Es el director deportivo de Citroën Racing

Yves Matton: “Para todos es igual”

El titular del team donde corren “Pechito” López, Sebastian Loëb e Yván Müller, manifestó que por ahora nadie tiene preferencias dentro del team del WTCC (Mundial de Turismo)

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Sabe. El sábado anterior a la competencia que ganó “Pechito” López en 2013, el cordobés le dijo algo muy importante sobre la puesta a punto del auto a Yves Matton. Ello derivó en que el dirigente comenzara a averiguar antecedentes sobre el argentino y lo contrataron para esta temporada.

Foto: Gentileza Prensa Citroën Argentina

 

Daniel Monticelli/ Prensa Citroën Argentina

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Yves Matton es quien tuvo el olfato para llamar a tres pilotos de primerísimo nivel para competir en este 2014 en el Mundial de Turismo (WTCC) junto al equipo Citroën Racing. Y los tres le dieron un resultado fabuloso hasta llegar a Termas de Río Hondo, con dos de sus “drivers” en la punta del certamen. José María López y el francés Yván Müller, el otro es el galo “Seb” Loëb. El trío de vehículos Citroën C-Elysée es de lo mejor. Así opina sobre diferentes temas el director deportivo de la marca del doble Chevrón.

—La filial argentina de Citroën es, seguramente, la que más trabajo “extra“ le genera a la estructura del equipo. ¿Siempre hay encuentros con la prensa y distintas exhibiciones?

—Es verdad, pero estamos muy contentos de volver a la Argentina y todo lo que rodea a las carreras es también parte de nuestro trabajo y del objetivo que debemos cumplir: ser de utilidad a cada una de nuestras filiales.

—¿Cuáles son las diferencias más relevantes entre los viajes del Mundial de Rally y esta categoría del WTCC?

—El Mundial de Automóviles de Turismo (WTCC) es totalmente diferente, regido por otros parámetros y que obliga a un trabajo distinto. En el WRC se viaja mucho, se cubren grandes distancias —inclusive dentro de cada rally— y es indudablemente, más cansador. Exige, sólo de competencia tres días de concentración y destreza con muchos imponderables por delante, mientras que acá tenemos períodos de trabajo mucho más cortos, los cuales exigen también el 100% de cada uno pero en otro contexto. Ambos campeonatos mundiales son muy distintos y difíciles de comparar de manera directa.

—Con “Pechito” López encabezando el campeonato y cuando ya se empieza a cerrar la temporada es ineludible preguntar acerca de la estrategia que adoptará el equipo...

—Seré claro: no hay una estrategia definida en el equipo o algo que pueda denominarse de similar manera para este tipo de situación, donde todos nuestros pilotos están con chances de pelear por el título. Mi trabajo es arbitrar los medios para que Citroën sea campeón del mundo. El resto, las posibilidades de cada piloto, de momento, no es algo que se plantee puertas adentro: cada uno hace las cosas lo mejor que puede para cada circunstancia y todos pelean por la victoria con armas similares. Se podría hablar de una estrategia si, eventualmente, llegara un solo piloto con posibilidades y los otros no. No es éste el caso. El objetivo número uno es que la marca logre el Campeonato de Constructores y que un piloto Citroën se lleve el número 1.

—¿En cuáles aspectos cree que Citroën Racing aprendió rápidamente la lección y en cuáles todavía paga la falta de experiencia?

—Contamos con un auto, como se dice habitualmente, que está bien nacido, perfectamente concebido y que rápidamente demostró su potencial. Fue un gran éxito llegar a la primera carrera y saber que éramos realmente competitivos y que todo el tiempo de desarrollo y pruebas no había sido en vano. Sabemos y es parte de las carreras, que siempre hay puntos que se pueden mejorar, soluciones por explorar, evoluciones por generar. Si miro el transcurso de este certamen creo que en lo que más aprendimos -y significó todo un reto, un desafío- fue en el plano deportivo, en la experiencia de cada carrera. Un gran fin de semana, de un trabajo perfecto, puede desmoronarse ante un roce o una salida de pista producto de un choque. Aprendimos a estar y disputar siempre las principales posiciones con los tres autos a la vez. Comprendimos los riesgos y supimos administrarlo.