Cristina critica a Estados Unidos, Israel y Alemania

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CECILIA CAMINOS

(dpa)

Inmerso en una batalla contra los fondos de inversión especulativos, el gobierno argentino marcó en las últimas horas el giro en su política exterior con fuertes críticas a Estados Unidos, Israel y Alemania.

La presidente argentina, Cristina Fernández de Kirchner, eligió la Asamblea General y el Consejo de Seguridad de la ONU para cuestionar la estrategia de Barack Obama para combatir el terrorismo y denunciar “la complicidad del Poder Judicial” estadounidense con los fondos buitres, que reclaman el pago completo de los bonos soberanos argentinos en default.

Puso en cuestión las imágenes que difunden los milicianos del Estado Islámico (EI) y preguntó: “Al Qaeda y talibanes, ¿de dónde sacan las armas, los recursos? Me he tornado absolutamente desconfiada de todo”, justificó.

“No se combate el terrorismo haciendo sonar los tambores de la guerra, se combate con la paz”, sostuvo Fernández de Kirchner primero ante la Asamblea. Y en el Consejo señaló que “hacen falta menos halcones de guerra y más palomas de paz”.

Obama no usó auriculares para escuchar la traducción de su discurso ante el Consejo de Seguridad y pidió a los siguientes oradores que respetaran el tiempo estipulado para cada discurso, tras la extensa declaración de la presidente argentina.

Fernández de Kirchner disparó también contra el doble discurso según el cual “los que ayer eran malos hoy no parecen tan malos”.

“El año pasado nos criticaban a nosotros por hablar con Irán y resulta que ahora el secretario de Estado John Kerry se sienta a conversar con ellos”, reprochó por la noche en diálogo con la prensa argentina en Nueva York. Y luego cuestionó la televisación de la captura del líder de Al Qaeda. “Hubiese preferido que juzgaran a Osama Bin Laden”.

La relación entre el kirchnerismo y Estados Unidos estuvo signada históricamente por altibajos, que hoy vuelven a quedar expuestos.

Hace pocos días, el canciller argentino, Héctor Timerman, citó al encargado de negocios estadounidense, Kevin Sullivan, el cargo más alto actualmente en la embajada en Buenos Aires, para manifestarle el profundo malestar que generaron sus declaraciones periodísticas, en las que dijo que sería importante que la Argentina saliera del “default”.

Antes de partir de Nueva York, Fernández de Kirchner le respondió a Sullivan: “Lo que tiene la Argentina no es ‘default’. ‘Default’ es cuando un país no quiere pagar, y eso no es lo que ocurre con la Argentina. Lo que ocurre es que un juez le impide hacerlo, de modo que si ese juez encima es de tu país, tené la decencia de guardarte a silencio”.

En el marco de la pelea con los fondos especulativos, también cayó bajo críticas Alemania, por su “actitud hostil” y “favorable” con los “buitres”.

La presidente argentina cargó además contra Israel, por no reconocer a Palestina como Estado. En este marco, criticó el reciente ataque de Israel a territorios palestinos donde, dijo, “murieron niños, mujeres y ancianos” y “no hemos visto morir a ninguno de los líderes que tiraron cohetes para el otro lado”. Reprochó también a la comunidad judía argentina por haber primero apoyado el reclamo argentino de colaboración a Irán para esclarecer el atentado a la mutual judía Amia que en 1994 dejó 85 muertos en Buenos Aires, pero luego cuestionó el memorando firmado con Teherán.

En momentos en que el Consejo de Seguridad aprobaba una resolución para reforzar la lucha contra los combatientes extranjeros que se unen a organizaciones armadas como Estado Islámico y endurecer el combate al terrorismo, la mandataria argentina optó por seguir librando su batalla contra los fondos de inversión, abonar su postura antibelicista y defender su gestión presidencial.