Conferencia anual de la UIA

Méndez pidió previsibilidad para invertir

  • El titular de la Unión Industrial Argentina dijo que la inversión no es un proceso natural.
4-DYN12_1.JPG

Méndez observa a la ministra de Industria Deborah Giorgi. Foto: DyN

 

De la Redacción de El Litoral

[email protected]

DyN

El presidente de la Unión Industrial Argentina (UIA), Héctor Méndez, reclamó a la presidenta Cristina Fernández, condiciones para invertir, al señalar que la “inversión no es un proceso natural” sino que “necesita previsibilidad, estabilidad de cuestiones macro, impositivas y regulatorias”.

Al término de su discurso en la cumbre de la UIA, Méndez recordó que todos sus mandatos al frente de esa entidad se produjeron durante gobiernos kirchneristas y, con tono de broma, planteó: “Nunca tuve un jefe que no fueran ustedes, pero sobreviví”.

“La inversión no es un proceso natural, todo lo contrario, necesita previsibilidad, estabilidad de cuestiones macro, impositivas y regulatorias, progresión en la conformación de un mercado interno pujante, rentabilidad, aumento del acceso al financiamiento”, reclamó Méndez.

El presidente de la central industrial llamó a “repensar la política tributaria, a definir una inteligente inserción internacional, a aprovechar la inversión en infraestructura y la puesta en valor de los recursos naturales para desarrollar industrias y servicios de alta calidad”.

Méndez agregó que la industria nacional “necesita desarrollo económico y social, mayor inversión, mayor confianza, mejoras en la distribución a través de más y mejor trabajo en el sector privado, avanzar hacia la optimización de los servicios públicos para que sean de calidad, un conjunto de variables que requiere un abordaje sistémico que incluya al sector público y privado”.

Al respecto, el jefe de la UIA recordó que durante el último año esa entidad manifestó “objeciones a iniciativas cuya implementación dificulta y no incentiva el desarrollo de las potencialidades productivas”.

“Cuestiones como la necesidad de mejorar la gestión del comercio exterior, la rápida devolución de los impuestos y los reintegros a los exportadores, la consideración del impacto que tiene el no ajuste por inflación a la inversión, el impacto negativo de la Ley de Abastecimiento, la necesidad de detener la proliferación de impuestos y tasas provinciales que agobian a las empresas, y que son contrarias a una política de industrialización y de generación de valor son algunas de las problemáticas que afronta la industria”, detalló.

Al manifestar esos cuestionamientos, Méndez se dirigió a la presidente, quien estaba sentada a su lado, y le dijo: “No le va a gustar”.

En respuesta, la primera mandataria le indicó que “estaba acostumbrada” y él finalizó el contrapunto señalando: “Yo también”.

“No se trata de hablar solamente de lo macro o de temas cambiarios, tal como se desprende de encuestas y relevamientos técnicos que han sido presentados por profesionales de nuestra casa, la competitividad se pierde por un conjunto de pequeñas variables que podrían solucionarse con un trabajo conjunto del gobierno, trabajadores y empresarios”, manifestó.

En tal sentido, Méndez aclaró que las “diferencias” no les “impide continuar dialogando con el gobierno, ni al gobierno dialogar con las instituciones” por lo que resaltó que la presencia de la jefa de Estado “reafirma la voluntad de construir más allá de los disensos”.

Cristina: “Repitieron profecías que no se cumplieron”

  • La presidente les reprochó a dirigentes empresarios que “repitieron profecías que les dijeron” y no se cumplieron contribuyendo a crear expectativas negativas, y subrayó que la actividad industrial “no se cae nada”.

La mandataria reveló además que las facturación registrada del empresariado cerrará 2014 con un aumento nominal de 1.184 por ciento acumulado desde el 2003, al tiempo que destacó que la mayor porción de ese incremento quedó en poder del sector financiero.

En el inicio de su discurso, la presidente respondió a Méndez al señalarle que “con el kirchnerismo, la industria revivió”. Al criticar las expresiones públicas del sector, Cristina Fernández sostuvo que “van generando un clima que realmente no es el de los números concretos que nuestras principales empresas exhiben”.

En ese sentido, destacó datos de ventas y facturación de una serie de empresas con oferta pública en la Bolsa de Comercio de Buenos Aires.

En ese marco, sostuvo que “es una tontería creerse las mentiras” y subrayó: “Quédense tranquilos que nuestras empresas están vendiendo bien y obtienen buenos resultados”.

“Tuvimos picos importantes (de actividad) durante 2013, no nos estamos cayendo al abismo, estamos teniendo menor actividad, tal vez, del pico máximo” del año pasado y citó la “producción y patentamiento récord de automóviles”.

La presidente consideró que “una de las claves de la reindustrialización de la Argentina ha sido el sector energético” y enumeró una serie de obras realizadas durante los 11 años de administración kirchnerista.

Al referirse a la política energética también defendió la estrategia de subsidios porque resaltó que fue una de las políticas aplicadas para sostener la “competitividad” de la economía.

En ese sentido, además de los costos industriales remarcó que los subsidios al trabajo permitieron “el transporte de la fuerza laboral” con tarifas baratas que le quitaban presión a los reclamos salariales de los trabajadores.

Por su parte, los empresarios cuestionaron los números sobre crecimiento extraordinario de facturación y ganancias de empresas que expuso la presidente ya que advirtieron que no toman en cuenta la inflación y carecen de ajuste.

La visión santafesina

  • El secretario de la Federación Industrial de Santa Fe, Carlos Garrera, consideró que los números que exhibió la presidente de la Nación sobre el desempeño de la industria fueron contundentes y respecto a la necesidad de generar confianza y previsibilidad para atraer inversiones al país no es una mirada de todo el sector sino de una parte.

“Las palabras de Méndez son eslóganes que representan sólo a una parte de la Unión Industrial Argentina, que son quienes piden tener reglas previsibles. La realidad es que desde el sector Pyme lo que necesitamos es mercado porque cuando vendés, invertís. Por ahí, los grandes necesitan otras condiciones. Nosotros, mientras vendamos nos arreglamos. Por eso, lo que tenemos que cuidar es el mercado interno y por eso nos pareció bien que la presidente recuerde que el mundo está ajustando a través del salario”, explicó Garrera quien participa de las reuniones de la UIA en representación de la Asociación de Industriales Metalúrgicos de la República Argentina.

“Las cifras que exhibió la presidente de la Nación fueron contundentes para demostrar que si bien este año hubo una caída de la actividad, venimos de más que triplicar la producción. Es cierto que este año tenemos una caída de alrededor del dos por ciento, que si le sacás la caída del sector automotor está casi en los mismos niveles que el año pasado. Hay una desaceleración, pero no estamos al borde del abismo”, explicó.

“Las empresas grandes han ganado plata. De todos los sectores de la economía, la industria y el sector primario son los que menos renta han tenido. Pero la intermediación y más aún la intermediación financiera son las que más ganaron. Esto quiere decir que hay una apropiación de la renta de los sectores productivos. Éste es un tema a analizar porque uno hace muchos esfuerzos para ganar algún punto de competitividad, que resulta lo terminamos perdiendo por las tasas que cobran debido a los descuentos de cheques o las de los descubiertos”, manifestó Garrera.