Por orden del jefe de la URI

Intervienen la Comisaría 5ta. por un caso de corrupción

Permanecen detenidos el jefe, un sargento y un cabo primero de dicha seccional. Están acusados de cobrar una coima por $ 2.500. También arrestaron al denunciante que se quedó con algunos billetes marcados.

Intervienen la Comisaría 5ta. por un caso de corrupción

El procedimiento realizado ayer por Asuntos Internos derivó en el arresto de 9 policías de los cuales 6 recuperaron rápidamente su libertad. Foto: Archivo El Litoral

 

De la Redacción de El Litoral

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El jefe de Policía de la Unidad Regional Uno, Rafael Grau, dispuso la intervención de la Comisaría 5ta. del barrio Sargento Cabral y ordenó el pase a disponibilidad de tres efectivos de la fuerza acusados por un hecho de corrupción.

La medida tomada ayer fue en respuesta a un procedimiento realizado por la Dirección General de Asuntos internos, en la que 9 policías quedaron arrestados, implicados en un pedido de coima a un preso.

Del total de esos efectivos, finalmente quedaron implicados el jefe de la seccional, el comisario Juan Carlos Gutiérrez; el sargento Gustavo Adrián Schneider; y el cabo primero Cristian Pereyra.

Los tres serán indagados el próximo lunes por el juez de Instrucción Primera, Jorge Pegassano, por el presunto delito de “concusión”, al entender que estos habrían exigido dinero a cambio de mejorar la situación de un preso; “agravado” porque además intimidaron al denunciante.

Asuntos Internos

El secretario de Control de Seguridad, Miguel Picca, confirmó hoy que la actuación de Asuntos Internos comenzó el pasado 12 de marzo, con la denuncia de un hombre de 35 años, vecino del barrio Sargento Cabral, que tras haber estado un día detenido acusado de robo fue instado a pagar una coima para que lo despegaran del caso.

Según contó el propio denunciante, le imputaron la sustracción de un aire acondicionado y por eso pasó una noche tras las rejas el 5 de marzo. En la celda, otro preso le sugirió que “tenía que arreglar con el jefe” y por eso al día siguiente pidió hablar con el titular de la comisaría.

Al parecer, en ese primer encuentro habrían “arreglado” una suma de $ 2.500; pero además, otros dos efectivos que lo trasladaron a la Comisaría 1ra. para que lo revisara el médico policial, también le habrían solicitado unos $ 3.000.

En “garantía”

Como no tenía la plata que le reclamaban dijo que tenía una moto y que esperaba cobrar un cheque por un accidente en los próximos días.

Luego del día de arresto lo dejaron ir, pero se guardaron su documento a modo de “garantía” de que volvería con la plata. Para su sorpresa, al llegar a casa se enteró por una vecina que dos policías se habían llevado la moto aduciendo que era robada.

A la semana siguiente, como la plata no aparecía, los mismos efectivos que se llevaron el vehículo lo amenazaron con reducirla y venderla por partes.

Así fue que a punto de perderlo todo se decidió a denunciar. Lo primero que hizo fue grabar una conversación con el jefe de la seccional, en la que se escucha claramente cuando arreglan la manera y día de pago.

El operativo

El operativo principal estaba previsto para este lunes, pero se postergó para el miércoles porque “las condiciones no estaban dadas” en la comisaría.

Ayer, a partir de las 9 de la mañana y hasta la media tarde, Asuntos Internos logró atrapar a los policías denunciados, a dos de los cuales se les secuestró parte del dinero marcado.

La labor comenzó a las 9 de la mañana y se realizó ante la presencia del Fiscal Nº 7, Jorge Andrés. Hubo una larga espera, porque los primeros resultados empezaron a darse pasado el mediodía cuando se produjeron los arrestos.

La moto, que no estaba en la comisaría, fue recuperada por la víctima en la estación de servicios que está a la altura del Puente Negro; ahí cerca estaba el aguantadero donde la escondían.

Con respecto a los billetes marcados, la desaparición de $ 800 de los $ 2.500 existentes, hizo que se ordenara el arresto del todo el personal de guardia, seis de los cuales fueron finalmente desligados.

Repuestos de moto.

Lo curioso del operativo fue que ante la falta de $ 800 marcados, la policía descubrió que en realidad quien se habría quedado con parte del botín era el propio denunciante, que esa tarde cargó nafta y le cambió varios repuestos a su moto, tal como constataron los efectivos de Asuntos Internos. Por ese motivo, el hombre de 35 años permanecía hoy detenido.

/// la clave

Mensaje claro.

“Quiero ser muy respetuoso y prudente porque está actuando la Justicia”, dijo el jefe de la URI, Rafael Grau. Pero “el mensaje es muy claro y contundente hacia el interior de la fuerza. Respecto de los hechos, son inadmisibles y no pueden ni deben tolerarse”, afirmó el comisario. Por su parte, informó de la designación como interventor del comisario principal Darío Ghislandi, quien había asumido recientemente como jefe de la Cuarta Zona de Inspección.

/// EL DATO

Intervienen la Comisaría 5ta. por un caso de corrupción