al margen de la crónica

Venganza

Una mujer española condenada por matar al violador de su hija ingresará en prisión tras haber sido desestimada por los jueces la petición de que se suspendiera la pena.

La condenada, María del Carmen García, ingresará en prisión en aplicación de una pena de cinco años y medio.

Su hija tenía 13 años cuando fue violada en 1998 por un hombre que fue juzgado e ingresó en prisión, pero en junio de 2005, cuando tenía un permiso carcelario, fue asaltado por la madre de la víctima, que le roció con gasolina y le prendió fuego.

María del Carmen García fue condenada en julio de 2009 a nueve años y medio por el crimen. El abogado de la madre pidió la semana pasada la suspensión de la pena al alegar que su encarcelamiento sería “palmariamente desestabilizador” para “su estado psíquico y físico a causa de su grave enfermedad mental” que, según el letrado, es “incurable”.

Hoy, tras conocer la decisión judicial, la mujer declaró que se dirigía hacia prisión y que después de ocho años se acababa su “calvario” de ir todas las semanas a los juzgados, ya que ha estado en libertad provisional.

Su hija, Verónica, afirmó que todos se encuentran “tranquilos” y añadió: “que sea lo que Dios quiera”.

La defensa había invocado el Código Penal para solicitar la suspensión de la pena, que establece que se podrá otorgar esa medida si el condenado está aquejado de una enfermedad incurable.

Sin embargo, un tribunal provincial desestimó la petición de la defensa y acordó que se proceda al “inmediato cumplimiento” de la pena que se impuso a la mujer.

Para el Tribunal provincial, “el trastorno que sufre la condenada no impide la ejecución de la pena privativa de libertad, pues ni es un padecimiento incurable, ni se ha justificado que la enfermedad‘ que sufre ‘pueda verse agravada o ser de imposible tratamiento en prisión”.