El campo vuelve al paro

La protesta le ganó a las propuestas

En esta oportunidad, el cese de comercialización comprende ganado en pie, granos y productos agropecuarios en general, quedando exceptuados todos aquellos productos perecederos, como leche, frutas y hortalizas. Ruralistas desmienten que la medida incluya cortes de ruta.

 

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Según expresaron las entidades ruralistas, la medida forma parte del plan federal de protesta que comenzara el 28 de mayo, “por lo que se sugiere continuar durante los días de cese de comercialización y posteriores con la campaña de concientización y/o esclarecimiento a la sociedad, exponiendo le brecha de precios existente entre lo que percibe el productor y lo que paga el consumidor”, expresaron puntualmente desde CRA.

Desde una de las entidad que componen la Mesa de Enlace, renovaron las críticas a la actual gestión nacional. “El gobierno nacional nos obliga a pasar de las propuestas a las protestas. Una vez más ignora hasta el más sencillo reclamo de diálogo. La presidenta no quiere escuchar y como representantes de los productores agropecuarios, tenemos la responsabilidad de hacernos escuchar. Es por eso que levantamos la voz. Para gritar que la familia rural está cansada de tanto maltrato. Entonces resolvimos hacer un cese de comercialización de todos los productos del campo excepto los perecederos”, destacan en el último parte de prensa.

Falta de diálogo

Por su parte, desde la Federación Agraria, se sumaron argumentando que “a nadie le gusta llegar al extremo de no vender lo que con tanto sacrificio genera. Pero solo hemos obtenido un silencio irrespetuoso como respuesta a los innumerables pedidos de audiencia a la presidenta de la Nación”.

Según los federados, nadie debe sorprenderse. “No nos podemos quedar de brazos cruzados. Ya hicimos nueve asambleas regionales donde comprobamos la profundidad de la crisis del campo en general y de las economías regionales en particular. Ya informamos al pueblo de la Nación sobre la brecha tremenda que existe entre la miseria que cobra el que produce y lo caro que pagan los alimentos en las góndolas el que consume”.

¿Desvinculaciones?

A su turno, CONINAGRO, entidad que nuclea al movimiento cooperativo, liberó a sus miembros de accionar como les resulte más conveniente. “Somos conscientes que nuestras federaciones de cooperativas pueden ser comprometidas por el accionar gremial que llevamos adelante. Lejos de nuestro interés está destruir o perjudicar la herramienta que con tanto esfuerzo construimos, las cooperativas. Frente a esta coyuntura, hemos decidido pedirle a las federaciones que analicen su desvinculación. Tal como lo ha hecho durante toda su historia, seguirá defendiendo los intereses de los productores agropecuarios cooperativistas que eligieron libremente ser representados por nuestra entidad. La misma cumplirá el mandato de los productores agropecuarios cooperativos que representa: trabajará en defensa del campo argentino”, expresaron .

Desde la Sociedad Rural Argentina, remarcaron que la modalidad implica que no se venderán granos ni hacienda, pero sí alimentos perecederos; “habrá productores a la vera de las rutas para difundir sus reclamos; no se alentarán cortes de ruta”.

Ecuación perder - perder

  • Según la Federación Agraria, La ecuación es nefasta para todos los argentinos: mientras los alimentos viajan de la tierra a la mesa, van desapareciendo agricultores, se concentran en pocas manos los que se llevan la mayor tajada y se encarecen los alimentos que compra el ciudadano de a pie.