La presidenta viajó al sur

Dólar: gobierno por ahora no evalúa adoptar medidas

Ratificaron que no se piensa en una devaluación. Economistas aconsejan plan antiinflacionario y control del gasto para frenar la suba.

De la redacción de El Litoral

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Aunque el dólar paralelo casi superó ayer los 10 pesos en Capital Federal -cerró en la city local a ese precio- en la Casa Rosada no se observó mucha preocupación y prueba de ello es que la jefa de Estado no modificó su cronograma de actividades. La importancia de que la primera mandataria viaje a su provincia es que cualquier decisión, si la hubiera, en materia cambiaria o económica siempre sería analizada y conversada en más de una oportunidad con Cristina. “Ninguna decisión, ni siquiera una de menor importancia deja de ser vista por la presidenta”, comentan en el entorno presidencial.

La opinión oficial con respecto a la suba del dólar fue dada a conocer por el vicepresidente Amado Boudou, cuando señaló que es “una cuestión muy marginal y muy especulativa que tiene que ver con no más de 100 mil o 200 mil” personas y señaló que el gobierno actúa para “los 40 millones de argentinos”.

Aunque dentro del gabinete existen diferentes posiciones con relación al impacto que tiene en la economía la suba del dólar blue, por el momento, Cristina se ha inclinado por la visión que sostiene que no hay que hacer nada en particular con este mercado.

De acuerdo con economistas privados existen consensos que el gobierno no hará nada para atacar las causas de la suba de la divisa que, entre otras, se explica por la inflación. Boudou advirtió ayer que “los precios no los sube el gobierno” y anunció que seguirán aplicando medidas “heterodoxas” para combatir la inflación.

Por su parte, el dólar oficial avanzó tan sólo un centavo y llegó a los $5,20, por lo que la brecha cambiaria ya se ubica en el 90 por ciento.

Buscando un cambio

Entretanto, economistas consultados por un portal de Internet porteño señalaron que se necesitan medidas para recobrar la confianza en la política económica.

Claudio Loser, economista y ex ejecutivo del FMI, dijo que el “atractivo del dólar” no se centra sólo en preservar el valor real de los activos en un contexto con inflación, sino también “protegerlo respecto de medidas arbitrarias, que pueden llegar incluso a la expropiación”.

Aseguró que “el problema desaparece con un cambio de política económica, que devuelva la confianza a los ciudadanos”. Loser opinó que una devaluación y/o flotación de la moneda ayudaría a parar la corrida, pero “tendría que ser acompañada por políticas antiinflacionarias”.

Agustín D’Attellis, de la Gran MaKro, refirió que “en términos de política fiscal o monetaria, el gobierno no va a encarar ningún cambio, como proponen sectores de la ortodoxia económica, ni ningún tipo de ajuste, porque esto no concuerda con la política fiscal y monetaria de este modelo, que responde a políticas contracíclicas en un escenario internacional adverso, para sostener la actividad económica y el empleo y el poder adquisitivo del salario”.

El dato

Afectados

• Para algunos analistas privados, el tipo de cambio muestra un retraso que está afectando las exportaciones en particular las correspondientes a las economías regionales. Federico Stuzzeneger, titular del Banco Ciudad dijo que “las exportaciones industriales” registran una caída del 18 % anual exceptuando las vinculadas con el sector automotor. “Todo esto es previsible con un tipo de cambio no competitivo”, aseveró.

La clave

Dos postura

• Economistas ortodoxos postularon la necesidad de iniciativas que sirvan para recuperar la confianza en la política económica, que incluyan un plan antiinflacionario y control al exceso del gasto público. Del lado del oficialismo, rechazaron una devaluación abrupta que degradaría los salarios, aunque reconocieron la falta de instrumentos de ahorro que desincentiven el interés por el dólar.

Reservas en baja

• Las reservas internacionales del Banco Central volvieron a registrar una caída y cerraron en 39.466 millones de dólares, de acuerdo con los resultados provisorios dados a conocer por la autoridad monetaria, que reflejan una pérdida de más del 25 por ciento respecto del récord histórico.

El nivel de reservas muestra de esta manera una caída de 3.824 millones de dólares en lo que va del año y de 13.188 millones en relación con el récord del 26 de enero de 2011, cuando se ubicaron en 52.654 millones de dólares.

En consecuencia, las reservas internacionales cayeron un 8,83 por ciento en lo que va de 2013 y un 25,04 por ciento en poco más de dos años.

Para encontrar un nivel de reservas inferior al de hoy hay que remontarse al 11 de mayo de 2007, cuando se ubicaron en 39.369 millones de dólares.