Sobre la Línea 2 a El Pozo

MARÍA ELENA DE Bº EL POZO

“Los vecinos autoconvocados nos hemos unido para reclamar por la situación que se nos ha generado luego del cambio de parada de la Línea 2. El año pasado, nos prometieron que el mencionado traslado no se llevaría a cabo y no cumplieron. Desde que la parada está en Rincón, a los problemas que ya teníamos con esta línea -frecuencias largas e irregulares, coches destartalados, sucios, etc.- ahora se suma que a veces literalmente no podemos viajar. Cuando los coches llegan a nuestro barrio desde Rincón -sea en los horarios pico o no- siempre están cargados de gente, y muchas veces nos tenemos que quedar a esperar el próximo, con el riesgo de que arribe también cargado y no podamos viajar, o si lo hacemos sea como sardinas enlatadas. Esto ya es agresivo, discriminatorio. El 17 del corriente, salí de trabajar muy cansada, a las 18, y me dispuse a esperar el colectivo en el shopping Recoleta. Después de esperar mucho tiempo -junto conmigo había varios estudiantes y gente de edad variada-, llegó un coche tan cargado que circulaba con la puerta delantera cerrada y con gente en la escalera. ¿Esto es justo, digno? Conclusión: debí tomarme un taxi. Alguien me dijo que esa es una hora pico (las 18), pero en ese caso ¿no es que las horas pico tienen una frecuencia de 7 minutos? Es una vergüenza”.

Unas declaraciones engañosas

EVA

“Soy de Bº El Pozo y es indignante enterarse de las declaraciones del secretario general de la Municipalidad, Carlos Pereira, publicadas en El Litoral el 13 del corriente, quien textualmente afirma: ‘Las frecuencias de la línea en la calle están perfectas, conforme a lo convenido', y según monitoreo realizado durante ese día. Además agregó: ‘Los resultados que tenemos son que el sistema trabaja cómodo, conforme a lo previsto, con muchos servicios con todos los pasajeros sentados, ése es el porcentaje mayoritario'. ¿Ese señor está bromeando? Él tendría que venir a viajar todos los días como nosotros. Ya van varias veces que tengo que tomarme un taxi, gastarme lo que no tengo. Soy empleada de comercio y me exigen el cumplimiento de los horarios. A veces me voy llorando a trabajar por la impotencia que siento con este tema. ¿Que se cumplen las frecuencias?, eso sí que es gracioso. Estamos en 2014 y vamos para atrás como el cangrejo. ¿Cómo puede ser que un servicio se convierta en un antiservicio, en un dolor de cabeza?”.

Comparten un artículo de El Litoral

UN LECTOR

“Estoy de acuerdo con la opinión del Sr. Néstor Vittori, en su nota publicada en ese diario el 17 de marzo, sobre inseguridad, muy acertado todo lo que expresa. La gente ya no da más, esto es un descalabro y los políticos que hemos votado no nos dan soluciones, siendo un deber de ellos. No es tan difícil, son decisiones políticas que no se toman. ¡Y los derechos humanos!, que amparan a quienes tranquila e impunemente roban todos los días, casi sin apuro. El comentario cotidiano es: ¿a quién le robaron hoy? y... tuviste suerte si no te hirieron o mataron”.

A la ciudad le falta mantenimiento

GRACIELA

“La escalera mecánica y el ascensor que pusieron para cruzar al casino no funcionan. Las plazas se llenan de flores, las que luego no riegan. Los perros siguen ensuciando la ciudad y no se hacen multas. En el paseo de la Recoleta, las escaleras del supermercado una anda y la otra no. ¿Por qué en Santa Fe no se hace un mantenimiento de las obras? Se llena de luces una avenida, pero no se mantiene. Se arregla la Ruta 168, pero no se mantiene. Entonces es una pérdida constante de dinero del contribuyente y así no se maneja ni una casa, ni una ciudad, ni una república, ni nada. Hay dos carteles grandes en bulevar que dicen: ‘Puente cerrado', ¿cómo cerrado si el puente está abierto? Colocan los carteles y luego no los retiran, ni los pasacalles, ni las propagandas políticas ¿y así queremos que venga el turismo?”.