“Leo” Madelón adelantó que hará cambios para el futuro
“Prefiero cortar un dedo ahora y no un brazo más adelante”
“Leo” Madelón adelantó que hará cambios para el futuro
“Prefiero cortar un dedo ahora y no un brazo más adelante”
La derrota de ayer en Pergamino causó más daño que sólo la imposibilidad de sumar, por eso el técnico rojiblanco anunció que contra Almirante Brown, el domingo, habrá caras nuevas en el 11 titular.

El que estuvo más cerca
Alejandro Gagliardi fue de mayor a menor en su rendimiento, aunque estuvo a punto de marcar un gol cuando le tapó Olivera un mano a mano después de un pelotazo cruzado de Vella. De ahí vino la jugada del primer gol. Foto: Gentileza La Opinión de Pergamino
Alberto Sánchez
Enviado especial a Pergamino
Luego del duro golpe que le propinó Douglas Haig a Unión ayer en Pergamino al ganarle 2 a 1 , los medios de comunicación que asiduamente acompañan al elenco rojiblanco cuando éste juega de visitante (entre ellos El Litoral), debimos esperar varios minutos más de los que normalmente transcurren para conocer el pensamiento del técnico, Leonardo Madelón, el único que tuvo el contacto con la prensa, ya que nadie más que él habló: “Voy a hablar yo solamente porque en este momento no tiene que hablar los jugadores. Ya lo hablé con los jugadores, yo me hago cargo de esto”, aclaró el entrenador tetengue.
Refiriéndose a lo sucedido sobre el campo de juego, “Leo” Madelón expersó: “Unión es más de lo que vimos hoy (por ayer). Fue un partido que de haber podido pasar a ganarlo, vino la contra y nos hacen el 1-0. Estabamos bastante bien, hasta que vino esa jugada de Gagliardi y vino el primer gol de ellos. No pude ver si hubo un error nuestro o si fue mérito del delantero. Pero estoy seguro que Unión es más”.
“Hoy no ganó Douglas, perdió Unión. Ese es el tema, perdimos por no saber liquidar un partido, por no saber resolver en los últimos metros, y eso duele mucho. Pero hay que creer en este plantel, yo creo, por eso hay que apoyarlo. Ahora hay que hablar muy poco y trabajar mucho en silencio”, agregó el entrenador rojiblanco.
—¿Te preocupa este momento del equipo?
—Si, estoy preocupado, y a la vez ocupado. Uno ya está acostumbrado a esto, ya hice un rápido diagnóstico, así que ya sé adónde tengo que acomodar las cosas. Los hinchas de Unión estamos dolidos por este momento, porque pretendíamos estar más arriba. Habrá que salir adelante rápidamente el domingo.
—¿Este resultado hace que deban replantearse los objetivos?
—Y si, obviamente vamos a tener que cambiar. Los resultados nos están obligando. Perder no es bueno, pero hay que prepararse. Aunque quedemos muy lejos, la vida sigue, Unión también. Ahora hay que seguir sumando y ganando.
—¿Cómo estás vos?
—Yo estoy bien, pero no quiero hablar mucho porque el hincha de Unión no tiene que escuchar nada. Cuando se pierde no es bueno escuchar tantas cosas. El técnico debe llamarse a silencio, trabajar mucho en la semana, revertir la imagen que dejamos hoy el domingo a la noche contra Almirante Brown.
—¿El problema es anímico o futbolístico?
—Problemas anímicos no hay, sólo es futbolístico. tenemos que resolver eso, Unión tiene que dar más. De ánimo estamos bien, con toda la vergüenza del mundo, porque cuando perdés es lógico que estés dolido y ahí es cuando hay que tener vergüenza, resguardarse y no hablar mucho para resolver el problema rápidamente, y eso tendrá que pasar el domingo con Almirante Brown.
—¿Unión está chocando contra una realidad que no esperaban?
—Puede ser. Ojalá que no sea así, ojalá ganemos el domingo que viene y muchos otros partidos. La ilusión nunca hay que perderla. Para eso hay que convencerse de que Unión es más de lo que mostró hoy.
Por último, y apresurándose para subir al micro que trasladaría a la delegación hacia Santa Fe, Madelón ratificó, con palabras aún más elocuentes, la intención de realizara variantes en el equipo: “Si en vez de perder hubiésemos empatado, igual opinaría lo mismo. A nosotros empatar no nos servía, queríamos ganar pero las cosas no se dieron como esperábamos. Buscaremos otra forma, otros jugadores, algo hay que cambiar, los cambios hay que hacerlos, porque a veces es preferible cortar un dedo ahora y no un brazo más adelante.
"Estas derrotas duelen mucho, sin dudas. Pero uno está preparado y ya tiene experiencia en estas cosas. Por eso repito que cuando pasa esto hay que cambiar, algo vamos a tener que cambiar, pero estamos tranquilos”.
Leonardo Madelón
Director técnico de Unión
"“La verdad es que no es el comienzo que todos esperábamos, tampoco es un desastre. Yo simplemente voy a esperar, voy a analizar las cosas y seguramente cambiaré. Cuando un equipo está mal, todos pueden entrar y todos pueden salir”.
Leonardo Madelón
Director técnico de Unión

De lo poquito para rescatar
Luciano Vella fue uno de los pocos que intentó algo y trató de salir del “escondite” futbolero de la mayoría. Un párrafo aparte para la cancha, que tenía el césped alto y desparejo. Foto: Gentileza La Opinión de Pergamino
El dato
Martínez y Ribas.
Mauricio Martínez y Juan Ribas reemplazaron a García y Magnín respectivamente. Madelón explicó lo que buscó con ambas variantes: “Ribas entró para que tengamos más la pelota y mejoramos un poco, porque jugábamos con dos puntas pero no la agarrábamos. Con la entrada de Martínez, la intención era copar más el medio, sobre todo por el lado de García. Lo estábamos controlando bastante bien, yo pensaba que terminábamos bien, a lo sumo creí que lo terminábamos sin riesgos”.
¡Marchen dos radiografías...!
Ninguno de los jugadores habló con la prensa al salir de los vestuarios. A Rodrigo Salinas y Pablo Magnín les costó llegar hasta el micro, ya que ambos presentan dolencias que obligaron a Madelón a sustituirlos. En el caso del “Potro”, el problema es su tobillo derecho y el primer diagnóstico es un esguince, lo que provocó una visible hinchazón en la articulación. Lo del “Morocho” se centra en su rodilla derecha, aunque hasta ayer no se arriesgaba una opinión al respecto. Es por eso que ambos delanteros iban a ser sometidos a diversos estudios (placas radiográficas en principio) para saber el grado de lesión de cada uno.
Equipo livianito
Gastón Dubois
Unión es un equipo livianito porque cuando sus mediocampistas pasaron al ataque, jamás presionaron a los defensores o a sus pares del Milan de Pergamino intentando provocar el error. El tatengue solamente llevó peligro con pelotas paradas (muy bien ejecutadas por Alemán) o algún rebote emanado de la segunda pelota, producto de algún tiro libre rechazada por el arquero local, como fue la antesala del contragolpe mortal previo al primer gol de Douglas, allá por el minuto 35 de la segunda etapa.
Dio mucha impotencia ver cómo Magnín, después reemplazado, “pescaba” algún pelotazo y tenía que enfrentarse sólo a toda la defensa del conjunto local, perdiendo siempre con sus marcadores. Nadie subía para ayudar al delantero. A veces Alemán, con algo de vergüenza deportiva, intentaba algo, pero enseguida se diluía en algún rechazo defensivo.
Ningún defensor tatengue se anticipó ni fue capaz de tapar “leyendo” el juego de los delanteros y mediocampistas locales. No supieron marcar retrocediendo ni anticipar atacando. Fue así como vino el primer gol y como los delanteros de Douglas erraron varios goles. Unión carece de estrategia y es un equipo livianito porque no se sabe a qué juega.
¿Está armado para jugar de contra? ¿Es un equipo para jugar con la pelota y en base a movilidad intentar lastimar? ¿Plantea un esquema defensivo? ¿Es un equipo ofensivo? Preguntas sin respuestas, o en todo caso, a la respuesta la tienen los músicos y el director de esta orquesta desafinada.

“Paco” se llenó de problemas
No fue para nada bueno el trabajo del marcador central rojiblanco. Lento, dejando algunos espacios en su zona y sin respaldar la subida de Vella, fue un calco del flojísimo rendimiento general del equipo. Foto: Gentileza La Opinión de Pergamino