Una población profundamente dividida

Egipto al borde de una guerra civil

Egipto al borde de una guerra civil

Miembros del ejército patrullan las inmediaciones de la mezquita. Las autoridades niegan que hayan actuado de manera desmedida.

Foto: Agencia EFE

  • La mezquita de Al Fateh, en el centro de El Cairo, donde se refugian cientos de manifestantes islamistas desde ayer es escenario de duros enfrentamientos. En el “viernes de la ira” se calcula que hubo más de 100 muertos y miles de heridos.
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Redacción de El Litoral

Agencias EFE/DPA

Varios cientos de seguidores del ex presidente Mohamed Mursi se atrincheraron en una mezquita en la plaza de Ramsés en El Cairo y aseguraban tener miedo de salir porque podrían ser arrestados o agredidos, informó desde el lugar una fuente.

La policía consiguió sacar esta mañana a algunos de los islamistas de la mezquita de Al Fateh, pero el resto teme salir por miedo a ser atacados por otros civiles.

Alrededor de la mezquita se han reunido gran cantidad de residentes de la zona indignados porque el viernes se lanzaron disparos desde la manifestación de los islamistas, señala el fotógrafo.

Testigos indicaron a la emisora árabe Al Yazira que dentro hay aún unas 700 personas. El grupo se quedó allí tras disolverse una gran manifestación en favor de Mursi el viernes en la plaza Ramsés.

En el “viernes de la ira” convocado por los islamistas tras el desmantelamiento de sus dos campamentos de protesta en El Cairo hubo unos 100 muertos.

El portavoz del Ministerio del Exterior egipcio, Bader Abdel Atti, rechazó la acusación de que las fuerzas del orden actuaron de manera desmedida contra los manifestantes. Las protestas no eran pacíficas y por todas partes había grupos armados, afirmó Atti a Al Yazira, al tiempo que rechazó la intervención extranjera en los asuntos egipcios, venga de donde venga.

Previamente, la representante de política exterior de la Unión Europea (UE), Catherine Ashton, había criticado el gran número de muertos y heridos desde el desmantelamiento de los dos campamentos. La responsabilidad de la tragedia pesa sobre el gobierno de transición así como en general sobre la cúpula dirigente del país, señaló Ashton en un comunicado el viernes.

El Ministerio del Interior señaló hoy que la policía rechazó el viernes más de una decena de ataques contra comisarías en diferentes provincias. Un policía murió en un ataque contra la estación de policía de Ezbekiya, cercana al lugar central de reunión de los seguidores de Mursi. En varias zonas de El Cairo la policía tuvo que intervenir para impedir sangrientos enfrentamientos entre grupos civiles rivales. Según las informaciones oficiales la policía detuvo el viernes a 1.004 miembros de los Hermanos Musulmanes.

Los islamistas han anunciado una semana de manifestaciones contra el gobierno instaurado tras el golpe contra Mursi, lo que aumenta los temores de que continúe el derramamiento de sangre. Unas 630 personas han muerto desde la represión de los dos campamentos de protesta el miércoles.

Bajo las leyes de emergencia aprobadas por el gobierno esta semana, la policía tiene permiso para usar armas de fuego en defensa propia y contra manifestantes que ataquen edificios estatales.

La destitución de Mursi a manos de Ejército en medio de masivas protestas de la población ha dividido profundamente Egipto, el país árabe más poblado.

Mansur agradece

En este marco, el presidente interino egipcio, Adli Mansur, agradeció al rey saudí, Abdalá bin Abdelaziz, su apoyo a la lucha que libra Egipto contra el “terrorismo”.

“Egipto, que afronta con fuerza y firmeza el ataque terrorista, no olvidará quién lo respaldó y permanecerá siempre fuerte para defender a sus países hermanos en todas partes de nuestro gran mundo árabe”, destacó Mansur. También, dijo que Egipto y Arabia Saudí son las bases de la seguridad y estabilidad de la región, y que con unidad y cooperación saldrán victoriosos en el mundo árabe.

Desde Jordania, el ministro de Exteriores del reino hachemí, Naser Yudeh, defendió “los esfuerzos de Egipto para aplicar la ley y restablecer la estabilidad y la seguridad de su pueblo, además de hacer cumplir la libertad popular de acabar con el terrorismo y los intentos de injerencia en sus asuntos internos”, en un comunicado.

El dato

El rezo de Francisco

El papa Francisco observa con “creciente preocupación las graves noticias que llegan de Egipto y sigue rezando y espera que cese la violencia y que las partes elijan la vía del diálogo y de la reconciliación”, aseguró hoy una nota de la sala de prensa vaticana.

Tras celebrar el sábado la Eucaristía en la Solemnidad de la Asunción de la Beata Virgen María en la plaza de la Libertad de Castel Gandolfo y antes de rezar el Ángelus, el papa Francisco se dirigió a los fieles y dijo: “Llegan por desgracia noticias dolorosas de Egipto” e instó a los presentes a orar juntos “por la paz, el diálogo y la reconciliación en aquella querida tierra y en el mundo entero”.

Y antes de comenzar el rezo afirmó “deseo dirigir mi oración a la víctimas, a sus familiares, a los heridos y a todos los que sufren“ e instó a todos los presentes a hacer lo propio.