llegan cartas

Qué “sapa”, señor...

Jorge A. Fontanetto.

L.E. 7.709.945, Santo Tomé.

Señores directores:

Las letras de tango muestran tanta realidad que por más que el tiempo transcurra ganan cada vez más vigencia. Indudablemente, aquellos poetas visionarios presagiaban el zafarrancho que se venía: Cambalache no es más ni menos que la postal actual y hace más de 80 años don Enrique Santos Discépolo se despachó con esta belleza:

La tierra está maldita, y el amor con gripe en cama, la gente en guerra grita, huye, mata, rompe y brama. Al hombre lo ha mareao el humo al incendiar y ahora entreverao no sabe dónde va, voltea lo que ve, por gusto de voltear, pero sin convicción ni fe.

¿Qué sapa señor?, que todo es demencial. Los chicos ya nacen por correspondencia y asoman del sobre sabiendo afanar. Los reyes temblando, remueven el mazo, buscando en yobaca para disparar, y en medio del caos que horroriza y espanta, la paz está en yanta y el peso a bajao.

¿Qué sapa señor?, que ya no hay borbones, las chicas se han puesto peor que los varones y embrollan al hombre. Ya nadie comprende si hay que ir al colegio o habrá que cerrarlo, para mejorar.

¿Qué te han hecho país? ¿Qué hicimos para que no te hagan lo que te hicieron?