Tres novedades en las carteleras

Shakespeare tras las rejas

De la redacción de El Litoral

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Cine América presenta esta semana “César debe morir” (“Cesare deve morire”), de Paolo y Vittorio Taviani, un fresco sin precedentes del encierro carcelario con un homenaje a la mirada de William Shakespeare (siempre actual y universal) sobre la condición humana. Sólo ellos pueden hacerlo con sensibilidad poética y social, y con la rigurosidad necesaria para convertir a “César debe morir” en una pequeña obra maestra del cine contemporáneo.

La película dura una hora y cuarto, y sin embargo se extiende más allá del contexto de proyección. De hecho, aún después de abandonar la sala, el espectador sigue recordando los rostros de los reclusos de Rebibbia, su compromiso con el proyecto de interpretar la adaptación de Julio César, su empeño en quedar seleccionados en el casting, sus comentarios en el transcurso de los ensayos y después de la función realizada ante familiares y autoridades de la prisión.

“A veces me parece que Shakespeare habla de Nápoles” y “Desde que conocí el arte, esta celda se convirtió en una prisión” son tal vez las reflexiones más conmovedoras, en boca de dos convictos. Por un lado, los Taviani demuestran la perennidad del talento del Bardo, absolutamente vivo en contextos tan diversos como la Londres isabelina, la Roma imperial, la Nápoles natal del preso devenido en actor, e incluso los patios, pasillos, celdas de Rebibbia. Por otro lado, abordan la problemática del encierro institucional a partir de la relación que los condenados establecen con el arte en tanto antídoto contra la privación de libertad y sus efectos colaterales.

Salvatore, Giovanni, Antonio, Cosimo, Vincenzo, Francesco, el argentino Juan y demás reos convocados por el profesor de teatro Fabio Cavalli purgan penas superiores a los 15 años de reclusión por narcotráfico, asociación con la camorra o asesinato, y sin embargo inspiran una empatía que algunos espectadores considerarán perturbadora. En una entrevista concedida al sitio Leiweb, los realizadores cuentan: “Cuando volvíamos a casa (después de rodar) y hablábamos de ellos con tanto afecto, nuestros parientes y amigos nos recordaban que aquellos hombres habían cometido delitos graves, y sobre todo que algunas personas seguían sufriendo por eso: por los muertos, los asesinados, por las conspiraciones”.

Familia ensamblada

Cinemark presenta esta semana la comedia de acción “¿Quiénes *&$%! son los Miller?” (We’re the Millers), protagonizada por Jennifer Aniston y Jason Sudeikis. La película está dirigida por Rawson Marshall Thurber. David Clark (Sudeikis) es un traficante de marihuana de poca monta cuya clientela incluye chefs y madres de familia, pero no niños (pues después de todo, tiene escrúpulos).

Siendo así, ¿qué puede salir mal? Mucho. Prefiriendo mantener un perfil bajo por obvias razones, David aprende a la fuerza que no hay buena obra que quede impune. Al intentar ayudar a unos adolescentes de su vecindario termina siendo abordado por un trío de punks que le roban sus provisiones de marihuana y su dinero, dejándolo en deuda con su proveedor, Brad (Ed Helms). Para poder borrar su pasado (y mantener un buen estado de salud), David deberá convertirse en un verdadero traficante de drogas y traer de México la más reciente carga de Brad. Convence a sus vecinos, la cínica stripper Rose (Aniston), el potencial cliente Kenny (Will Poulter), y la adolescente que lo ha aprendido todo en la calle Casey (Emma Roberts) y elabora un plan a prueba de tontos.

Thurber dirige “¿Quiénes *&$%! son los Miller?” con un guion de Bob Fisher y Steve Faber (“Los Cazanovias”) y Sean Anders y John Morris (“Un Loco Viaje Al Pasado”) historia de Bob Fisher y Steve Faber. La película también es protagonizada por Emma Roberts (“El Arte de Vivir”), Nick Offerman (“Comando Especial”), Kathryn Hahn (“El Dictador”), Will Poulter (“Las Crónicas de Narnia: La travesía del viajero del alba”) y Ed Helms (Las películas de “¿Qué pasó ayer?”).

Chicos exitosos

“One direction: This is us” (Así somos), el segundo estreno del complejo, es parte docureality, parte concierto en 3D, y narra la historia de los orígenes de los cinco miembros del grupo, y sobre cómo Simon Cowell los unió tras haber competido juntos en el programa X-Factor en el Reino Unido. Además, ofrece a los espectadores la oportunidad de conocer a sus familias, explorar sus sueños y descubrir qué se siente al lograr un ascenso meteórico a la fama como el suyo. La película aspira a ser también una carta de amor dedicada a las leales fans de la banda. Morgan Spurlock (aquel alocado director y protagonista que se atoraba de hamburguesas en Super Size Me) y su equipo de producción seguirán al grupo mientras preparan y dan comienzo a su inminente gira mundial, relatando las historias que ocurran por el camino. El concierto central de la película será el que tuvo lugar en el O2 Arena de Londres, en abril de 2013.

Obviamente, los protagonistas principales son los integrantes del grupo que hace furor entre las adolescentes: Niall Horan, Zayn Malik, Liam Payne, Harry Styles y Louis Tomlinson.