Marcelo Colombo en Santa Fe

“El 99% de los casos del sistema prostibulario son de trata sexual”

  • La afirmación pertenece al titular de la Procuración de Trata de Personas y Secuestros Extorsivos. Cómo enfrentar situaciones donde la vulnerabilidad social parece ser una regla de juego.
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Colombo considera esencial respetar un protocolo de trabajo en todas las fiscalías federales para afrontar este delito

Foto: Luis Cetraro

 

Mario Cáffaro

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Marcelo Colombo está a cargo de la Procuraduría para el Combate de la Trata y Explotación de Personas, una dependencia de la Procuración General de la Nación que fue jerarquizada por la titular, Alejandra Gils Carbó, para entender en sensibles temas que el Congreso optó por dejar en la órbita federal por la facilidad con que este tipo de delitos rompe jurisdicciones provinciales e incluso nacionales.

Invitado por la diputada nacional Celia Arena y el Foro Generacional Santa Fe, Colombo estuvo en la ciudad donde participó de una jornada sobre trata de personas en la Bolsa de Comercio pero también atendió a organizaciones no gubernamentales que trabajan en la temática e incluso a familiares y a víctimas de trata. “Se debe tener mucha sensibilidad porque se trabaja en realidades muy distintas a las que uno está acostumbrado. En general, casi todas las víctimas de trata vienen de sectores muy vulnerables; es una característica que es nuclear al delito y al fenómeno en sí mismo y por lo tanto uno tiene que intentar ponerse en ese zapato que no es tan fácil”, reconoce en diálogo con El Litoral.

Admite que trabajar el tema implicó un cambio de tarea, incluso en la propia Justicia federal. “Es un delito donde la víctima es lo esencial”, recalca.

Fiscal de tribunales orales federales, en 2005 el entonces Procurador General, Esteban Righi, creó la unidad para investigar secuestros extorsivos y adicionó trata en el 2008 cuando se sancionó la ley para combatir este delito. De esa unidad derivó la nueva Procuraduría. “Veníamos desarrollando una tarea en todo el país con el secuestro extorsivo, cuando se sancionó la norma sobre trata al Procurador General le pareció que teníamos armadas buenas comunicaciones con fiscalías, juzgados y jueces federales como para estar en todo el país y nos asignó también trata que no siempre se da en una privación de libertad, estricta. En muchas ocasiones es un encierro más cultural, más sutil, utilizando coerción, amenaza, el no conocimiento del lugar, ni oponerse a relaciones abusivas. Al principio se entendía la trata como la víctima encadenada, encerrada. Es un supuesto de trata -quizás el más duro- pero no el único que hay”.

El abordaje a la víctima, tarea prioritaria

Una de las primeras tareas para coordinar la actividad de los fiscales fue elaborar un protocolo de actuación para unificar el abordaje a la víctima para que sea, primero asistida por psicólogos y asistentes sociales y que se le reciba declaración cuando esté en condiciones de hacerlo. “Este trabajo lo hacen oficinas del Poder Ejecutivo Nacional y fue necesario trabajar con los fiscales no acostumbrados a la recepción de declaraciones testimoniales con un organismo que no tiene nada que ver con el Poder Judicial”, explica.

Los casos de trata sexual, en la mayoría de las veces, no son denunciados inicialmente como tales sino como pedido de paradero ante la desaparición del domicilio de una mujer, generalmente joven. Colombo afirma que al recibir la denuncia la instrucción es tratarlo como un supuesto de máxima gravedad para no perder tiempo y teniendo en cuenta que las primeras 48 horas son vitales para la investigación.

Defiende la federalización del delito no sólo para el trabajo combinado de jueces federales sino además para “romper algunas lógicas de connivencia local que subsisten en la temática de trata. Cuando uno ingresa a un allanamiento, lo ideal es usar fuerzas no contaminadas con el lugar: Gendarmería en Capital, la Federal en las provincias”.

En Santa Fe, se discute una ley para prohibir la habilitación de prostíbulos, cabarets o whiskerías, medida adoptada en ordenanzas por varios municipios como por ejemplo Rosario. Colombo admitió que “cuando avanzamos en la investigación llegamos a la conclusión de que el 99% de los casos del sistema prostibulario son de trata, es decir explotación de mujeres por algunos de los medios. Siempre está la vulnerabilidad de fondo, las víctimas están en el 99% de los casos por necesidad. Cuando se puede ver la situación de víctimas, empezás a ver las reglas no escritas del sistema prostibulario: no pueden rechazar a ningún cliente, en el mejor de los casos deben dejar el 50% para las personas que las explotan, que trabajan sólo para el regente explotador, que tienen poca comunicación con el exterior, que no pueden tener autonomía. Pensar que una mujer tiene autonomía en un sistema prostibulario es prácticamente imposible por las mismas reglas y lógica del sistema prostibulario. Cuando uno dice hay que atacar al prostíbulo, al cabaret, en realidad se está atacando a la fuente esencial de la trata. Por otro lado, ese sistema prostibulario es una práctica social que es discriminatoria -históricamente- con las mujeres. Está compuesta por mujeres y al servicio de los hombres; forma parte de una práctica social dispar, una sociedad patriarcal que siempre pensó que el hombre necesitaba ese tipo de lugares para debutar, para tener sexo y eso se naturalizó hasta el día de hoy. Cuando uno intenta decir que el sistema prostibulario es el principal problema de la trata y la persona que se beneficia económicamente del sistema prostibulario básicamente es un tratante, al principio encuentra resistencias porque está muy naturalizado. Hay un montón de cosas que están en el medio y que es maravilloso que se estén discutiendo”, concluye.

La clave

Secuestros

Colombo recuerda que en 2003 cuando se creó la unidad de investigación de secuestros se estaba ante casos extensos de privación ilegal de la libertad cuyas bandas fueron luego desarticuladas tras sonados casos como el de Blumberg o del “Oso” Peralta. Sí reconoce que si bien ahora no aparecen secuestros largos, existe el llamado express, de pocas horas donde la víctima es llevada a cajeros automáticos o se piden rescates rápidos a sus familiares.

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El dato

Reconocimiento

El año pasado recibió el reconocimiento de parte del Departamento de Estado de los Estados Unidos por su compromiso en la lucha contra la trata de personas. La distinción se la entregó la entonces secretaria de Estado, Hillary Clinton. El argentino fue reconocido junto a otras nueve personalidades de distintas partes del mundo, entre ellos italianos, franceses, cameruneses. Reconoce la importancia de la distinción y recuerda que estuvo tres semanas en Estados Unidos intercambiando experiencia con los otros premiados.

Procesos, condenas y zonas rojas

Colombo reconoce que el negocio de la prostitución no tiene una sola cabeza, aunque sí connivencia entre quienes regentean el negocio y, en muchas ocasiones, con autoridades locales. En trata sexual, las zonas de mayor riesgo son las grandes ciudades como Buenos Aires, Rosario y enseguida añade Mar del Plata, Bahía Blanca y el sur del país, especialmente las zonas petroleras. El norte del país, el norte de Santa Fe y el noreste son zonas de captación y ubica a Misiones donde se aprovechan de jóvenes de tez blanca y rubias. “Son generalmente zonas de pobreza y sumisión, condiciones básicas. Cuanto más pobres, más vulnerables”.

Desde el 2008, primero la unidad y ahora la Procuraduría lograron el dictado de 90 condenas por trata, recordando que una de las primeras fue dictada en Santa Fe en noviembre de 2009.

Colombo recalca que cuando se habla de condenas de trata, el 90 por ciento está vinculado a delitos sexuales. Pero también habló de trata laboral que es la reducción a servidumbre o trabajo forzado. Señala como principales focos los talleres textiles en Capital y el Gran Buenos Aires y el trabajo rural en gran parte del país. Ante esto, destaca la nueva ley y la creación del registro de trabajadores rurales. “Lo que se pretende es mejorar las condiciones laborales de un segmento de producción donde el trabajo esclavo se presentaba con bastante regularidad”, explicó.