyer se disponía a grabar imágenes con su cámara aparecieron en escena dos sujetos. Los recién llegados estaba armados y en cuestión de segundos arremetieron contra el camarógrafo y la periodista, los que fueron reducidos en cuestión de segundos.
Bajo amenazas de muerte ambos fueron despojados del dinero que llevaban encima (entre 400 a 500 pesos) además de sus teléfonos celulares.
Concretado el golpe, sus autores se dieron a la fuga a la carrera.
