Buenas perspectivas

Los industriales creen que este año crecerán la demanda y las inversiones

El vicepresidente de la UIA destacó las expectativas de “muy buen crecimiento” para 2013.

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La industria automotriz volverá a convertirse en el motor del sector. Foto: Archivo El Litoral

 

De la Redacción de el Litoral

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Dirigentes del sector industrial manifestaron su optimismo de cara al nuevo año y estimaron que la actividad tendrá un resultado mejor al registrado en 2012.

Los empresarios fabriles destacaron, no obstante, que el año pasado no puede ser visto como malo, teniendo en cuenta que en medio de un panorama sombrío como el que se cernió sobre la economía mundial, la Argentina logró sortear la posibilidad de caer en recesión y mantuvo las fuentes de empleo.

El vicepresidente de la Unión Industrial Argentina (UIA) Juan Carlos Sacco subrayó que “la actividad en 2012 para la industria terminó pareja, normal”, y añadió que “la perspectiva es de muy buen crecimiento para 2013”.

“El balance del año es totalmente positivo, porque venimos de crecer permanentemente durante muchos años. Y tener un año de estabilidad está bien. Comparándonos con los países desarrollados, estamos en un mundo aparte”, remarcó Sacco.

Por su parte, el presidente de la Asociación de Industriales Metalúrgicos (Adimra), Juan Carlos Lascurain, sostuvo que “con una mejora de la actividad económica y un repunte de la demanda de Brasil, se espera que el sector consolide su trayectoria”.

Del año pasado, destacó que “la inversión de las empresas se mantuvo estable en un 4 por ciento de las ventas, demostrando las perspectivas de una rápida recuperación de la actividad”, y añadió que “otra señal fue la decisión de mantener al personal”.

En la misma línea, el director ejecutivo de ProTejer, Marco Meloni, consideró que “de sostenerse la administración del comercio exterior, permitirá una sustitución no traumática con crecimiento sostenido en todos los eslabones de la cadena”.

También señaló que “el balance 2012 fue positivo”, y precisó que “el crecimiento interanual estuvo entre 6 y 8 por ciento, por la eficiente administración del comercio exterior”.

Asimismo, el presidente de Mondelez International Cono Sur (ex Kraft Foods), Juan Garibaldi, aseguró que tiene “grandes expectativas”, y se mostró “optimista y confiado en que los niveles de consumo interno se mantendrán razonablemente bien”.

Destacó que “2012 fue positivo, con muchos logros: el principal fue volver a producir Milka en Argentina después de 12 años”.

Para el presidente de la Cámara Argentina de la Industria del Juguete (Caij), Miguel Faraoni, “hay optimismo y por eso seguiremos invirtiendo en ampliaciones de capacidad instalada”.

Indicó que “el año que terminó fue muy positivo”, porque puntualizó que “la regulación de las importaciones permitió un crecimiento promedio en el sector de 20 por ciento”.

En tanto, el presidente de Nestlé Argentina, Félix Allemann, afirmó que continuará “invirtiendo más en el país, con el objetivo de potenciar la producción local”.

Sobre 2012, subrayó que “fue positivo”, porque precisó que “se contó con un mayor crecimiento con respecto al año anterior gracias a la innovación y la renovación de productos”.

Nuevas apuestas

Del mismo modo, el presidente de la Cámara de Industrias Electrónicas (Cadieel), Jorge Cavanna, sostuvo que “la historia de las pymes industriales en la Argentina nos hace ser optimistas por naturaleza, sino no se explica que hayamos podido atravesar tantas crisis y seguir apostando a esta actividad”.

“Pero más allá de nuestro optimismo natural consideramos que 2013 se presentará con mejores perspectivas y mayores niveles de crecimiento”, estimó Cavanna.

Por su lado, el presidente de Rasti, Antonio Dimare, destacó que seguirá “invirtiendo e incorporando personal para incrementar capacidad ya que la venta de juguetes didácticos seguirá en alza”.

“Las inversiones en maquinarias y en la construcción de la nueva planta inaugurada este año nos permitieron incrementar la producción, y lanzamientos de juguetes”, señaló Dimare.

El presidente de la Cámara de la Industria del Calzado (CIC), Alberto Sellaro, señaló que espera “continuar la misma tendencia de 2012 y mantener los niveles de producción alcanzados”.

Aseguró que “el 2012 cerró con una producción nacional de 120 millones de pares, marcando un nuevo récord y con un crecimiento esperado de 5 por ciento respecto a 2011, muy por encima de los 36 millones que se producían una década atrás”.

En tanto, el presidente del Grupo Biosidus, Santiago García Belmonte, afirmó que “las proyecciones son muy positivas”, y pronosticó que la empresa crecerá “a un índice mayor que el logrado a raíz de la consolidación de los actuales mercados”.

De 2012 precisó que “resultó fuertemente positivo para la empresa porque fue de crecimiento y concreciones”, y añadió que “se amplió la dotación de profesionales en distintas áreas en especial en aquellas vinculadas al desarrollo comercial”.

También el presidente de la Cámara de Industriales Fundidores (Cifra), Daniel Ferreyra, vaticinó “un panorama alentador, ya que estamos realizando junto al Estado nacional diversos trabajos de investigación y análisis sobre costos de las fundiciones del Mercosur, para poder mejorar la competitividad en la Argentina”.

“Gracias a la prohibición de exportación de chatarra, logramos revertir ventas a precio vil de un material que contiene tanto valor agregado y de alta necesidad para la industria”, remarcó.

Anses y Banco Central cubrieron el desequilibrio fiscal

La consultora Idesa sostuvo que el “desequilibrio de las cuentas públicas” fue cubierto en 2012 con fondos de la Anses (Administración Nacional de Seguridad Social) y del Banco Central, y advirtió que parte de esos recursos “se dilapidan en clientelismo con planes sociales y empleo público”.

Estos conceptos forman parte del último informe de Idesa, que recordó que la Nación recibió 50.000 millones de pesos provenientes de las arcas de la Anses y del Banco Central, que son requeridos vía “decretos de necesidad y urgencia” por parte de la Casa Rosada.

Según los técnicos de la consultora, el incremento registrado en los impuestos y el alza que experimenta la recaudación, que “apenas crece al ritmo de la inflación”, “no alcanzó para financiar el aumento del gasto público” durante el 2012.

“Esto refleja un serio desequilibrio de las cuentas públicas, pero también un grave deterioro institucional ya que parte importante de estos recursos se dilapidan en clientelismo con planes sociales y empleo público, subsidios a empresas públicas y privadas, propaganda oficial y discrecionalidad en las transferencias para someter a gobernadores e intendentes”, explicó Idesa.

La consultora aseguró que la recaudación impositiva en el orden nacional fue de 680.000 millones de pesos en el 2012, cifra que presentó un incremento del 25 por ciento respecto al año anterior.

Según Idesa, se alcanzó “un nivel récord de presión impositiva” y consideró además que por este motivo “se presentan crecientes dificultades para seguir incrementando la recaudación de impuestos”.

Agregó que durante 2012 las fuentes de financiamiento del incremento que registró el Presupuesto nacional fueron unos 7.000 millones de pesos provenientes del aumento en la recaudación.

A esto se le suman otros 22 millones de pesos que correspondieron a fondos de la Anses y también 28 mil millones fueron tomados del Banco Central.

“Los datos muestran que, aún con una presión impositiva inédita y un nivel de centralización récord, el Estado Nacional apela a modificar la Ley de Presupuesto a través de decretos de necesidad y urgencia para tomar recursos adicionales desde la Anses y el Banco Central por un monto de 50 mil millones de pesos”, indicó el informe.