Pulsos de la política provincial

Tormenta eléctrica

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Antonio Bonfatti, Mario Lacava, Griselda Tessio, Darío Boscarol y María E. Bielsa. Foto: Archivo El Litoral

Darío H. Schueri

Decadente e inquietante postal del futuro proselitista brindaron el jueves los diputados santafesinos peronistas y frentistas, ocupando tres cuarta parte de la sesión para propinarse -camufladas de réplicas a ofensas recibidas- severos mandobles políticos. Lanzaron además serias sospechas travestidas en certezas, todo en un delicado equilibrio sobre el trapecio, a gran altura y sin red.

Microclima político preelectoral, que lamentablemente enajena el verdadero debate que se intenta dar en torno del terrible azote de la inseguridad y el incontenible avance del narcotráfico que enloquece a la población, esa misma población a la cual el año que viene se intentará seducir electoralmente.

El oficialismo respondió a la “brutal agresión” contra el gobernador, midiendo con la misma vara. El propio Dr. Bonfatti se defendió pegando (al mejor estilo Carlos Monzón) y etiquetó como “mercenarios de la política” a “cuatro o cinco legisladores”; cross a la mandíbula del cual acusaron recibo los diputados del Movimiento Evita y el librepensador peronista Héctor Acuña. Naturalmente tampoco iba a desperdiciar la ocasión para discursear el obeidista Mario Lacava, quien se ofendió en nombre del Partido Justicialista ante las desmesuradas e intangibles acusaciones de legisladores del FPCyS, quienes surfearon en la ola nacional y popular hablando de “campaña destituyente”.

Tal como hicieran notar los radicales Griselda Tessio y Santiago Mascheroni, sería saludable para el sistema que, en lugar de “politizar la Justicia” y “judicializar la política”, cuando se presume de tener evidencias contundentes de algún hecho o circunstancias, se acuda a la Justicia primero en lugar de la difusión masiva, como ocurriera con el fraguado “mapa de la mafia” de Sunchales.

Curiosidades de la política que tornan más sobrenatural el panorama: oficialismo y oposición coinciden en pedir que la Justicia actúe dentro de sus a menudo irritables tiempos- con la mayor celeridad para dilucidar punzantes casos. Como por ejemplo la famosa intromisión de funcionarios políticos en la computadora personal de un narcotraficante asesinado el año pasado en Rosario. Caso que tiene su correlato en la difundida declaración ante una comisión legislativa de la Cámara de Diputados de la madre del empresario narco ultimado, que involucra al gobernador (y por efecto ósmosis, al FPCyS, tal como lo hiciera notar la diputada Tessio) como beneficiario de favores monetarios de su hijo -y por añadidura de la droga- en plena campaña electoral. Esta atribulada señora será citada para que ratifique sus gravísimas acusaciones en sede judicial.

De la misma manera, unos y otros quieren que se arroje luz sobre la desgrabación (que el gobernador dijo fuera adulterada mediáticamente ex profeso para perjudicarlo) de la conversación entre dos narcos detenidos uno de ellos policía que, para variar, también involucran al primer mandatario.

Sin contar el alucinante caso de los “mellizos de Zavalla”, supuestamente robados al nacer, episodio dado por cierto y con precipitadas acusaciones a personas que no figurarían en ningún expediente; siniestro caso éste que para el propio fiscal general Julio De Olazábal es de ilación sumamente dudosa, a la luz de los antecedentes probatorios obrantes en su poder (con los cuales citará a declarar a Liliana Montenegro, la madre supuestamente despojada de sus hijos), incluida la historia clínica de Montenegro, que la hermana Pelloni denunció como sustraída, cuando en realidad un medio de prensa de esta capital tiene copia en su poder.

La religiosa Pelloni en su raid acusador señaló a la ciudad de Tostado como epicentro de la “desaparición” de tres niños; hecho rotundamente negado por el senador departamental y residente en Tostado, Raúl Gramajo.

¿Hechos paranormales de la política? Mientras en Diputados, oficialismo y oposición libran una encarnizada guerra santa, a poco pasos, en Senadores, reina un clima de camaradería política envidiable. Sólo interrumpida por quisquillosos mensajes enviados por el Poder Ejecutivo como el denominado “impuesto verde” o la “tasa vial”. Y muy pronto el Presupuesto “electoral” 2015.

Evidentemente, la deseada composición de la futura Cámara de Diputados a partir del 10 de diciembre de 2015, que comenzará a moldearse con el cierre de listas en pleno carnavales del año que viene, atormenta a los 50 diputados que se resisten a la idea de tener que buscar otro rumbo en la política o la actividad privada- y excita a una cantidad incontable de aspirantes a sucederlos. Lamentablemente las estadísticas desde 1983 a la fecha no alientan demasiado las expectativas de masiva perdurabilidad.

Entre los que se meterán de lleno en el fragor de la disputa está el colega periodista y escritor rosarino Carlos Del Frade, que intentará una vez más (lo hizo sin suerte en 2011) llegar a la Cámara de Diputados con una coalición de izquierda que involucra a movimientos sociales de Rosario y partidos como Socialista Auténtico (PSA), Comunista Revolucionario (PCR), Frente de Izquierda y los Trabajadores (FIT), y también al Frente para la Ciudad Futura (FCF). A Del Frade se le sumará en la contienda, en este caso dentro del peronismo, con el armado de una lista propia el periodista, productor y dueño del multimedios Sin Mordaza, Carlos Delicia.

Hasta ahora el único que hace pública su precandidatura para renovar la banca de diputado es el presidente de la Cámara, Luis Rubeo. El resto otea el horizonte. La boleta única entusiasma y cautiva.

Tras otra frustrada convocatoria para la unidad del peronismo que debía llevarse a cabo en Capital Federal, la ex diputada María Eugenia Bielsa alienta las expectativas peronistas con la convocatoria en la localidad de Arocena a un plenario de presidentes comunales, intendentes y concejales de los departamentos Castellanos, San Jerónimo, Las Colonias, Garay y La Capital; pero dejando en claro que “no se hablará de candidaturas”. Idéntico formato desplegará en el Norte y el Sur antes de arribar a una definición.

Por lo pronto, el foro de presidentes comunales peronistas Pueblos Libres, que tuvo una acalorada reunión, en la localidad de Rueda hace un par de semanas por la futura conformación de una lista propia para diputados, no comulgaba demasiado con la convocatoria de “la Bielsa”. Tampoco los senadores.

Las vicisitudes del radicalismo, con su presidente Mario Barletta lanzado de lleno a la campaña por la gobernación, haciendo foquismo territorial y prescindiendo de las figuras senatoriales “para no comprometerlos” (cosa que no les agrada demasiado), y la descalificación del vicegobernador Jorge Henn a la entente nacional Massa Morales (mientras el diputado “barlettista” Darío Boscarol insiste en asociarse al PRO de Macri) darán tela para cortar.

Por ahora, hay que esperar a que amaine la tormenta eléctrica que se cierne sobre el espectro político santafesino.

Microclima político preelectoral, que lamentablemente enajena el verdadero debate que se intenta dar en torno del terrible azote de la inseguridad y el incontenible avance del narcotráfico.

Curiosidades de la política que tornan más sobrenatural el panorama: oficialismo y oposición coinciden en pedir que la Justicia actúe dentro de sus a menudo irritables tiempos.